El director de “El cuervo” original se burló del remake por su fracaso en la taquilla

Alex Proyas, el director de la versión original de El cuervo (The Crow) de 1994, no ha ocultado su descontento hacia el reboot de la película tras su fracaso en la taquilla. La nueva versión, estrenada por Lionsgate, apenas recaudó USD 4.6 millones de dólares en su primer fin de semana, a pesar de haber contado con un presupuesto de producción de USD 50 millones de dólares.

Proyas ha hecho continuas referencias en sus redes sociales criticando severamente este reboot. En su página de Facebook, el director recordó el trágico fallecimiento de Brandon Lee durante la filmación de la versión original y reiteró que la memoria del actor y el legado de la película no deberían ser empañados por remakes.

“Pensé que la nueva versión era un intento cínico de hacer dinero. Parece que no hay mucho dinero que obtener”, comentó Proyas en referencia al bajo rendimiento en taquilla del film. El cineasta ha compartido también en sus redes sociales varias críticas negativas de la nueva película.

Un ejemplo de su tajante opinión en contra fue una reseña que calificó al reboot de “la peor película del año”, a lo que Proyas respondió: “La reseña que todos esperábamos. Es un poco como golpear a un caballo muerto ahora, así que creo que pararé hasta que aparezca otra crítica divertida”.

La película, que pretendía revitalizar la franquicia con Bill Skarsgard en el papel principal, ha enfrentado numerosas dificultades desde su concepción. En marzo, cuando se lanzó el tráiler, Proyas ya había manifestado su descontento, insistiendo en que El cuervo debía permanecer como un proyecto único en honor a Lee.

“No siento alegría al ver negatividad sobre el trabajo de mis colegas cineastas. Estoy seguro de que el elenco y el equipo tuvieron las mejores intenciones, como todos nosotros en cualquier película,” escribió Proyas en sus redes sociales, donde la mayoría de los comentarios respaldaron su clara opinión.

El cuervo original goza de un estatus de culto, en gran parte impulsado por la trágica muerte del actor protagonista, Brandon Lee. La historia, basada en el cómic del mismo nombre, sigue siendo una obra emblemática en el género de adaptaciones de cómics y películas oscuras de venganza.

El thriller torcido de la directora Zoe Kravitz, Parpadea dos veces, se posicionó como el estreno más fuerte del fin de semana. Sin embargo, la película apenas logró ganar $7.3 millones en sus 3,067 cines, quedando en el cuarto lugar en taquilla. Mientras tanto, el reboot de Lionsgate de El cuervo, protagonizado por Bill Skarsgård como un músico asesinado que vuelve a la vida para vengar su muerte y la de su prometida, fracasó rotundamente con solo $4.6 millones recaudados en 2,752 cines, ocupando el octavo lugar.

El mayor éxito del fin de semana fue el regreso de Deadpool & Wolverine al primer puesto del box office en su quinta semana. La reciente película de Marvel, que une a Ryan Reynolds y Hugh Jackman, dominó nuevamente la taquilla en medio de una competencia débil, donde los nuevos títulos de Kravitz y Skarsgård, tuvieron un bajo desempeño.

El cuervo fue una de las apuestas más costosas de Lionsgate, con un presupuesto de producción de $50 millones. No obstante, esta película marcó la segunda decepción consecutiva para el estudio, tras el fracaso de “Borderlands”, una adaptación de videojuego que se estrenó en agosto pero terminó en el puesto 16, recaudando solo $500,000 en su tercera semana.

Esta última producción, que contó con actores de renombre como Cate Blanchett, Kevin Hart y Ariana Greenblatt, se produjo con un exorbitante presupuesto de USD $115 millones, pero resultó ser uno de los mayores fracasos del año con ingresos de apenas USD $15 millones en Norteamérica y USD $23 millones a nivel mundial.

Los críticos fueron un poco más generosos con Parpadea dos veces en comparación con El cuervo. El film protagonizado por Channing Tatum recibió un 79% en Rotten Tomatoes, a diferencia del 20% “rotten” del film dirigido por Rupert Sanders. A pesar de esto, el público dio a ambas películas una calificación de “B-” en CinemaScore, lo cual sugiere que su continuidad en las salas dependerá del boca a boca.