La polémica no tardó en llegar al divorcio de la actriz Sophie Turner y el cantante pop Joe Jonas.
Luego de anunciar su separación el pasado 6 de septiembre, la mujer que dio vida a Sansa Stark en la famosa serie Game of Thrones presentó una demanda contra su ex pareja para que la Justicia lo obligue a entregar los pasaportes de las dos hijas que tienen en común.
Turner y Jonas son padres de dos niñas: Willa, de 3 años, y otra pequeña de un año, de quien aún no se conoce el nombre.
Según asegura la actriz, habían acordado que sus hijas fueran criadas en el Reino Unido, de donde ella viene. Ellas “están plenamente involucradas e integradas en todos los aspectos de la vida diaria y cultural en Inglaterra”, argumentó ante un tribunal federal en Nueva York.
Inclusive, señaló que habían decidido mudarse allí en abril de este año.
El problema radica en que, dado que Turner había asumido un compromiso laboral en una serie de televisión en aquel país, el matrimonio consideró que lo mejor sería que las niñas viajaran junto a su padre y una niñera en la gira que Jonas tenía programada por Estados Unidos en agosto y septiembre.
Una vez finalizado su rodaje, el 14 de septiembre, la actriz viajaría a Nueva York a recogerlas.
Sin embargo, ella comentó que “la ruptura del matrimonio de las partes ocurrió muy repentinamente” y, al reencontrarse el 17 de septiembre, pidió los pasaportes de las niñas para llevarlas de regreso a su país pero Jonas se negó.
Es por ello que apeló a las cláusulas de sustracción de menores de la Convención de La Haya, un tratado internacional destinado a obligar el regreso de un niño retirado de su país de “residencia habitual”.
Cabe destacar, no obstante, que las menores nacieron en Estados Unidos y tienen doble ciudadanía.
Jonas respondió a esta acción mediante un comunicado en el que dijo que es “un desafortunado desacuerdo legal sobre un matrimonio que, tristemente, está terminando”.
“Cuando se utiliza una palabra como ‘secuestro’, es, en el mejor de los casos, engañoso y, en el peor, un grave abuso del sistema legal”, sentenció.
A continuación, dijo que está buscando la tutela compartida de sus hijas y negó oponerse a los planes ya acordados del matrimonio. Estoy “de acuerdo con que sean criadas tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido”, aclaró.
De momento, en el expediente judicial se indica que las niñas viven -temporalmente- con su madre en un hotel en Manhattan.
Turner y Jonas anunciaron semanas atrás su divorcio. Según ella, el cantante solicitó el divorcio en Florida el 1 de septiembre, aunque sin darle un aviso previo.
Así, ella se enteró de la noticia a través de los medios de comunicación, cuatro días más tarde. Posteriormente, el 6 de septiembre, ambos difundieron un comunicado en sus cuentas de Instagram en el que informaban del fin mutuo y amistoso de su relación.
Jonas negó su versión y dijo que, por el contrario, presentó los papeles tras “múltiples conversaciones con Sophie”.
(Con información de AP)