La mansión en donde vivió sus últimos momentos el legendario artista Pablo Ruiz Picasso se subastará el 12 de octubre, comenzando por la suma de 20,2 millones de euros, según la inmobiliaria holandesa R365.
El pintor de origen español vivió hasta el fin de sus días en su casa de campo francesa que tiene el nombre de "Mas de Notre Dame Vie", junto con su última esposa Jacqueline Roque. La vivienda fue un regalo de bodas de Pablo hacia su esposa y fue allí donde pasaron sus años más felices de casados.
La vivienda fue diseñada por el mismísimo Picasso y construida debajo de la antigua capilla de Notre-Dame de Vie en Mougins. Disfruta de las prestigiosas vistas de la Bahía de Cannes. Uno de los deseos de la viuda de Picasso es que se mantuviera todo de la misma manera, tal como lo había dejado el artista.
Posterior a la muerte del pintor, su dueño fue un inversor de origen holandés que se encargó de la restauración de la propiedad, ya que estaba en un estado de ruinas. Tras dos años de trabajo y un proceso arduo de restauración y con la consigna fiel de conservar el espíritu original de la casa de Picasso, reciclaron esta extravagante propiedad de 1.225 metros cuadrados.
La mansión se encuentra rodeada de ocho hectáreas de extensos jardines y posee cinco dormitorios en la casa principal, cada uno de ellos con baños y vestidores. También posee una sala de jardín, una terraza, un estudio, una galería, una lavandería y una gran bodega que alberga más de 5.000 botellas. Con una impresionante escalera de caracol y un ascensor y con un estilo clásico del siglo XX, se caracteriza por sus techos amplios.
La casa de huéspedes, por su parte, posee 250 metros cuadrados, con siete departamentos y una casa de servicio con 120 metros cuadrados. Por último, la casa de la piscina consta con una cocina, un gimnasio, un spa, sala de masajes y un jacuzzi.
El 12 de octubre será un día importante para esta emblemática propiedad que solía ser fuente de inspiración para Picasso y que tendrá un nuevo dueño que podrá disfrutar de las vistas francesas, así como de la extensa y reciclada mansión que perteneció a nadie más ni nadie menos que uno de los genios más relevantes de la historia del arte.
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