Rusia está dispuesta a sacar provecho de las divisiones políticas en Ucrania

La política ha vuelto; los combates, sin embargo, no han ido a ninguna parte

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Rusia está dispuesta a sacar
Rusia está dispuesta a sacar provecho de las divisiones políticas en Ucrania (Europa Press)

La oferta para convertirse en viceministro de Cultura debería haber sido una obviedad. Como director del Instituto de la Memoria Nacional de Ucrania, Anton Drobovych tenía los antecedentes necesarios. Y durante muchos de los meses anteriores había estado luchando en las operaciones más peligrosas de la contraofensiva ucraniana en la región de Zaporizhzhia o recuperándose de graves heridas en el hospital. Drobovych no rechazó de primeras la propuesta pero su entendimiento de la escena política de Kiev bastó para sembrar dudas. ¿Podría sobrevivir a las reaparecidas peleas ideológicas, reuniones informativas y batallas burocráticas? No, resolvió volver a las filas de su unidad de fuerzas de asalto. “Decidí que tenía un trabajo más importante en el frente”, aseguró.

Droboych es uno de los muchos ucranianos en medio de dos mundos cada vez más distintos: la cruda realidad de una guerra de trincheras y un campo de batalla político cada vez más inestable en Kiev. Cuando Rusia comenzó su invasión en febrero de 2022, la competencia en la política entró en hibernación. Regresó cuando la amenaza existencial para Ucrania disminuyó a finales de ese año. Yaroslav Zhelezhnyak, diputado de la oposición, afirmó que sigue habiendo un “amplio acuerdo” en cuestiones fundamentales de seguridad nacional. Sin embargo, un destacado diputado del propio partido del Presidente afirma que los forcejeos ya han hecho que Ucrania sea “inestable”. Se están cometiendo errores “por todas partes”. Y los intentos presidenciales de “centralizar la toma de decisiones” y “acallar la disidencia” están teniendo el efecto contrario.

Han surgido grietas no sólo en las líneas políticas sino, lo que es más preocupante, entre los líderes militares y políticos. La relación entre Volodimir Zelensky y su comandante en jefe Valery Zaluzhny es terrible. Las diferencias de opinión se denunciaron por primera vez en verano del año pasado. Una reciente y sincera entrevista de The Economist con el general, en la que declaraba que la guerra de Ucrania había llegado a un punto muerto, sacó a la luz ese conflicto. Zelensky reprendió públicamente al general por los titulares. En una entrevista posterior pareció advertir a Zaluzhny que se limitara a los asuntos militares en lugar de “hacer política”.

 La relación entre Volodimir
La relación entre Volodimir Zelensky y su comandante en jefe Valery Zaluzhny es terrible, y es cada vez más evidente (REUTERS)

Una alta fuente gubernamental sugirió que el conflicto abierto en la cúpula fue el resultado “predecible” de una operación de contraofensiva estancada que “no había salido según lo previsto”. El funcionario agregó que Zaluzhny fue posiblemente imprudente al contradecir las posturas públicas más optimistas del Presidente, pero pocos dentro del gobierno podrían objetar sus sobrias conclusiones. En estos momentos se está produciendo un juego de acusaciones sobre quién es el responsable del fracaso. “Los políticos dicen que sus generales son imbéciles formados en la Unión Soviética. Y los generales dicen que los políticos son unos imbéciles entrometidos. La victoria tiene muchos padres, pero nadie quiere ser padre de un estancamiento”.

Otro factor en juego es una supuesta investigación criminal sobre la defensa del sur de Ucrania. Esta fue la única zona en la que las fuerzas rusas pudieron establecer una victoria rápida y de enorme importancia en febrero y marzo de 2022, creando un nuevo corredor terrestre hacia Crimea en pocas semanas. Las tropas ucranianas ayudaron al avance. No se volaron los puentes como se debería haber hecho; el ejército tampoco estaba bien preparado. Según algunos informes, Zaluzhny sólo ha sido nombrado testigo en la investigación pero eso podría convertirse en algo más serio. Sus aliados dicen que la posibilidad de una acusación penal está diseñada para mantenerlo controlado. Su compromiso con los medios de comunicación podría verse como una póliza de seguro, según sugirió una fuente del Estado Mayor.

Zaluzhny no ha declarado ninguna ambición política y sus escasos pasos por este terreno han sido de todo menos hábiles. Esto no significa que no represente una amenaza para Zelensky. El Presidente, cómico hasta 2019, sabe lo rápido que la sociedad ucraniana puede hacer y deshacer a sus líderes. Las encuestas internas vistas por The Economist sugieren que el Presidente, una vez alabado por su papel en la defensa del país, se ha visto empañado por los escándalos de corrupción en su gobierno y por la preocupación sobre la dirección del país. Las cifras, que datan de mediados de noviembre, muestran que la confianza en el Presidente ha caído a un 32% neto, menos de la mitad que la del todavía venerado general Zaluzhny, del 70 por ciento. El jefe de los servicios secretos ucranianos, Kyrylo Budanov, también consiguió mejores resultados que Zelensky: 45 por ciento.

El mismo sondeo sugiere que el mandatario corre el riesgo de perder unas elecciones presidenciales si se enfrenta a su comandante en jefe. Probablemente, la sociedad ucraniana no vería con buenos ojos un desafío no provocado. Por el momento, ocho de cada diez ucranianos se oponen a la idea misma de celebrar elecciones, previstas inicialmente para el próximo mes de marzo. El presidente también las ha descartado, alegando la ley marcial. Sin embargo, la caída de sus índices de popularidad podría hacerle cambiar de opinión. No cabe duda de que, si no se celebran, la propaganda rusa sacará su provecho.

Rusia está lista para sacar
Rusia está lista para sacar ventaja de la grieta interna en la política de Kiev, y hasta aprovechar el aplazamiento de los comicios presidenciales (AP)

Fuentes de los servicios de inteligencia de Kiev afirman que Rusia ya está intentando sacar partido de las ambiciones y tensiones. Andriy Cherniak, portavoz de HUR, la agencia de inteligencia militar, sostuvo que hay pruebas que demuestran nuevas estrategias rusas para diferentes grupos: una para reforzar el apoyo en Rusia, otra para socavar la confianza en Occidente y una tercera para amplificar los agravios en Ucrania. Hay una campaña de desinformación separada para los soldados ucranianos, con vídeos falsos que pretenden mostrar a comandantes de varios niveles animando a sus subordinados a rendirse. “Rusia no ha sido capaz de hacer lo que necesita en el campo de batalla, pero están teniendo un éxito real aquí”, explicó.

La alta fuente gubernamental sugiere que la propaganda rusa ha ganado tracción porque tiene material con el que jugar. Hay corrupción, admite. La gestión es a menudo ineficaz. Ucrania no ha puesto su economía en pie de guerra. Pero sólo Rusia saldría ganando si se forzara la salida del Presidente. “Algunos de nuestros políticos no se preocupan lo suficiente por la amenaza rusa y eso me enfada. Creen que pueden disputarse el poder, destruir a Zelensky, y que no tendrá consecuencias”, comentó. Los servicios de seguridad habían eliminado eficazmente la mayoría de las palancas de influencia rusa desde el comienzo de la guerra pero las palancas más eficaces son ahora “los propios ucranianos”.

En el frente, Rusia está disfrutando de un periodo relativamente bueno de la guerra. Están satisfaciendo gran parte de sus necesidades de mano de obra reclutando entre los pobres y en las cárceles; un caníbal convicto fue indultado recientemente para luchar. Ucrania, en cambio, tiene dificultades para movilizar a la población. Los jefes del ejército están reclutando a un nivel que apenas cubre las pérdidas naturales en el frente. Pero si la mayoría de los movilizados al comienzo de la guerra sabían por qué luchaban, pocos de los nuevos reclutas tienen la misma voluntad, y cubrir las cuotas de reclutamiento es cada vez más difícil. Es poco probable que las tensiones políticas ayuden a este proceso.

En el frente, los soldados
En el frente, los soldados siguen enfocados en derrotar al enemigo, a pesar de las tensiones en Kiev (Europa Press)

Las dudas dentro y fuera del país sobre el rumbo de la guerra también están empezando a llegar a los soldados en el frente. No parece que hayan cambiado el comportamiento o la moral de forma significativa, al menos de momento. “A la gente que está bajo el fuego no le importa si Zaluzhny se ha peleado con Zelensky o no”, dijo un comandante. Drobovych está de acuerdo. Cuando charla con sus camaradas en el frente, nadie habla de la necesidad de volver a Kiev para “arreglar la política”. Sólo se habla de seguir con vida. Para esta parte de la sociedad ucraniana no hay duda del riesgo que sigue suponiendo el enemigo. “Rusia nos plantea una simple cuestión: la vida o la muerte. Eso nos hará seguir luchando, pase lo que pase, en Kiev o en Washington”.

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