La saga de libros Harry Potter se convirtió en un fenómeno global gracias, en gran medida, a su adaptación cinematográfica. Si bien el cine hizo que la historia del mago más famoso del mundo estuviera al alcance de más personas, también generó mucha controversia debido a que los directores y guionistas se dieron muchas libertades creativas al momento de resumir cada uno de los libros.
Gran parte de las críticas giraron en torno al tratamiento que se les dio a algunos personajes, que en varios casos, fue prácticamente nulo. Es que mientras en el libro podían tener un gran protagonismo, en las cintas pasaban completamente desapercibidos.
Tal fue el caso de Ginny Weasley, hermana del mejor amigo de Harry, Ron y con quien “el niño que vivió” se casaría al final de la historia. Las películas no se esforzaron mucho en darle a Ginny una personalidad tridimensional, presentando simplemente un interés amoroso que ofreció muy poco a la trama salvo en cintas como La Cámara Secreta.
Respecto a esto, Bonnie Wright, actriz que le dio vida a Ginny a lo largo de la saga, se ha pronunciado en el podcast Inside of You conducido por el actor Michael Rosenbaum (recordado por su papel de Lex Luthor en Smallville) y confesó estar de acuerdo con los fans cuando dicen que la versión cinematográfica de Ginny Weasley no tuvo el trato que merecía.
“A veces era un poco decepcionante porque había partes del personaje que no llegaban a aparecer porque no había escenas para hacerlo. Eso me hacía sentir un poco ansiosa o simplemente frustrada, supongo”, explicó Bonnie a Michael.
La situación con el personaje fue tal que Bonnie terminó desarrollando ansiedad alrededor de cómo iban a reaccionar los fanáticos con su interpretación, si la culparían a ella o entenderían que el guión no estaba en sus manos.
“Definitivamente siento que había ansiedad hacia la interpretación y hacia hacer lo mejor posible la construcción de mi personaje, por ejemplo. Dios mío, ¿le haré justicia a este personaje que la gente adora? Siempre fue difícil, sobre todo cuando, inevitablemente, muchas de las escenas de cada personaje se redujeron del libro a la película. Y eso es lo mismo con todos los personajes. Ojalá pudieran ser películas de cinco horas”, sentenció la actriz de 32 años.
Si bien el sueño de Bonnie de tener películas de cinco horas no se hará realidad, la historia de Harry Potter podrá tener más tiempo de desarrollarse en pantalla gracias a la nueva serie que Warner Bros se encuentra desarrollando. En su momento, se le preguntó a la actriz si quería volver a interpretar a Ginny pero dejó en claro que su historia con Harry Potter ha terminado.
“Seguro que echo de menos interpretar a Ginny, pero siempre me ha gustado el fin de la saga y como se quedaron plasmados los siete años que pasé en Hogwarts”, dijo.
A pesar de la poca presencia que Bonnie tuvo frente a cámaras, se sabe que estuvo muy involucrada a la hora de crear los vestuarios de la saga, que estuvieron a cargo de la diseñadora Jany Temime. El sentido de la moda que Wright ha desarrollado se debe en gran medida a la influencia de sus padres Gary Wright y Sheila Teague, reconocidos joyeros de Londres.
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