Casi seis años después de anunciar su separación formal, Channing Tatum y Jenna Dewan acudirán nuevamente a la corte debido a una disputa legal en torno a las ganancias generadas por la franquicia cinematográfica Magic Mike, proyecto que destacó la carrera del actor y productor. Ambos deberán testificar en el juicio vinculado a su divorcio que se retoma este 12 de abril, un nuevo capítulo en su prolongado proceso de distanciamiento.
En el centro del conflicto se encuentra la contribución financiera y creativa a la serie de películas que nació en 2012. Como se ha registrado en diversas entrevistas, Magic Mike estuvo inspirada en las experiencias pasadas de Tatum como bailarín exótico.
Ante el enorme éxito de la película, se desarrollaron secuelas en 2015 y 2023, así como un reality show derivado y un espectáculo en vivo en Las Vegas.
Respecto al tema, Dewan argumenta que las ganancias generadas por la ficción y sus productos relacionados deberían considerarse como parte de los activos maritales, y por lo tanto, sujetos a división. Según documentos judiciales a los que Today.com tuvo acceso, el equipo legal de la actriz sostiene que las películas y sus “extremadamente lucrativos” derivados, fueron “desarrollados y co-financiados por Channing durante el matrimonio con esfuerzo común y fondos conyugales”.
La protagonista de Step Up, a través de sus abogados, ha expresado su preocupación por lo que considera esfuerzos de Tatum y sus asociados para “diluir y ocultar el valor de los ingresos por licencias de participación en la propiedad intelectual de Magic Mike”. Por ende, su equipo ha solicitado un juicio separado para determinar cómo dividir con precisión los activos en su divorcio, pues argumenta que su exesposo habría tomado decisiones empresariales para “proteger” los ingresos de Magic Mike de ella.
Por su lado, Tatum niega esas acusaciones y refuta haberle negado a Dewan la parte que le corresponde. Los abogados del artista estadounidense han expresado su frustración por no haber llegado a un acuerdo de divorcio después de cinco años e insisten en la necesidad de llevar el caso a juicio sin más demoras.
Postulan que Tatum ha “agotado todos los esfuerzos en un intento de resolver sin litigios ese asunto”, y subrayan que aunque Magic Mike se constituyó durante su matrimonio, el actor “continuó creando y desarrollando el personaje y la franquicia después de la separación”.
Tatum y Dewan, quienes se conocieron durante el rodaje del film de baile Step Up en 2006 y se casaron en 2009, compartieron una vida juntos antes de anunciar su separación después de nueve años de matrimonio. Ambos tienen una hija de 10 años, cuya custodia es compartida.
Si bien en los documentos judiciales recientes el protagonista de La ciudad perdida refiere que se separaron privadamente meses antes, la solicitud de divorcio se presentó oficialmente en octubre de 2018. Desde entonces, ambos han retomado sus vidas sentimentales con otros famosos.
Channing Tatum comenzó un romance con Zoë Kravitz, con quien está comprometido. Por otro lado, Dewan lleva una relación con Steve Kazee. Ellos tienen un hijo de 4 años y la actriz espera otro bebé.