Molly Ringwald, conocida por su participación en éxitos de los años 80 como Dieciséis velas, El club de los cinco y La chica de rosa, reveló que fue víctima de “depredadores [sexuales]” cuando era una joven estrella adolescente en Hollywood.
En una reciente entrevista con el podcast WTF con Marc Maron, Ringwald, de 56 años en la actualidad, admitió que, a pesar de su naturaleza tímida e introvertida y su preferencia por quedarse en casa en lugar de salir como otras chicas de su edad, tomaron provecho de ella de todas formas.
“Nunca realmente me sentí parte de una comunidad cuando estaba en Hollywood, solo porque era muy joven”, comentó Ringwald. “No estaba interesada en salir a clubes. Me siento más social ahora que entonces. Era demasiado joven”.
Ante la sugerencia de Maron de que tuvo suerte de no haber sido víctima de una “horrible situación”, Molly Ringwald respondió entre risas: “Oh, se aprovecharon de mí. No puedes ser una joven actriz en Hollywood y no tener depredadores alrededor”.
A pesar de encontrarse en “situaciones cuestionables”, afirmó que contaba con un “increíble instinto de supervivencia y un gran superego” que le permitieron “encontrar una forma de protegerse”.
Sin embargo, reconoció que la experiencia puede ser “aterradora”, especialmente ahora que su hija de 20 años, Mathilda, está ingresando a la misma profesión, incluso después de que ella hiciera “todo lo posible para convencerla de hacer otra cosa”.
La incomodidad por sus películas de los 80
En los últimos años, la estrella de cine ha expresado su incomodidad con algunas escenas de sus antiguas películas, como en Dieciséis velas (Sixteen Candles), donde el interés amoroso de su personaje, Jake Ryan (Michael Schoeffling), sugiere aprovecharse de su novia inconsciente después de una fiesta.
En una entrevista con NPR en 2018, Ringwald afirmó que, si bien el director John Hughes no tenía la intención de hacer películas sexualizadas, “los tiempos eran diferentes y lo que era aceptable entonces definitivamente no lo es ahora, y tampoco debería haberlo sido entonces”.
La actriz expresó sentirse “muy diferente” sobre esas películas en la actualidad, reconociendo que es una “posición difícil” porque hay mucho que le gusta de ellas, pero se opone a gran parte de su contenido.
Recientemente, comentó que al ver The Breakfast Club con su hija Mathilda, notó que el personaje de Judd Nelson, John Bender, “acosa sexualmente” a su personaje, algo que considera que no ha envejecido bien. “Estoy feliz de que podamos mirar eso y decir que las cosas son realmente diferentes ahora”, agregó.
Tras el surgimiento del movimiento #MeToo, Molly Ringwald escribió un ensayo para The New Yorker en 2018, donde afirmaba que las actrices de los 80 “tendían a ser mucho mayores que sus personajes” debido a que “tenían que serlo, ya que las películas eran tan frecuentemente explotadoras”.
Además, señaló que “las exitosas comedias adolescentes de la época, como Animal House y Porky’s, fueron escritas por hombres para chicos; las pocas mujeres en ellas eran o ninfómanas o matriarcas”.
Tras su época en el “Brat Pack”, Ringwald ha actuado en Broadway, series de televisión prestigiosas como Feud: Capote vs. The Swans y Dahmer, ambas producidas por Ryan Murphy. También ha interpretado papeles de madres de adolescentes en éxitos como La vida secreta de la adolescente americana, Riverdale y El stand de los besos. Además, se interpretó a sí misma en la parodia adolescente No es otra tonta película americana en 2001.
A pesar de haber sido una figura destacada en el cine de los 80, Molly Ringwald ha sido franca al reconocer los problemas presentes en algunas de las películas que la lanzaron a la fama, abogando por un cambio en la forma en que se retrata a las mujeres jóvenes en la pantalla grande.