Desde la mañana de este miércoles, los ministros de Educación de los 19 países miembros del G20 y de la Unión Europea debatieron sobre los desafíos educativos que plantean los cambios abruptos de los últimos años. En Mendoza, los funcionarios acordaron potenciar las habilidades necesarias para el siglo XXI.
El ministro de Educación de la Nación, Alejandro Finocchiaro, y el sherpa argentino ante el G20, Pedro Villagra Delgado, encabezaron la primera reunión de ministros de Educación del G20. Argentina dispuso, por primera vez, que la educación fuera prioridad en la cumbre internacional.
"Por primera vez en la historia del G20 se incorpora a la agenda la educación. Nos encontramos en una era en la cual la educación nunca ha sido tan importante para el desarrollo económico, social y cultural de nuestros países", expresó Finocchiaro en la apertura de las sesiones. "Sin educación no hay desarrollo de las capacidades humanas. No hay desarrollo de las personas. Y sin desarrollo humano, no hay posibilidad alguna de desarrollo sostenible en la Tierra", agregó el ministro de Educación.
Luego de las sesiones, se dio a conocer la declaración de Mendoza. "Nos reunimos para afirmar el rol único de la educación como un motor clave para el desarrollo sostenible para todas las naciones, reconocer la necesidad de poner la educación en el centro de la agenda global y convocar a la acción colectiva", comienza el documento, que cuenta con 24 puntos y un anexo.
La declaración da especial relevancia al desarrollo de las habilidades que exige el nuevo mercado laboral. "Es importante que la educación se mantenga al ritmo de las innovaciones sociales y tecnológicas", dice, y menciona inteligencia artificial, big data e internet de las cosas como cuestiones centrales a considerar en los nuevos currículos escolares.
Sobre las reformas curriculares, dan distintas ideas: promover la educación en el áreas STEAM -ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas, por sus siglas en inglés- a través de un enfoque integral y transversal, "con aplicación al mundo real". Fomentar la inclusión de habilidades no cognitivas y socioemocionales. Integrar habilidades de liderazgo, gestión y empresariales en el plan de estudios y fortalecer el aprendizaje de idiomas extranjeros en la escuela.
El rol del docente, agrega, no puede estar ajeno al nuevo contexto. Se los debe dotar con las herramientas necesarias para poder transmitir conocimiento digital y apoyar iniciativas innovadoras. "Debieran diseñarse procesos de selección, condiciones laborales y trayectorias de empleo orientados a atraer a las personas más calificadas y apasionadas de diversos orígenes a la profesión docente", enuncia el trabajo.
El otro foco de la cumbre, que luego se plasmó en el documento final, fue el financiamiento de la educación. La declaración deja en claro que "más presupuesto no equivale a mejores resultados". Por tanto, pone la atención en, primero, las fuentes de financiamiento nacional e internacional y, luego, en el monitoreo permanente de la inversión para que refleje una mejora de los aprendizajes e incluya a los grupos vulnerables.
Durante la cumbre, la Dirección Nacional de Cooperación Internacional del Ministerio de Educación presentó la plataforma digital Campus Global, una iniciativa que promueve la movilidad académica internacional. Busca simplificar el acceso a la oferta de becas internacionales para estudiantes, docentes e investigadores, tanto argentinos como extranjeros.
Una vez finalizada la sesión, los delegados asistieron al lanzamiento de la edición 2018 de "La lección más grande del mundo", un proyecto impulsado por la organización civil Project Everyone con el respaldo de UNICEF y UNESCO. A su vez, Mercedes Miguel, secretaria de Innovación Educativa, estuvo a cargo de presentar a Hadi Partovi, CEO y fundador de Code.org, una organización sin fines de lucro dedicada a expandir el acceso a la informática en las escuelas.
Reuniones bilaterales
Finocchiaro y las autoridades del Ministerio de Educación nacional tuvieron reuniones bilaterales con sus pares de Italia, Países Bajos, Japón y Arabia Saudita.
Según supo Infobae, con Italia se firmó una carta de intención para implementar un proyecto de cooperación educativa entre instituciones de formación técnica. El principal foco a trabajar será la enología, la producción de vinos. A su vez, se tocaron temas de movilidad académica y formación de ingenieros, uno de los déficits para el desarrollo productivo del país.
Por su parte, con los representantes de los Países Bajos también se llegó a un acuerdo para promover la cooperación en la educación superior.
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