Hoy será un día especial para la Universidad de Buenos Aires (UBA). Con la asunción del consejo académico, se pondrá en marcha su primer colegio fuera de la ciudad de Buenos Aires. El nuevo establecimiento, que buscará tener un modelo similar al del Nacional Buenos Aires, abrirá sus puertas en Escobar.
En un acto en el rectorado, el secretario de Hacienda y Administración de la UBA, César Albornoz, asumirá como presidente del Consejo Superior Académico del nuevo colegio hoy al mediodía. A partir de marzo comenzará el curso de ingreso, que tiene 500 aspirantes para 120 vacantes, y desde el año que viene entrará en vigor el primer ciclo lectivo.
"Es un hito muy importante en lo académico para nuestra universidad. Estamos llevando educación de calidad, con alta exigencia a la zona norte de la provincia. Creíamos que la zona sur, en parte, ya la habíamos cubierto con el colegio de Lugano. El nuevo establecimiento tomará como base el modelo académico del Nacional Buenos y el ILSE, pero tendrá su impronta propia", le dijo a Infobae Alberto Barbieri, rector de la UBA.
El Colegio se llamará Ramón Antonio Cereijo en honor al ex docente y decano de Económicas, que también fue ministro de Hacienda durante el primer peronismo. Será la sexta secundaria preuniversitaria de la UBA. Se sumará al Colegio Nacional Buenos Aires, al Carlos Pellegrini, al Agrotécnico, al Instituto Libre de Segunda Enseñanza (ILSE) y al Técnico de Lugano.
El nuevo consejo académico del colegio estará compuesto por un par de nombres conocidos. Carlos Campolongo, periodista y docente universitario, y Gustavo Zorzoli, que hasta hace unos días era el rector del Nacional Buenos Aires, forman parte del cuerpo. Lo completan el arquitecto Eduardo Cajide, la magíster en educación Marilina Lipsman y el médico veterinario Marcelo Miguez. Ellos designarán a los profesores y autoridades de la institución.
Según supo Infobae, el consejo académico habilitará dos modalidades: el bachillerato en arte y diseño gráfico y digital y el bachillerato en ciencias naturales y medioambientales. "Proponemos un plan de estudios que recupere la exigencia y lo mejor de las tradiciones, pero a la vez, que prepare a los jóvenes en nuevas habilidades y competencias más acordes con los escenarios sociales, culturales y tecnológicos actuales. Para ello se recomienda un colegio de jornada extendida cuya formación humanística y científica asegure una inserción automática en la universidad", dice la propuesta pedagógica.
Dentro del plan de estudios se priorizará la enseñanza del inglés, la filosofía y el arte. Además se menciona la figura de coordinador de curso, un mentor o tutor encargado de seguir el recorrido de cada estudiante a través de su trayectoria escolar.
La provincia de Buenos Aires divide su estructura escolar en dos bloques de seis años. Por ende, los chicos de sexto grado serán los que hagan el curso de ingreso. El curso tendrá solo matemática y lengua y al original se le harán los ajustes curriculares pertinentes para alumnos de un año menos.
El Cereijo funcionará en un terreno de 5.000 metros cuadrados en el centro de Escobar. La construcción todavía se encuentra en licitación entre tres proyectos, pero para 2020 estará terminada la primera etapa de la obra, que permitirá albergar los primeros cursos. "Va a ser emblemático desde lo arquitectónico. Estamos convencidos de que va a ser el mejor colegio de la provincia de Buenos Aires, tanto en la infraestructura como en lo académico", remarcó el intendente Ariel Sujarchuk.
Como ya se había planteado al momento de la constitución, el colegio tendrá una doble gestión. De la parte académica se encargará la UBA; la parte administrativa -los sueldos, infraestructura y servicios- correrá por cuenta de la provincia y el municipio.
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