Selena Gomez ha sido una de las celebridades que más ha sido criticada por su aspecto físico. Tras convertirse en uno de los rostros más populares de Disney durante la primer década de los 2000, Selena fue diagnosticada de lupus causando varios cambios en su cuerpo, pero además, la enfermedad la llevó a someterse a un trasplante de riñón que, además de dejarle una gran cicatriz, volvió a generar estragos en su figura.
Eso, sumado a los cambios naturales de la edad, hicieron que Gomez cambiara drásticamente su apariencia en un periodo muy corto de tiempo, dejándole a la actriz muchas inseguridades. En una reciente entrevista con Fast Company, Selena habló de como estos constantes cambios afectaron su autoestima, al grado de sentirse avergonzada por dejar de tener su “cuerpo de adolescente”.
Selena compartió una anécdota que data de 2018, cuando su cirugía de riñón llevaba un año de haberse realizado. Selena realizó una prueba para una revista de moda, pero al probarse la ropa, se dio cuenta que ninguno de los conjuntos le sentaba bien.
“Ninguna de las tallas de muestra me quedaba bien, y eso me hacía sentir avergonzada. Aunque, ¿tan poco realista es esperar que el cuerpo de una mujer normal no cambie?”.
En esta misma época, las redes aprovecharon cualquier oportunidad para hacer burlas del aspecto físico de Selena, quien por las mismas razones, cerró sus redes sociales temporalmente. Sin embargo, el acoso llegó a tal punto que decidió responder con un contundente mensaje que cinco años después, acumula más de 17 millones de “me gusta”.
“El mito de la belleza: una obsesión por la perfección física que atrapa a la mujer moderna en un ciclo interminable de desesperanza, conciencia de sí misma y odio a sí misma mientras intenta cumplir la definición imposible de la sociedad de una belleza sin defectos. He elegido cuidarme porque quiero, no para demostrar nada a nadie. Viento en popa”, escribió Selena en su cuenta de Instagram junto a un video donde disfrutaba de un paseo en bote con sus amigos.
Desde entonces, Gomez ha comenzado un largo proceso de aceptación, el cual también se vio entorpecido por su trastorno bipolar. La cantante y actriz confesó que este trastorno sólo complicó las cosas, pero tras ser diagnosticada, fue mucho más sencillo comenzar a curarse.
‘”Pasé una temporada muy dura. Fueron mis altos y mis bajos, y no sabía qué hacer, así que no podía controlarlo, quería cancelar cosas. Era una sensación atormentada. Por eso, cuando me enteré de mi diagnóstico (de bipolaridad), fue como decir: ‘Oh, vale, me siento un poco aliviada, lo entiendo un poco mejor’. Busqué segundas opiniones. Fui a médicos. Tengo la suerte de contar con personas que me ayudan a sobrevivir cada día”.
Hoy en día, Selena Gomez es reconocida por la sencillez con la que se maneja tanto en redes como en el escenario. A pesar de ser una de las celebridades con más seguidores en Instagram (430 millones) y ser una amiga íntima de la figura más famosa del momento (Taylor Swift), no deja que eso le quite los pies del piso. De hecho, asegura que, a diferencia de lo que muchos podrían creer, “no es inalcanzable”, a tal grado que ve a otras divas del pop como Beyoncé y Adele y se queda atónita.
“No soy inalcanzable. Miro a alguien como Beyoncé y me asombro. Se me cae la mandíbula. Cada parte de ella es simplemente impecable, y es tan hermosa. Fui a su espectáculo y me quedé alucinada. Pero yo no soy así, y no pasa nada. Yo soy yo, y soy un poco torpe, pero también me gusta ser sexy y divertida, y también quiero hacer el bien con el tiempo que tengo aquí. Necesitamos diosas como Beyoncé y Adele”.