General Motors suspende su producción por una semana, pero asegura que no reducirá personal

A partir del viernes 27, la planta de Alvear suspenderá actividades para acomodar la producción frente a los cambios en el mercado

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General Motors cuenta actualmente con
General Motors cuenta actualmente con 2.100 empleados a nivel nacional

La automotriz General Motors (GM) suspenderá por cinco días hábiles, a partir del próximo viernes, la producción en su planta de Alvear, al sur de Rosario. Este parate, de acuerdo a la empresa, busca adecuar el volumen a "recientes fluctuaciones de mercado".

La medida se produce un mes después de que GM anunciara el fin del programa de descuentos y bonificaciones que potenciaron sus ventas durante los últimos dos años. De todas formas, la semana de inactividad igual va a ser pagada en su totalidad a los operarios. "El 7 de mayo vuelven todos a trabajar. El mercado está modificando su volumen y aprovechamos el feriado", afirman. 

A nivel país, GM actualmente tiene 2.100 empleados. La mayor parte de su producción (el año pasado alcanzó las 55.000 unidades) va dirigida a exportaciones a Brasil. La empresa explica que, a pesar de las cifras récord que el mercado automotriz experimenta hoy en día, "el mercado está modificando su volumen", con lo cual aprovechan el próximo feriado para ajustar la producción.

Desde el sector automotriz aseguran que parte de las declaraciones cruzadas tiene que ver con una interna sindical entre facciones gremiales

No es la primera vez que la automotriz emplea este tipo de método frente a un ajuste en su producción. En 2015 ya se había implementado una medida similar, frente a correcciones en la proyección de ventas a Brasil.

Germán Tonero, delegado de General Motors en Rosario, dijo que "GM argumentó que la paralización por cinco días, hasta el 4 de mayo, es porque se cayeron 5.000 unidades de venta a Brasil", pero planteó dudas ya que hace semanas que se vienen avisando suspensiones en días puntuales con poco o ningún aviso. Desde la empresa niegan enfáticamente que el freno de producción sea una previa de reducción de planta permanente o turnos.

Mientras tanto, Marcelo Barros, secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) de Rosario, expresó sus preocupaciones, indicando que "tememos que atrás de esto se quiera reducir personal".

Desde el sector automotriz aseguran que parte de las declaraciones cruzadas tiene que ver con una interna sindical entre las facciones gremiales de izquierda y Smata.

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