"Las investigaciones y órdenes de arresto son negativas para Electroingeniería y Albanesi. Conllevan un claro riesgo de reputación y distraerán a la gerencia de las operaciones diarias. El proceso también podría debilitar la liquidez de ambas porque aumentará el riesgo de refinanciamiento".
La enumeración figura en el último informe de la calificadora Moody's, y se refiere al impacto que tiene el escándalo de los cuadernos en dos de las empresas involucradas que, si bien no cotizan en la Bolsa, sí son sujetas a puntuación crediticia.
El caso aún se encuentra en una etapa inicial y puede convertirse en un asunto más amplio, que abarca múltiples empresas de diversos sectores
La referencia también es a la detención de Gerardo Ferreyra y Jorge Neira, accionista y gerente comercial de Electroingeniería, y de Armando Losón, presidente de Albanesi.
Después de describir el detalle de las medidas que ordenó el juez federal Claudio Bonadio, el 1 de agosto pasado, Moody's detalla que a pesar del escándalo y de sus pronósticos, las calificación de la deuda de ambas empresas se mantiene, por el momento: "B2 Estable" (la misma de la Argentina, por ejemplo), para Albanesi, una compañía de generación de energía que la semana pasada suspendió una colocación de deuda por el escándalo, y "CA Estable" (es una calificación más débil, la anteúltima de una escala de 23), para la constructora Electroingeniería.
Sobre Electroingeniería se advierte que "puede enfrentar serias limitaciones de liquidez debido a su alta dependencia de fuentes externas de financiamiento" y que "la orden del juez aumenta el riesgo de que tenga problemas para refinanciar sus vencimientos a corto plazo", como $280 millones en obligaciones que vencen en noviembre de 2018.
"No está claro si las investigaciones podrían llegar a los proyectos de Electroingeniería que ya están en marcha", advierte la calificadora.
Con respecto a Albanesi, se detalla que si los niveles de liquidez son adecuados, "enfrenta vencimientos de deuda a corto plazo que pueden necesitar refinanciarse" y que "los proyectos actuales incluyen la expansión de 275 megavatios en capacidad instalada en las centrales eléctricas Ezeiza y Maranzana, que deberían comenzar a operar en 2020".
"El caso aún se encuentra en una etapa inicial y puede convertirse en un asunto más amplio, que abarca múltiples empresas de diversos sectores", avisa Moody's.
Por fuera del informe de Moody's, otras empresas mencionadas en el escándalo que sí cotizan en Bolsa, como Tenaris y Ternium, ambas del Grupo Techint, también tuvieron impacto negativo. El jueves pasado, Tenaris cayó 7% en el NYSE, y luego se estabilizó en el orden de los USD 34 por acción. Hoy, Ternium cae cerca del 4%.
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