Paul McCartney, cantante y legendario integrante de Los Beatles, le otorgó el sello de aprobación a Beyoncé Knowles-Carter y su nueva versión de “Blackbird”. Según el músico británico, la reinterpretación de la artista pop ha reforzado el mensaje original sobre los derechos civiles que inspiró su creación varias décadas atrás.
“Es una versión magnífica”, comentó el artista en sus redes sociales, y expresó que estaba “feliz” por la iniciativa de Beyoncé. Además instó a sus seguidores a escuchar el track si todavía no lo habían hecho.
Originalmente lanzada en 1968 por el cuarteto de Liverpool, “Blackbird” fue compuesta por McCartney con un propósito claro: ofrecer un mensaje de esperanza y aliento frente a las adversidades. La pieza estaba dirigida en específico a las jóvenes afroamericanas que luchaban contra la opresión en pleno apogeo del movimiento de derechos civiles en Estados Unidos. Paul reveló que la inspiración vino tras conocer sobre los problemas raciales en lugares como Alabama, Mississippi, y especialmente el incidente en Arkansas.
“Los nueve de Little Rock” describe a un grupo de estudiantes afroamericanos que desafiaron la segregación al intentar asistir al Little Rock Central High School. Ellos enfrentaron amenazas racistas sumadas a la oposición de la Guardia Nacional que les impedía la entrada al centro educativo.
“En los años sesenta, quedé en shock cuando vi por televisión que las niñas negras eran rechazadas en los colegios. No puedo creer que incluso en nuestro tiempo actual hay lugares donde algo así sigue pasando”, agregó en su publicación.
Según indica el miembro fundador de Los Beatles, Beyoncé habló con él por videollamada y le agradeció por escribir la canción, y también por permitirle grabar la nueva versión. “Si mi canción y su versión logran aligerar esa tensión racial sería muy genial. Me hace sentir orgulloso”, concluyó.
Durante una entrevista con GQ en septiembre de 2018, McCartney compartió cómo — a través de “Blackbird”— quería transmitir un poco de esperanza a quienes enfrentaban actitudes discriminatorias, pensando en una “chica negra que se levanta, se libera y toma esas alas rotas”. La canción desde entonces ha sido percibida como un himno de empoderamiento y libertad.
La versión de Beyoncé, titulada “Blackbiird” (estilizada con doble i), forma parte de su álbum Act II: Cowboy Carter, lanzado el 29 de marzo de 2024. A diferencia de la reinterpretación de “Jolene” que también es parte del disco, este cover no modifica la letra de la composición original. La contribución de Beyoncé está en la inclusión de cuatro artistas emergentes de country afroamericanas: Tanner Adell, Brittney Spencer, Tiera Kennedy y Reyna Roberts.
“Cuando la gente me preguntaba: “¿Cuál es la colaboración de tus sueños?”, la respuesta era siempre Beyoncé, pero era un sueño tan lejano”, escribió Kennedy por lo que reconoció como un punto inolvidable en su carrera de ocho años.
Por otro lado, Tanner Adell compartió cómo Beyoncé fue una figura inspiradora en su vida, enseñándole a ser fuerte y resiliente. Relató cómo, después de ver el documental de Renaissance y asistir al concierto, se prometió a sí misma que trabajaría con su ídolo en 2024, aunque no sabía cómo lo haría. Con el sueño cumplido, agradeció a Beyoncé por abrir camino con su álbum y por permitir que su luz brillara también sobre ella.