Inversiones en propiedades en Paraguay: una opción a la que recurren cada vez más argentinos para proteger sus ahorros

La capital paraguaya sigue en expansión con la edificación de más de 50 inmuebles premium. En los últimos cinco años, los desarrollos demandaron una inversión superior a los USD 1.000 millones. Este avance seduce a los inversores argentinos que ven una oportunidad para obtener buena rentabilidad. La baja inflación y el pago de menos impuestos favorecen a que los guaraníes capten fondos extranjeros.

Este cambio edilicio le modificó la fisonomía total a la capital guaraní, con obras de edificios residenciales y corporativos, que captaron el interés no sólo del mercado interno, sino que, sedujo a los inversores de los países limítrofes que vieron en esta ciudad un potencial enorme para apostar y obtener buena rentabilidad por medio del ladrillo.

Se construyeron inmuebles inteligentes y con tecnología de vanguardia, como otros que combinan los usos mixtos, y muchos argentinos también dirigieron sus fondos hasta la capital paraguaya. Fue notable como se modernizó la cara de la Avenida Aviadores del Chaco, una de las principales de esta urbe, cuando aparecieron las máquinas y los trabajadores para desplegar la acción con la edificación de las propiedades que hoy se observan a simple vista.

Raúl Constantino, presidente de la Cámara Paraguaya de Desarrolladores Inmobiliarios (Capadei), dijo: “esta expansión se sustenta en el crecimiento y la estabilidad de la economía que ha tenido nuestro país en los últimos años; también responde al cambio de costumbres que se ha ido presentando en la ciudadanía, en relación a que muchos propietarios cambiaron la forma de vivir y son más exigentes con el confort, y sobre todo con lo tecnológico. Esto hizo que prioricen la posibilidad de irse a vivir a departamentos y privilegien así comodidad, ubicación, seguridad, precio, calidad, entre otras cuestiones”.

También están los que afirman que en los últimos años en Paraguay ascendió el poder adquisitivo de las clases media alta y media (jóvenes profesionales, con promedios de edad de 35 años), y esta situación, generó que orienten su búsqueda para comprar una vivienda en los departamentos o casas nuevas, como trabajar en las oficinas que se estrenaron desde 2014 a la fecha.

Juan Francisco Gils, el director de Casatua, que lanzó recientemente MET Santa Teresa, un emprendimiento residencial de lujo, que tendrá una construcción similar a los inmuebles que se levantaron en Puerto Madero, demandará una inversión de USD 6 millones (se prevé la inauguración para otoño de 2021), se refirió a la expansión en este territorio, y dijo, que, “el crecimiento económico de Paraguay impactó de manera directa en el sector inmobiliario, el cual tiene una demanda en alza y sostenida. Cuenta con un potencial de más de 300.000 familias que pueden acceder a una vivienda, de las cuales un 20% buscan alquilar, generando así un mercado de renta atractivo que hoy ofrece entre 8 y 12% anual”.

Se trata de un claro contraste con la realidad argentina donde a la incertidumbre cambiaria y elevada tasa de inflación se agrega un muy pobre retorno de capital de la inversión inmobiliaria.

En este emprendimiento, las unidades parten desde USD 85.000 y cuenta con planes de financiación propia a 10 años con una tasa fija del 10% anual. Estos valores en un inmueble de calidad hacen que los argentinos que poseen fondos y apuestan en el ladrillo, sigan posicionando el foco allí.

Este mercado es tentador, porque, “con una inflación anual que oscila entre el 3 y 4%, un dólar estable desde hace 10 años, son datos que serían suficientes para convencer a un argentino que posee ahorros o excedentes en billetes, para que los vuelque en el Real Estate de Paraguay. Además, la tasa impositiva para residentes y no residentes es muy ventajosa”, amplió Gils.

Alta gama

También las empresas del Real Estate argentino apuestan por el territorio paraguayo, entre ellas, se encuentra ABV, que la lideran Ioram Amsel , Javier Vilamowski, y Mariano Boruchowicz, que emprenden en Asunción, el proyecto EM Las Torres Furnished by Armani Casa, que demandará una inversión de USD 70 millones para la edificación.

Se tratan de dos inmuebles que totalizan 50.000 m2, y la venta, según fuentes de la compañía, funcionó muy bien, porque además del público local, muchos argentinos invierten en Paraguay por los atractivos que ofrece el país y las incidencias de los terrenos, en las mejores zonas, rondan entre 400 y 500 dólares por metro cuadrado.

El valor del metro cuadrado en Asunción, para los inmuebles de muy buen nivel, la cotización promedia los USD 2.400. Y el negocio del alquiler, en unidades de este estilo, otorga una renta anual que oscila entre 8% y 9% anual (una diferencia notoria con la Argentina, en la cual la rentabilidad promedia el 2,5% anual, el índice más bajo de los últimos 30 años).

Con otra visión que incluyó un repaso más estructural, el ingeniero Alberto Gross Brown, presidente de AGB Constructora, dijo: el progreso edilicio en Paraguay, obedeció, a que, “luego de la crisis financiera de 2008 en los Estados Unidos (cuando explotó la llamada burbuja inmobiliaria que afectó globalmente), muchos mercados inmobiliarios cayeron bastante en su competitividad y los inversores tuvieron que buscar nuevas opciones. Debido a que Paraguay no tiene una estructura crediticia muy compleja en el rubro inmobiliario, este no se vio afectado como otros países. Sumado a esto, un retraso histórico en la inversión del Real Estate en Paraguay, alentaron el crecimiento”.

Esta empresa lleva edificados en su trayectoria unos 40 edificios residenciales y más de 20 que se distribuyen entre los mercados de oficinas y retail. En muchos casos se fondearon con dinero de capitales extranjeros. En la actualidad, trabajan en la Torre Villa Morra (de oficinas en uno de los ejes más consolidados de Asunción), que demandará una inversión de USD 8 millones; Los Jazmines, residencial, en pleno desarrollo con una inversión de USD 1,5 millones; y Park Plaza, otra propuesta corporativa, sobre la Avenida Aviadores del Chaco, que demandará USD 15 millones.

Sobre el crecimiento guaraní, Gross Brown, amplió y señaló: “el país posee muchas bondades para el desarrollo inmobiliario como ser, baja carga impositiva, abundante tierra disponible, mano de obra joven y económica, energía eléctrica y agua corriente a precios accesibles, leyes de incentivo a la inversión, bajo costo de la construcción. Por otro lado, no está demás decir que Paraguay tiene un gobierno que incentiva la inversión privada, permitiendo al sector empresarial generar nuevos negocios con flexibilidad y practicidad”.

Por otro lado, la firma argentina Soldati Propiedades, comercializa la torre Agora, desarrollada por Petra Urbana de Paraguay. Este proyecto, actualmente está en plena construcción (sexta losa) y estará completado para marzo de 2021. Se estima que insumirá una inversión de USD 5 millones. El proyecto tendrá un total de 63 unidades, distribuidas en 13 plantas y 3 niveles de cocheras. Las unidades de 3 ambientes poseen una superficie de 77 m2 y se ofrecen en 89.000 dólares con cochera incluida. Las unidades de 2 ambientes poseen 50 m2 y están en 54.000 dólares.

Sobre esta propiedad, Facundo Soldati, el director de la comercializadora, puntualizó: “está dirigido a la clase media asunceña. Hay que resaltar que Paraguay hizo bien las cosas en lo macroeconómico, y esto permitió que exista una política atractiva para el inversor extranjero para impulsar un desarrollo sostenible”.

Asunción vive un proceso de cambio con amplia demanda en materia de viviendas. “Por eso los desarrolladores nos enfocamos en proyectos que abarquen a todo el público, no solo al premium. Desde nuestra empresa hemos creado edificios con distintas identidades, por ejemplo, los que llamamos Pet Friendly, con soluciones para que las familias puedan vivir tranquilas con sus mascotas”.

Hacia otros segmentos

La simbólica Avenida Santa Teresa es otra de las que atrae la atención de los desarrolladores, y en el eje corporativo de esta ciudad se ubican locales comerciales con primeras marcas y los centros comerciales de la ciudad como el Paseo La Galería, y el Shopping del Sol. En este sector de la capital guaraní se ubican las principales sedes y oficinas de las compañías que operan en Paraguay. Es una especie de eje corporativo, como la zona Catalinas en Buenos Aires, y conviven espacios de primer nivel en los inmuebles como World Trade Center Asunción y Las Blue Tower.

Al margen de las torres, también crecen otras propuestas. Sobre el tema, Raúl Constantino, puntualizó, que “al inicio de la expansión, el segmento residencial era el que predominaba, pero actualmente, se están construyendo edificios con unidades más pequeñas en el orden de los 80 m2 con dos dormitorios”.

Pero los indicadores precisan que no sólo Asunción muestra el crecimiento, el derrame también llegó a ciudades periféricas como Luque, Mariano Roque Alonso, Fernando de la Mora y San Lorenzo.

En el rubro corporativo, los proyectos se dirigen a los inversores de renta, tanto nacionales como extranjeros .Y en vivienda, en el segmento ABC1 a los inversores de renta, nacionales y extranjeros (principalmente argentinos). Para los propietarios de Paraguay que pueden acceder a su vivienda propia hay créditos que se acuerdan entre 15 y 20 años de plazo.

Sobre los precios, en lo residencial medio, los valores en venta por m2, van desde USD 1.200 a USD 1.800 m2, mientras que los alquileres de las viviendas, y dependiendo lo que ofrecen y la ubicación, varían entre USD 7 y USD 11 por m2. En tanto que las locaciones de las oficinas, oscilan entre 12 y 16 dólares, por metro cuadrado.

Asunción, según los analistas, va a seguir en expansión, y los capitales albicelestes mantendrán la apuesta en el ladrillo en este territorio. “Hasta 2017, las inversiones en Paraguay estaban destinadas al rubro ganadero, gastronómico y logístico. A partir de la inestabilidad económica de 2018, los argentinos con fondos desembarcaron en Paraguay atraídos por la baja carga tributaria cuyo impuesto a la ganancia es del 10% anual y el IVA para la compra venta es de un 1.5%”, dijo Juan Francisco Gils.

Hay que remarcar, que en los últimos 10 años el PBI paraguayo creció un 54%, y todas las variables económicas favorecieron a este impulso que contribuyeron para aggiornar la cara de una de las capitales de América del Sur.

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