Kalimba rompió en llanto durante un concierto que ofreció con OV7 durante la noche del viernes 17 de marzo en Las Vegas, Estados Unidos. El intérprete de éxitos como Tocando fondo, No me quiero enamorar y Se te olvidó aprovechó un espacio entre los cambios de vestuario para mandar un mensaje de amor tras la denuncia que Melissa Galindo lanzó en su contra por presunto acoso sexual.
Lo único que les quiero decir hoy desde lo más profundo de mi corazón es amen mucho, amen un montón. De repente estamos tan llenos de odio, de rencor, de venganza, que somos capaces, con cosas que para nosotros pueden ser muy chiquitas, destruir vidas, sociedades y personas.
El cantante secó sus lágrimas mientras que el público expresaba su cariño y apoyo ante estos nuevos señalamientos en su contra, pues en enero de 2011 fue detenido por autoridades de la Interpol e ingresado en el Centro de Readaptación de Chetumal mientras se deslindaba su presunta responsabilidad en un caso de abuso sexual a una mujer menor de edad.
“Amen, no nos convirtamos en jueces de nadie, no estamos de un lado o del otro, observemos, pero por encima de todo yo que, al parecer Dios le da sus mejores batallas a sus mejores guerreros (dijo entre risas), lo único que les puedo decir es hay que amar, hay que amar un montón”, comentó en un video recuperado por el programa Venga la Alegría.
Kalimba continuó con el concierto junto a M’balia, Mariana Ochoa, Lidia Ávila, Érika Zaba, Óscar Schwebel y Ari Borovoy.
Kalimba emprenderá una batalla legal para demostrar su inocencia
Fue el pasado 16 de marzo cuando la cantante Melissa Galindo recurrió a sus redes sociales para denunciar públicamente a Kalimba por presunto acoso sexual. Según contó, los hechos ocurrieron hace alrededor de tres años mientras trabajaban juntos en la producción de un disco. En un principio consideró que los supuestos tocamientos en sus partes íntimas habían sido un accidente, pero después habrían subido de nivel.
“Primero me abraza y su mano cae en mi seno. Pensé: ‘Fue sin querer, no me voy a mal viajar, está borracho, viene toda su gente’ cero a salvo me sentía y me tapé. Me vuelve a agarrar la rodilla y me vuelve a decir lo mismo sobre que tenía muy buenas noticias sobre mi disco y mi show (...) y volví a sentir la mano hacia arriba, esta vez sentí que volvió a subir los dedos y además de alcanzarme la vagina, se movió. Me shockeé”, contó.
Después de que se viralizó el testimonio de la cantante, Kalimba reapareció en sus historias de Instagram para compartir un frase (tuiteada originalmente por el conferencista Daniel Habif) de aliento en medio de la adversidad: “Dios me cura las heridas, pero valoro mucho a quien se sienta a mi lado mientras sano”.
Pero eso no fue todo, horas después publicó un comunicado de prensa donde negó haber agredido de alguna manera a Melissa Galindo y aseguró que emprenderá una batalla legal no solo para demostrar su inocencia, también por difamación debido a que su imagen se ha visto dañada tras lo sucedido.
Niego categóricamente las manifestaciones realizadas en mi contra. Demostraré con pruebas y ante las autoridades la falsedad de estas acusaciones de la mano de mi equipo legal. Admiro y celebro estos movimientos que le han dado voz a las mujeres pero es muy triste que sean utilizados de manera incorrecta, ya sea por venganza, para buscar un beneficio o para buscar evadir responsabilidades económicas o jurídicas”, se lee en el texto.
Informo a la opinión pública que ejerceré acciones legales por la difamación que estoy siendo objeto, incluyendo en contra de quienes han replicado este mensaje sin salvaguardar mi identidad y mis derechos.