En el ámbito de las supermodelos y empresarias, Cindy Crawford destaca no solo por su trayectoria en las pasarelas sino también por su exitosa incursión en el mundo empresarial junto a su esposo, Rande Gerber.
Recientemente, en un episodio del podcast “Kelly Corrigan Wonders: About Your Mother”, conducido por Christy Turlington Burns y Kelly Corrigan, Crawford compartió detalles íntimos sobre su vida familiar, su carrera y su más reciente proyecto empresarial, Casamigas Jalepeño Tequila. Este lanzamiento marca una nueva adición a la marca Casamigos, cofundada por Gerber, George Clooney y Mike Meldman.
Desde una edad temprana, sobresalió en el ámbito del modelaje y logró ganar más dinero que sus padres cuando apenas tenía 18 años. “Empecé a modelar en Chicago, y en Chicago es un estanque pequeño, así que rápidamente fui el pez grande”, reveló Crawford. “Y yo ganaba más dinero del que ganaban mis padres, más dinero del que jamás hubieran podido soñar”.
Esta situación, según comentó, generó dinámicas familiares peculiares, especialmente después de haberse mudado a Nueva York, donde su carrera tomó un vuelo aún mayor. Se convirtió en “el hijo de una manera extraña”, pues su único hermano murió de leucemia a los 3 años, cuando ella tenía 10.
Sin embargo, de cierta forma, pudo apoyar a sus dos hermanas, Chris y Danielle. “Pude ayudar en lo que pude”, sostuvo. “Mis hermanas no tienen expectativas”. Explicó que, en cuestiones de regalos, tiene cuidado en no hacer compras muy lujosas, porque podría amenazar a sus maridos.
“Si le doy a mi hermana un anillo más bonito que el que les regala su marido o algo así, se convierte en algo raro”, confesó. “Yo era más de dar experiencias y luego ayudarlas si necesitan un anticipo para una casa o algo así. Mis hermanas han sido increíbles porque siempre me han devuelto el dinero. Pero navegar estando en esa posición financiera en la que podrías hacer mucho es complicado”.
El sólido matrimonio de Cindy Crawford
Rande Gerber y Cindy Crawford comparten una relación construida sobre la base de la amistad, respeto y apoyo mutuo, lo cual ha sido fundamental para su éxito tanto personal como profesional.
Al hablar sobre los secretos de su matrimonio de 25 años, Crawford destacó la importancia de la amistad y la comunicación: “Rande y yo fuimos amigos primero. Definitivamente, teníamos química, pero teníamos una amistad”. Esta sólida base les ha permitido superar momentos difíciles, manteniendo siempre el respeto y la compasión por el otro.
La pareja ha enfrentado el desafío de adaptarse a una nueva etapa de sus vidas como “nidos vacíos”, después de que sus hijos, Presley y Kaia, iniciaran sus propios caminos. Esto ha implicado un esfuerzo consciente por redefinir su relación y encontrar nuevos intereses comunes.
“Tenemos este nuevo capítulo en nuestra vida donde nuestros hijos básicamente se han ido y es bueno si todavía te gustas al final de todo eso”, reflexionó Crawford sobre este proceso de reacomodo vital.
El éxito de Cindy Crawford y Rande Gerber no se limita a sus carreras individuales, sino que también se extiende a sus empresas conjuntas, demostrando una profunda sinergia en sus esfuerzos colaborativos.
La elaboración de Casamigas Jalepeño Tequila surgió de manera orgánica, inspirada en los gustos personales de Crawford por los margaritas picantes. “La idea de nuestro nuevo tequila comenzó antes de la pandemia”, compartió Crawford. La decisión de explorar este sabor específico se hizo mientras disfrutaban de un verano en Canadá.
A pesar de sus diferencias en el enfoque laboral, esto ha resultado en un sólido equipo. Tal como Crawford lo pone, aunque técnicamente está trabajando para Gerber en este nuevo proyecto, la dinámica de respeto y colaboración define su relación laboral y personal.