La rueda mayorista abrió con el dólar decididamente en baja. El dólar llegó a tocar un piso de $41,35. O sea, bajaba $1,05 en relación al día anterior. El hecho de que se anunciara que se ponía fin a la línea de bandas de flotación y de que el Banco Central iba a intervenir cuando el tipo de cambio superara $51 desalentó a los compradores y alentó a los vendedores.
Pero apenas terminaron los anuncios de controles de precios, la divisa empezó una escalada que la llevó hasta 42,20 pesos. Faltaban 45 minutos para el final de la rueda y en ese momento apareció una mano bancaria oficial que empezó a vender para reforzar el impacto de la fuerte absorción de dinero por parte del Banco Central a través de las Leliq. La divisa tocó en ese momento un piso de $41,85 y rebotó, pero tras cada rebote aparecían vendedores oficiales. El cierre encontró al dólar 50 centavos por debajo del día anterior a $41,90 (-1,17%). El monto de negocios fue de USD 840 millones, 10% por encima del día anterior, lo que muestra la aparición de inesperados jugadores.
Este volumen es independiente de las dos licitaciones de dólares del Tesoro de USD 30 millones cada uno a un precio promedio de 41,59 pesos.
En bancos y casas de cambio, la divisa bajó 4 centavos a $42,98 (-0,92%). La prueba de la intervención en el mercado oficial es que el "blue" tuvo un comportamiento distinto. Cerró a $42,40 con una leve baja de 15 centavos. Acá la demanda estuvo más sostenida.
Pero la verdad está en los datos del riesgo país que subió nada menos que 4,24% a 835 puntos básicos y es la cifra más elevada desde el 26 de diciembre pasado, a pesar de que el Bono del Tesoro de Estados Unidos quedó sin cambios. Lo que sucedió fue que se derrumbaron los títulos argentinos después de las medidas de control de precios y endurecimiento de las tasas de interés. El Bonar 2024, el título de referencia de la deuda, cedió nada menos que 3,26 por ciento. El Discount en dólares con ley argentina perdió 2,35% y el de ley neoyorquina 2 por ciento.
En la licitación de Letras de Liquidez (LELIQ) el Banco Central se jugó todo para sostener al plan económico. Captó títulos por $255.586 millones a una tasa promedio de 67,12% que representa una suba de 0,33 puntos, un porcentaje elevado para un día. Por eso quedó la sensación de que el Banco Central no solo no va a bajar las tasas, sino que su intención es subirlas, algo que se contradice con el control de precios para bajar la inflación.
Pero a esta altura el mercado diferenciaba al control de precios de la suba de las tasas. El primero es un hecho político que no afecta directamente al mercado financiero porque las remarcaciones anticipadas de hasta 35% como es el caso de la leche y demás productos, antes del congelamiento, le aseguran al empresario una ganancia financiera que elevará la inflación esperada para abril. El control no paralizará la dolarización de la economía.
Que no olvidan ni el Banco Central ni los inversores es que el lunes, el Tesoro deberá pagar USD 2.836 millones porque vence definitivamente el Bonar 2019 y eso afectará a las reservas del Banco Central
Las tasas más elevadas y la fuerte absorción de $52 mil millones en la licitación de Leliq obligarán a algunos tenedores de dólares a rehacer sus cuentas y transformarse en inesperados vendedores. Lo curioso es que el Gobierno hizo encuestas y la mayoría de la población aprueba los Precios Cuidados, que mantienen una buena imagen. En cambio, para el mercado financiero, es un motivo para cubrirse en dólares porque es la admisión de la derrota en la tarea de bajar la inflación.
Pero lo que no olvidan ni el Banco Central ni los inversores es que el lunes, el Tesoro deberá pagar USD 2.836 millones porque vence definitivamente el Bonar 2019 y eso afectará a las reservas del Banco Central. Acá los que cobren los dólares de ese bono serán los árbitros del mercado porque si no los recolocan en otros bonos que ofrece el Gobierno, habrá problemas.
Se derrumbaron los títulos argentinos después de las medidas de control de precios y endurecimiento de las tasas de interés. El Bonar 2024, el título de referencia de la deuda, cedió nada menos que 3,26 por ciento
A todo esto, las reservas del Banco Central siguieron en baja. Esta vez cedieron USD 133 millones a 76.659 millones a pesar de que en el exterior se ganaron USD 76 millones por la suba del euro, de otras monedas y de bonos soberanos europeos. Cabe aclarar que los 60 millones diarios que se licitan por cuenta del Tesoro integran las reservas y esa es una merma que se produce diariamente.
Los pagos al exterior fueron ínfimos; USD 7 millones a organismos internacionales y 5 millones a Brasil para compensar operaciones de comercio exterior.
El S&P Merval, el índice de las acciones líderes de la Bolsa, después de dos ruedas de alzas, perdió 0,78%. El monto de negocios fue elevado, casi $ 1.000 millones. Solo hubo cinco papeles que mejoraron su precio. El más destacado fue Banco Macro con 2,29%. La mayor caída estuvo en Transportadora Gas del Sur con 4,94 por ciento.
Los ADR's argentinos que cotizan en Wall Street tuvieron mejor suerte. Los certificados de tenencias de acciones se repartieron entre alzas y bajas. Banco Macro aumentó 4,80% y Edenor, 2,19 por ciento. La mayor caída fue la de IRSA con 4,17% seguido por Transportadora Gas del Sur con 3,79 por ciento.
Los días de Semana Santa no serán tranquilos. Será un plazo muy largo para los que están en el mercado porque el vencimiento de los Boden 2019 augura un día complicado y se confirmará si el cierre del dólar del miércoles significó una tendencia al alza o una confirmación de la baja de último momento.
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