Un centenar de Secundarias Rurales Mediadas por Tecnologías (SRTIC) de Salta, Jujuy y Tucumán recibirán kits de antenas para conectividad a internet de alta velocidad, gracias a una donación de Frávega a Unicef que permitirá a más de 1.700 chicas y chicos acceder a la escuela secundaria en su comunidad.
La donación consta de 100 kits para la conexión a internet. “El programa SRTIC tiene como objetivo garantizar la escuela secundaria en contextos rurales aislados donde no existe la oferta de este nivel educativo, y permite que las y los adolescentes que allí residen puedan ejercer su derecho a la educación. A su vez, contribuye a que los alumnos desarrollen habilidades digitales y reducir las brechas de inequidad entre el ámbito urbano y rural”, explicó la cadena en un comunicado.
En la actualidad, existen 177 comunidades rurales en Chaco, Jujuy, Misiones, Salta, Santiago del Estero y Tucumán que cuentan con escuelas secundarias mediadas por tecnologías a las que asisten más de 3.000 estudiantes. Más de 1.000 lograron terminar sus estudios secundarios gracias a estas escuelas.
“Unicef trabaja en Argentina, y en todo el mundo, para que las chicas y los chicos accedan a una educación, salud y protección de calidad, y para garantizarlo es fundamental el compromiso del sector privado. La colaboración de Frávega permitirá mejorar las condiciones de aprendizaje de 1700 alumnos que viven en parajes rurales aislados de cuatro provincias del país”, subrayó Pablo Ferreyra, Especialista en Alianzas Corporativas y RSE de Unicef Argentina.
“Frávega se enorgullece de colaborar con este programa aportando las antenas de Starlink que son especialmente valoradas en zonas remotas por la estabilidad que ofrecen los satélites de baja órbita. Internet al servicio de más y mejor educación es una de las contribuciones más valiosas que hace hoy la tecnología” expresó Paula Fernández, Gerenta de Asuntos Públicos de Frávega.
Las Secundarias Rurales Mediadas por Tecnologías es una modalidad innovadora que permite garantizar la educación secundaria a miles de adolescentes que viven en situación de vulnerabilidad en zonas rurales de difícil acceso.
“Sin ellas, los chicos tendrían que mudarse a los centros urbanos, lo que implica el desarraigo de sus familias y un enorme esfuerzo económico. Muchas veces, la ausencia de la escuela en sus comunidades dificulta a chicas y chicos la continuidad de los estudios. Contar con buena conectividad les permitirá finalizar sus estudios secundarios y desarrollar habilidades clave para su vida y la de su comunidad en el Siglo XXI”, aseguraron desde Frávega.