Donald Trump mostró un tono conciliatorio por los avances que estaba anunciando China que incluían desde rebajas de aranceles para los automóviles fabricados en Estados Unidos hasta renunciar a las rigideces que imponen a la radicación de empresas.
El gesto reanimó a todos los mercados del mundo porque el dinero cambió de dirección. Los bonos norteamericanos y el dólar, dejaron de ser por un día los destinos elegidos por los que tienen aversión al riesgo. Por la moneda estadounidense cayó frente a casi todas las monedas del mundo incluidas las de los países emergentes.
El clima de inversión se dio vuelta en 24 horas. Wall Street cerró con todos sus indicadores positivos al igual que las bolsas europeas y las asiáticas.
Por supuesto, la bolsa local también fue parte del renacimiento del riesgo y el índice Merval de las acciones líderes subió 0,45%, un aumento que toma más relevancia porque coincidió con la baja del dólar en la Argentina.
Los bonos norteamericanos y el dólar, dejaron de ser por un día los destinos elegidos por los que tienen aversión al riesgo. Por la moneda estadounidense cayó frente a casi todas las monedas del mundo incluidas las de los países emergentes
No hubo un sector elegido, sino que los inversores se volcaron hacia los papeles que tenían precios de oportunidad. Por eso Transportadora Gas del Norte se destacó con un aumento de 2,93%. Los aumentos del resto de las acciones nunca sobrepasaron 2%. Las bajas alcanzaron a solo cinco acciones y fueron de escasa magnitud.
En Wall Street los ADR's argentinos, certificados de tenencia de acciones que cotizan en dólares, no sobresalieron. Solo Loma Negra logró un alza interesante de 4,45%.
Humor porteño
En Buenos Aires, el humor durante el día estuvo centrado en lo que sucedería con la divisa –en un jornada en la que se liquidaban las Letras del Tesoro en dólares– y con la política de tasas de interés.
La baja de tasas en la licitación de Letras de Liquidez (Leliq) llamó la atención porque se creía que el Banco Central iba a interrumpir su política después de la fuerza del dólar en el mundo. Sin embargo, aprovechó la ocasión y la tasa de corte la fijó en 59,50% anual (0,05 puntos menor a la de la rueda anterior). Esta reducción de tasas impidió que se renueven la totalidad de los títulos. El Banco Central colocó $156.296 millones y dejó liberados $21.745 millones. En dos días le agregó al mercado $40 mil millones.
El dólar comenzó en baja y amenazó con un leve repunte poco después de las 11.00 pero fue un amague que no prosperó. En los bancos y casas de cambio, la divisa perdió 20 centavos y cerró a $38,62. El "blue" se mantuvo en $37,50 casi sin operaciones. En la plaza mayorista, el retroceso fue de 19 centavos a $ 7,61.
Las reservas del Banco Central tuvieron un día de alivio porque subieron USD 93 millones a 49.882 millones. El mérito fue del euro y del oro que recuperaron valor frente al dólar y lograron que las reservas se revaluaran USD 56 millones. Los pagos fueron elevados: 88 millones a organismos internacionales y 2 millones a Brasil.
La licitación de Letes, estuvo por encima de las expectativas. La fuerte renovación se debió al vencimiento del impuesto a los Bienes Personales. El que mantenga su posición en Letes queda exento del impuesto que computa el patrimonio individual al 31 de diciembre próximo.
Por eso sobre vencimientos por USD 1.100 millones, el Tesoro colocó USD 850 millones a 4,75% anual a lo que hay que agregarle 0,50% de la tasa de impuestos a los bienes personales.
Los bonos tuvieron una leve recuperación, pero siguen siendo activos que los inversores rechazan. El riesgo país tuvo un leve retroceso de 2,11% a 741 puntos básicos. La suba de 0,60% del Bonar 2024, el bono en dólares de referencia, fue fundamental para que mejore la calificación. De todas maneras, los bonos argentinos están considerados como activos de elevado riesgo y pronto van a perder su calificación actual. Por de pronto ya se está revisando la nota de los títulos públicos provinciales, al tiempo que una gran empresa que cotiza en la Bolsa, está a punto de entrar en default porque no puede cumplir con sus Obligaciones Negociables emitidas en dólares.
La licitación de Letes, estuvo por encima de las expectativas. La fuerte renovación se debió al vencimiento del impuesto a los Bienes Personales
La rueda dejó una conclusión. El Banco Central está muy presionado y no puede bajar demasiado la tasa de interés sin que se le escape el dólar. También pudo observar que su plan depende más de lo que sucede en el exterior. Esta vez se vio favorecido por un dólar que bajó no solo en la Argentina sino que perdió 0,30% frente a las seis principales del mundo y 1,70% frente al real, la otra moneda que el país debe observar con atención. Ahora el dólar pasó de 3,92 reales a 3,88. Pero sabe que la dolarización de carteras es una tendencia y que no puede aferrarse al atraso cambiario.
El riesgo país es otro problema porque depende de cómo hagan los deberes para ganar os elecciones presidenciales en 2019. Para un inversor no tener horizonte porque no sabe que pasará con la deuda en 2020, es como operar enjaulado.
Seguí leyendo: