El gerente general de Walmart Argentina, Agustín Beccar Varela, adelantó que será un año difícil en materia de consumo
En un contexto de alta inflación, salarios deprimidos y merma del empleo, el consumidor se convirtió en un buscador incansable de precios. Recorre distintos comercios para encontrar la mejor oferta de cada una de las categorías de producto y aumentó su frecuencia de compra. Con este escenario como protagonista, la cadena de supermercados norteamericana Walmart puso su foco en cómo ser más eficientes en materia de costos para ofrecer un mejor precio y apostó, como lo hizo también la competencia, a tener un mayor desarrollo de sus marcas propias en góndola.
Al término del Encuentro Nacional de Proveedores que organizó la compañía el viernes, el gerente general de Walmart Argentina, Agustín Beccar Varela, dialogó con Infobae sobre el contexto actual, las perspectivas para el año y las estrategias de transformación que está llevando a cabo la empresa para llevarle a los clientes la mejor propuesta comercial. Sobre las marcas propias, afirmó que tuvieron una participación en el total de las ventas del 15,3% en 2018 y para este año esperan que trepe al 18%, con la ayuda de nuevos lanzamientos.
También se refirió a la gestión de Mauricio Macri y si bien reconoció que se comenzó a trabajar en los cuatro temas que preocupan a la industria (costos laborales, logísticos, presión impositiva e informalidad) para lo cual se conformó una mesa de competitividad, los avances se quedaron a mitad de camino.
—¿Cómo está hoy la empresa y qué perspectivas tienen hacia adelante?
—El contexto está difícil, pero somos optimistas hacia adelante porque venimos trabajando fuerte en un proceso de transformación para poder ser una compañía cada vez más competitiva y poder darle más respuestas a nuestros clientes. Trabajamos mucho hacia adentro y con nuestros proveedores, que son nuestros socios y con los cuales tenemos que lograr una buena propuesta comercial. Ya tenemos buenos resultados parciales que nos ponen optimistas para cuando mejore el contexto económico.
—¿Cuáles son esos buenos resultados parciales?
—Por ejemplo, el año pasado crecimos en share (0,4%), si tomamos tiendas comparables (0,4%), mejoramos nuestra percepción de precio, nuestro índice de satisfacción del cliente y nuestro ecosistema de e-commerce creció el doble de lo que creció el mercado. También mejoramos nuestra productividad por cambios en procesos, tecnología y capacitación. Y todo eso nos permite trabajar sobre los precios, que es lo que hoy prima en términos de lo que el cliente busca.
—¿Cómo evolucionaron las marcas propias dentro de la venta total de la cadena?
—El año pasado cerramos en 15,3% y este año vamos a crecer al 18%, que es una participación récord. Hoy hay un mercado que está mucho más propicio a marcas de menor precio, y a su vez nuestras marcas también tienen calidad. La idea es hacer nuevos lanzamientos, no sólo de categorías nuevas con las marcas que ya tenemos (Great Value, Acuenta y Equate), sino nuevas marcas que podrían llegar a fin de año.
—¿Con el refuerzo de las marcas propias presionan a los proveedores de marcas líderes con los precios?
—Creo que es una sana competencia en la góndola. Nuestro propósito es ahorrarle dinero a la gente para que pueda vivir mejor. Les dijimos a nuestros proveedores que no vamos a dejar de tener el precio más bajo, pero creemos que en conjunto podemos trabajar de forma inteligente para que podamos tener una propuesta que tenga tanto marcas líderes como marcas más accesibles.
—¿Cómo cerró el primer trimestre el consumo y qué proyectan para todo el año?
—Este año va a tener un comportamiento bastante disímil entre los trimestres. Los primeros dos van a ser muy malos, con caídas bastante pronunciadas en muchas categorías (promedio de 3% del mercado), y a partir del tercero y cuarto vemos un crecimiento. Probablemente el año termine en -1%. Mejor que el año pasado, pero todavía un año difícil. Por eso, estamos trabajando mucho en nuestra estrategia de precio, que además de las marcas propias, que son 20% más baratas que las de nuestros competidores, incluye la canasta de Precios Imbatibles -que son los productos de mayor incidencia en canasta familiar, que están al mejor precio de la zona donde está la tienda-, y otros productos donde siempre tenemos ofertas.
—¿Creció la participación de Precios Cuidados en el total de venta?
—Algo creció. Hoy se ubica en el 3% de la venta total. Nos parece que es interesante desde el punto de vista del objetivo de accesibilizar ciertos productos a la gente y que sea una referencia de precio. Pero tiene que estar coordinado entre el gobierno, los proveedores y nosotros para que sea sustentable en tiempo.
—¿Siguen con problemas de abastecimiento de leche?
—Por ahora sí, porque es un problema puntual debido a las inundaciones, el factor estacional y la salida de Sancor del mercado de leche fluida. Pero estamos trabajando con la industria para poder resolverlo lo antes posible.
—¿Les preocupa la suba del dólar con la actual contracción del consumo?
—El tema del dólar impacta en muchas cosas, empezando por el humor social del consumidor, que tiene una relación directa con la compra. Después, tratamos de tener nuestros costos lo más eficientes posible para que el impacto del dólar no sea tan alto; y lo mismo con nuestros proveedores, intentar que no se traslade inmediatamente a los precios.
—¿Cómo son los niveles actuales de rentabilidad?
—La rentabilidad es mala en toda la industria. Y en un sector con rentabilidad justa, cuando tenés estos cambios abruptos de la economía, no tenés la espalda para absorberlo.
—¿Evalúan cerrar más tiendas?
—No está previsto. Cerramos 12 de formato chico más la tienda del Dot porque decidimos apostarle a los formatos más grandes, además de la propuesta omnicanal.
—¿Cuánto representa hoy la venta online?
—Representa 2% de las ventas, mientras que en los Estados Unidos, 8%, y en países como Corea del Sur o Inglaterra, 15%. No es tan poco si pensamos que sólo vendemos desde las tiendas Walmart. Pero estamos testeando si es viable comercializar online desde Changomás.
—¿Cómo analizan la gestión de Macri? ¿Les preocupa la polarización de cara a las elecciones?
—Nosotros estamos acá hace más de 25 años, y estamos más allá de la coyuntura. Con este gobierno, hubo varios aspectos positivos, como por ejemplo que pudieron plantearse los problemas de costos laborales, logísticos, la alta presión impositiva y la informalidad. Incluso, se creó una mesa de comercio y se han tomado iniciativas. Pero nos hubiese gustado ir un poco más rápido. Hacia adelante, esperamos que sea quien sea el nuevo presidente, tenga una agenda que trabaje sobre estos temas.
—¿Con respecto a la informalidad, se refiere a los supermercados chinos?
–Hay varios jugadores que trabajan dentro de distintos grados de informalidad que les da una ventaja competitiva frente a nosotros que trabajamos con todas las reglas. No es justo y tampoco creemos que nos convenga como país ir hacia ese mercado informal. Por eso hoy hicimos el llamado a los proveedores para que trabajemos juntos para sostener ese mercado formal. Y en eso también necesitamos del gobierno.
—Salieron los datos de pobreza, que mostraron que volvió a ubicarse en 32%. ¿Tienen más pedidos de bolsones de comida de organizaciones sociales?
—Estamos muy cerca de esa situación porque somos la primera línea donde la gente viene a cubrir sus necesidades básicas. Todos los años ocurren esos pedidos, más que nada a fin de año, pero en los últimos dos estuvo muy bien organizado con el Gobierno, de manera de poder dar respuesta a esos pedidos sin tener que sufrir situaciones de saqueo.
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