Megalópolis, la ambiciosa película de ciencia ficción con la que Francis Ford Coppola regresa a los cines está en el ojo de la tormenta tras la difusión de un controvertido video grabado por un miembro del equipo durante el rodaje. En las imágenes, se observa al reconocido director acosando e intentando besar a varias jóvenes que actuaban como extras en el set.
La escena en cuestión, en la que también aparece la actriz Nathalie Emmanuel (Juego de tronos), fue filmada el 14 de febrero de 2023 en el Tabernacle, una sala de conciertos de Atlanta, ambientada como un club nocturno.
Según la hoja de convocatoria a la que la revista Variety tuvo acceso, las actrices que interpretaban a asistentes de la fiesta, habían sido autorizadas para aparecer en escenas de “desnudez en topless”, mientras que otras habían sido convocadas para “estar escasamente vestidas”.
Fuentes presentes durante la filmación describieron el comportamiento de Coppola como “poco profesional”. Según una de ellas, el director “no dejaba de saltar para abrazar y besar a varias mujeres, a menudo insertándose sin querer en la toma y arruinándola”.
El mismo informante le dijo a Variety que había trabajado con otros cineastas muy importantes “y ese comportamiento era poco común”. “Lo máximo que he visto a un director es decir algo como ‘mucha energía, chicos’. Nunca he visto a nadie en el plato tocar siquiera a un actor, y esto se extiende a un operador de cámara”, agregó.
Además, reveló que, tras varias tomas, el director de El padrino tomó un micrófono y anunció, “al alcance del oído de todos en la sala”: “Lo siento si me acerco a ti y te beso, solo debes saber que es solo para mi placer”.
Las acusaciones habían sido expuestas
Estos videos parecen corroborar un informe previo de The Guardian, publicado el 14 de mayo, días antes del estreno mundial de Megalópolis en el Festival de Cannes. Dicho artículo afirmaba que el cineasta de 85 años “trató de besar a algunas de las extras femeninas en topless” y les dijo que “estaba tratando de ponerlas de buen humor”.
Tras la controversia, el propio Coppola intentó defenderse en una entrevista con The New York Times y alegó que no era un “sobón afectuoso”, sino “demasiado tímido”. “Mi madre me decía que si te acercas demasiado a una mujer significa que le faltas al respeto, y yo no le faltaba el respeto a las chicas que me gustaban”.
El equipo de Coppola también emitió dos comunicados oficiales. Darren Demetre, productor ejecutivo del filme, señaló: “Hubo dos días en los que filmamos una escena de celebración en un club al estilo Studio 54, en la que Francis caminó por el set para establecer el espíritu de la escena dando abrazos y besos en la mejilla a los actores”.
Y defendió la actitud asegurando que “era su manera de ayudar a inspirar y establecer la atmosfera del club, que era tan importante para la película. Nunca supe de ninguna queja de acoso o mala conducta durante el transcurso del proyecto”.
Por su parte, Mariela Comitini, primera asistente de dirección del largometraje, describió trabajar con Coppola como “un honor” y aseguró: “Vi cómo Francis creaba un ambiente vibrante, profesional y positivo en el set. Como uno de los cineastas más respetados de la industria, no se dejó intimidar por la enormidad de esta tarea”.
Sin embargo, las fuentes de Variety cuestionaron la descripción de Comitini, asegurando que, durante el rodaje de la escena del club nocturno, los miembros del equipo se miraron incómodos mientras Coppola “acosaba” a los actores de fondo, pero nadie objetó públicamente su comportamiento ni intentó detenerlo.
Uno de los entrevistados especuló que esta actitud podría deberse al grado de control que Coppola ejercía sobre la producción. Al haber financiado completamente la película con USD 120 millones de dólares de sus propios ahorros, no había un estudio externo o un servicio de streaming con su propio departamento de recursos humanos involucrado en el proyecto. “¿Con quién se suponía que debían hablar? ¿Quejarse con Coppola y denunciar a Coppola ante sí mismo?”, cuestionó.
Una tercera fuente sostuvo que el mencionado video había circulado durante un largo periodo entre los involucrados en el rodaje, pero que recibieron una alerta por parte de la producción recordándoles los acuerdos de confidencialidad a los que estaban sujetos, por lo que no podían compartir imágenes del detrás de cámaras.
En junio, Lionsgate aseguró los derechos de distribución de Megalopolis en Estados Unidos y programó su lanzamiento para el 27 de septiembre de 2024. Coppola, quien cubrirá los gastos de marketing, buscaba una fecha que permitiera a la película calificar para la próxima temporada de premios.