"El sentido es buscarle cuestión constructiva y ver de qué manera se puede ayudar y aclarar lo que está pasando. No hay la más mínima mala leche en la carta. A mí en las redes me dicen de todo: lo más suave, que el peronismo quiere poner palos en la rueda. No es así", le aseguró el economista Guillermo Nielsen a Infobae.
El ex secretario de Finanzas de Roberto Lavagna se refiere a la carta que le envió el Partido Justicialista a Christine Lagarde, directora del FMI –y que firma el titular de la Comisión de Economía, el ex secretario de Comercio kirchnerista Guillermo Moreno–, donde se le pide al Fondo que, por cuestiones políticas, no adelante los fondos del acuerdo stand by, tal como solicitó el Gobierno de Mauricio Macri en el nuevo acuerdo que se negocia por estas horas.
El Gobierno que asuma va tener una situación delicada, dentro de un programa del FMI pero solo con las obligaciones, sin desembolsos. Si es que el programa sale como lo planteó Macri
Luego de manifestar su preocupación por el contexto, Moreno escribió: "He comisionado al Lic. Pablo Challú, al Dr. Rafael Perelmiter y al Lic. Guillermo Nielsen, miembros del cuerpo que presido, para que tomen contacto con los integrantes de su staff que usted amablemente designe, a fin de reflexionar sobre la problemática ut supra señalada y su posible resolución".
"No me reuní con Moreno, lo arreglamos por teléfono. Nos conocemos: los dos fuimos funcionarios de los gobiernos de Kirchner y Duhalde. Fui secretario de Finanzas de dos gobiernos peronistas: es razonable que me llamen", asegura Nielsen, quien aclara que no es parte del PJ –tampoco del Frente Renovador de Sergio Massa, desde hace tres años–, pero sí que es "muy consultado" por muchos de sus líderes.
—¿El PJ está dispuesto a ayudar en este contexto?
—El PJ primero quiere saber qué va a pasar, en qué consiste el nuevo programa. Si va a haber más plata o no. Y cuáles serán las condicionalidades de la Reserva Federal si ellos terminan poniendo el dinero. Son temas medulares, muy importantes, no son cosas livianas.
—¿Los llamaron desde el Fondo o respondieron la carta?
—No, para nada. Todavía no.
—¿Esperan reunirse con los equipos técnicos que están en Buenos Aires?
—No sé, llegaron un poco de sorpresa, o al menos no se avisó que venían. Es parte de la falta de transparencia sobre lo que está pasando. Yo, lamentablemente, viajo a EEUU por trabajo. No voy a estar la semana que viene y parte de la otra. Si hay reuniones allá, me acerco.
—¿Qué cree que está pasando en la negociación del nuevo acuerdo?
—Si se toma el mensaje del presidente Macri de hace dos miércoles, se supone que el Fondo va a pasar los desembolsos de 2020 y 2021 a 2019. Pero lo que sucede es que 2019 es un año electoral y los dos años siguientes serán los primeros de un nuevo presidente que no se sabe quién será. El Gobierno que asuma va a tener una situación delicada, dentro de un programa del FMI pero solo con las obligaciones, sin desembolsos. Si es que el programa sale como lo planteó Macri. El presidente puso al Fondo en una situación incómoda. El FMI no quiere aparecer en ninguna parte del mundo jugando a favor de un color político. Además, no es tan fácil que "fabriquen" más plata cuando volvés al directorio unas semanas después de haber firmado un acuerdo que incumplís. Es un mal antecedente. Una cosa es la que puede llegar a ser la posición de EEUU –que tampoco sabemos si realmente es tan a favor–, pero sí hay muchos países que no van a levantar la mano porque no cumplimos con la primera revisión, que suele ser la más fácil.
Los que conocemos al Fondo sabemos que es muy difícil un nuevo programa con más plata habiendo fallado la primera revisión
—¿Si se aprueban los adelantos cree que el FMI inclinaría la balanza política a favor de Macri?
—El Gobierno tuvo un ataque de optimismo importante. Incluso cree que el Fondo ahora le podría dar más plata. Si esto es así no habría problema: ponen más en 2019 y quedan los desembolsos previstos para 2020 y 2021. Hasta ahora el FMI no se pronunció nunca respecto a las características del próximo programa. Los que conocemos al Fondo sabemos que es muy difícil un nuevo programa con más plata habiendo fallado la primera revisión. Quizás ocurra si hay un apoyo político brutal de parte de un jugador fuerte en el directorio, como EEUU. Eso es otra cosa que juega mucho el Gobierno: Donald Trump es un amigo que vía la Reserva Federal, el Tesoro o no se sabe desde dónde, "la va a poner". De estas cosas queremos conversar.