Cuál fue la reacción de figuras del cine ante el arresto de Jonathan Majors

Jonathan Majors, actor que ha cobrado mucha relevancia tras convertirse en el villano Kang dentro del Universo Cinematográfico de Marvel, se encuentra envuelto en la controversia debido a que el pasado 25 de marzo fue arrestado en Nueva York por agredir a una mujer. Según los reportes policíacos, la víctima habría sido la novia de Majors, quien aparentemente discutió con el actor después de haber visto conversaciones con otras mujeres en el celular de este. Majors entró en cólera y abofeteó a su pareja, además de tratar de estrangularla.

Después de que el incidente se reportara a las autoridades, Majors fue detenido, mientras que su novia fue trasladada a un hospital con “heridas leves” en cuello y rostro.

Si bien, el caso sigue en curso, la industria del entretenimiento ya ha comenzado a movilizarse y compartir sus opiniones. Mientras uno de los representantes de Majors aseguró que su cliente “no había hecho nada malo” y que “trabajarían para limpiar su nombre”, algunos directores en Hollywood ya se han pronunciado al respecto, asegurando que el actor es mucho más peligroso de lo que podría aparentar.

Uno de estos directores fue Andrew Boyd Allen, conocido por producciones pequeñas como Your Turn, Mi tío Frank y Rough Draft. Allen compartió un tuit el pasado 14 de febrero donde hablaba de un actor anónimo con conductas bastante violentas tanto dentro como fuera del set. Sin embargo, tras la noticia del arresto de Majors, los internautas preguntaron si se trataba de este actor, a lo que Allen respondió “Ding Ding Ding”, haciendo alusión al clásico sonido de “respuesta correcta”.

“Hay un actor en particular, relativamente nuevo en la escena, por el que Twitter se ha enamorado violentamente y que, en realidad, es un ser humano vicioso, cruel y abusivo, tanto profesionalmente como en su vida personal, y cada nuevo tuit viral sobre él me vuelve loco”, se puede leer en el tuit compartido por Allen.

Posteriormente, cuando a Allen se le pidió que brindara más información sobre estos casos, confesó que no lo haría debido a que quería proteger a las víctimas de los malos tratos de Majors, y si estas no lo han denunciado, ha sido por miedo.

Por su parte, el actor Tim Nicolai también se pronunció contra Majors, asegurando que ha sido una persona peligrosa desde hace varios años, mismos en los que se ha buscado ponerle un alto sin éxito (hasta ahora).

“Sólo voy a decir esto sobre Jonathan Majors y ya está: la gente de Yale y la comunidad de Nueva York en general saben de él desde hace años. Es un sociópata y un maltratador y así es como prácticamente todo el mundo habla de él. Es una pena que haya tardado tanto en ser denunciado. Ya estoy viendo un montón de “¡¿Por qué no hiciste nada?!”. Amigos, la gente lo ha intentado. Al final hacía falta una víctima que lo denunciara. Es a la vez horrible saber que sigue haciendo esto y un alivio saber que quizá no vuelva a hacerlo”.

Mientras la reputación de Majors se hunde cada vez más, varios proyectos comienzan a cerrarle las puertas. Tal es el caso de Be All You Can Be, campaña publicitaria del Ejercito de los Estados Unidos protagonizada por el mismo Jonathan Majors. Laura DeFrancisco, jefa de asuntos públicos de la Oficina de Marketing Empresarial del Ejército, compartió el siguiente mensaje sobre el asunto:

“El Ejército de EE. UU. está al tanto del arresto de Jonathan Majors y estamos profundamente preocupados por las acusaciones en torno a su arresto. Recientemente, lanzamos dos anuncios en los que aparece. Si bien el Sr. Majors es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad, la prudencia dicta que retiremos nuestros anuncios hasta que se complete la investigación de estas acusaciones”.

El proceso legal contra Majors apenas está por comenzar, sin embargo, los testimonios de los cineastas dejarán mucho que pensar al jurado (además de los posibles testimonios de las personas que mencionó Andrew Allen). El actor ha tenido un asenso abrumador dentro cine, no obstante, en este momento su carrera se tambalea, y de encontrarse culpable, puede marcar el repentino fin de lo que pudo haber sido una historia de éxito.