Una soprano recordó las denuncias contra Plácido Domingo antes de su concierto en Uruguay: “Es un monstruo y un cobarde”

La próxima llegada del tenor español a Colonia motivó a que una de sus 119 denunciantes expresara públicamente su molestia y recordara las situaciones de acoso sexual y abuso de poder

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El tenor español Plácido Domingo
El tenor español Plácido Domingo (REUTERS/Darrin Zammit Lupi/File Photo)

(Desde Montevideo, Uruguay) - El anuncio del regreso del tenor Plácido Domingo a Uruguay generó una rápida reacción de la soprano uruguaya Luz del Alba Rubio, quien fue una de las 119 personas que denunció a la estrella lírica española por acoso sexual y abuso de poder. En su relato –difundido en un informe de la agencia AP y luego en el ámbito gremial– recordó que el cantante la besó y la tocó sin su consentimiento, le exigió varias veces favores sexuales y que, ante su rechazo, la relegó de su círculo más cercano.

Por eso, la confirmación del concierto de Domingo en la Plaza de Toros de Colonia el próximo 20 de abril motivó a Rubio a enviar una carta en la que expresa su sorpresa por esta organización y pide que esa persona “no grata en otros países no continúe siendo un ejemplo de la música”.

Entrevistada en Búsqueda, Rubio aseguró que prefiere creer que la opinión pública uruguaya “desconoce la situación” que ella vivió y que es esa “desinformación” la que explica que no haya ninguna manifestación en contra de la realización del concierto.

“Estamos hablando de una persona acusada de acoso sexual y abuso de poder, lo que fue comprobado. Me llama la atención que se reciba a una persona de esta calaña, tan cobarde, que fue capaz de manipular a la opinión pública para intentar salvar su reputación. Una reputación que todos conocemos que es una bosta”, cuestionó Rubio.

La soprano uruguaya Luz del
La soprano uruguaya Luz del Alba Rubio fue una de las 119 mujeres que denunció a Plácido Domingo por acoso sexual (Captura Hora Pico/VTV)

La soprano uruguaya aclaró que no tiene la intención de “boicotear” la producción al recordar estos sucesos. Lo que la motiva a hacerlo es “contarle al público que piensa asistir al concierto quién es Plácido Domingo”.

Rubio conoció a Domingo en un concierto en Roma en 1999, pero el vínculo más fuerte que tuvieron fue en Washington y Los Ángeles. Los hechos que ella denunció ocurrieron en 2000, 2001, 2002, 2003, 2004, 2016 y 2019. La última situación de acoso la vivió en el Metropolitan de Nueva York, delante de todo el mundo.

Rubio hizo un quiebre cuando esas situaciones incómodas estuvieron cerca de llegar a la violencia física. Fue entonces que, según su versión, le dijo: “Maestro, yo no voy a volver a actuar con usted”.

“Es muy difícil para un hombre entender cuando una mujer tiene un jefe que tiene la potestad de contratarte de nuevo o no y que te pide para ir a la cama, y que vos no querés ir y sabés que al decirle que no el tipo se enoja. Eso es abuso de poder”, relató la uruguaya.

Después de su rechazo, Domingo quitó a Rubio de su círculo y nunca más trabajó en teatros en Los Ángeles y Washington. “Me sacó los agentes artísticos que él me había puesto. Y se olvidaron. Me cancelaron de su círculo”, aseguró.

Plácido Domingo en el Teatro
Plácido Domingo en el Teatro Colón de Buenos Aires (Télam)

Rubio recordó que de las 119 solo tres denunciantes lo hicieron con nombre y apellido. Y contó que luego Plácido Domingo “realizó un acuerdo con el sindicato” a cambio de USD 500.000, una actitud que también fue cuestionada por la soprano. “Fue muy blando el sindicato porque negociaron directamente con él, que era culpable”, criticó.

“Como resultado de este proceso, a él lo expulsaron del sindicato y entonces no pudo trabajar más no solo como artista sino como director de teatros, cargos que él desempeñaba en Washington y Los Ángeles. Tanto yo como las otras víctimas somos sobrevivientes de esta situación porque hemos sido lo suficientemente fuertes como para salir adelante, pero hemos sido siempre condenadas. Hagamos lo que hagamos, mucha gente no quiere ver que esta persona es un monstruo y un cobarde”, sentenció Rubio.

La soprano uruguaya se define como una “muy buena cantante” que está “orgullosa” de su carrera: “Por eso yo ganaba lo que ganaba y me hacía los contratos que me hacían para cantar en sus teatros”. Pero ese “mérito” para Domingo no era suficiente. Rubio siguió trabajando luego en otros circuitos hasta que decidió cortar “con tantos viajes”, en 2016.

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