Michael J. Fox, uno de los íconos más destacados de la década de 1980 en Hollywood, recientemente compartió su perspectiva sobre cómo ha cambiado la naturaleza de la fama desde su época dorada hasta la actualidad. Ello, considerando que ahora el mundo del arte y las celebridades depende mucho de las redes sociales.
Durante una entrevista con la revista People, el actor recordado por su personaje de Marty McFly en la trilogía Volver al futuro, dijo que ahora la popularidad se alcanza con mucha más facilidad en contraste a lo que él considera eran demandas más rigurosas de talento en el pasado.
En los ochenta, “éramos diferentes, la tuvimos más difícil”, argumentó el artista. “No teníamos redes sociales o alguna de esa m*erda. Solo éramos famosos con nuestros propios recursos y fue una época increíble”.
Cuando se le consultó si realmente era más complejo alcanzar el estatus de celebridad, Fox respondió que en esa época había que mostrar habilidades reales para destacar. “Bueno, tenías que ser talentoso. Eso ayudaba”.
El actor ironizó sobre la “viralidad” y cuestionó que el panorama actual priorice la imagen y otros aspectos superficiales. “Solíamos darlo todo, entrenar nuestra actuación, ver a otros colegas y hablar con ellos, hablar de interpretación y más cosas”, explicó a la publicación. “Y ahora tienes a gente que solo aparece y dice ‘¿Cuál es (la marca de) tu suéter? ¿Cómo es este paso de baile?’ y ya son las personas más famosas del mundo”.
Más allá de su crítica a la fama moderna, Fox también compartió su visión personal y profesional frente a los retos que enfrenta debido a su enfermedad. El actor comenzó a percibir síntomas de Parkinson desde 1990, cuando tenía solo 29 años. Todo empezó con un temblor en el dedo meñique. Los especialistas pronosticaron que solo tendría las posibilidades de actuar por una década más; pero él siguió trabajando por 30 años.
En 2020, decidió comunicar su retiro temporal pues se le hacía mucho más complicado el memorizar sus diálogos.
Ahora, en la entrevista con People mencionó que, aunque su participación en proyectos actorales ha disminuido, no descarta la posibilidad de volver al set si se presenta el papel adecuado que se adapte a su condición actual.
“Si alguien me ofrece un papel y lo hago y lo paso bien, genial. El documental [de 2023, La vida de Michael J. Fox] fue una gran emoción”, aseguró, añadiendo además que “Haría actuación si surgiera algo en lo que pudiera poner mis realidades, mis desafíos y si pudiera resolverlo”.
Y mientras el papel correcto llega, la familia y la fundación de Fox para la investigación del Parkinson han sido sus pilares desde su retiro del foco mediático convencional. Sin embargo, el actor podría esperar un tiempo para regresar al set, pues reveló recientemente que 2023 fue un año sumamente retador.
“Ya sabes, mi hija también se va a casar... están pasando cosas buenas, y la vida es buena. Así que ha sido un buen año, seguro. (Ha habido) Un montón de retos físicos estos días han sido diferentes partes, pero solo era que tenía un montón de cosas... Tenía una película, un documental y un montón de obligaciones”.
Hasta el momento, su última aparición importante en televisión fue en un episodio de la serie jurídica The Good Fight. Además hace poco promocionó su documental STILL: la vida de Michael J.Fox, albergado en Apple TV+, una producción en la que narra su lucha y tratamiento contra el Parkinson.