La devaluación del peso y el aumento de casi 120% en el valor del dólar que dispuso el gobierno de Javier Milei mejoró los precios que recibieron los productores y exportadores de granos en los últimos días. Esto impulsó ventas y se descuenta que la tónica vendedora continuará la próxima semana en el mercado de granos. Dicha operatoria también movilizó la liquidación de divisas, lo que impulsó la compra de dólares y el aumento de la reservas del Banco Central.
Este círculo de negocios fue calificado de “positivo” por operadores y analistas del mercado de granos y consecuencias de los anuncios del ministro de Economía, Luis Caputo, que el martes 12 de diciembre presentó diez medidas económicas de emergencia: entre ellas la oficialización del tipo de cambio oficial de $800, además incrementos en el Impuesto PAIS y en las retenciones a las exportaciones, al 15%, salvo para la soja, que seguirá en el 30 por ciento.
En el mercado local, se espera que continúen las ventas de las existencias granarias luego del beneficio que le reportaría vender en breve sus tenencias a una cotización del dólar oficial
El miércoles 13 se publicó en el Boletín Oficial el cambio dispuesto en el Programa de Incremento Exportador (PIE), especificados en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 28/2023 que promovió un nuevo Dólar Exportador: estableció que los exportadores deben liquidar el 80% de sus divisas en el mercado oficial, con un valor de referencia de $ 800 por dólar; y que el 20% restante se establece a través del valor que reporta el mercado de dólares financieros, es decir la cotización que ofrece el llamado ‘Contado con Liquidación’.
En el mercado local, se espera que continúen las ventas de las existencias granarias, por el beneficio que reportaría vender en breve tenencias a una cotización del dólar oficial que esta semana pasó de 360 a 800 pesos y que mensualmente se irá ajustando en un 2%, al tiempo que el propio gobierno adelantó una previsión de inflación del 18 al 25%, hecho que alentaría la decisión de vender granos para pasarse a activos a valores ajustados por el costo de vida mensual.
Precios y volumen negociado
Catalina Ferrari, analista de mercados granarios de AZ Group, afirmó a Infobae que tras los anuncios oficiales el miércoles 13 se comercializaron 24.153 toneladas de soja, 43.944 toneladas de maíz y 31.479 toneladas de trigo, con valores negociados de $258.000 la tonelada de soja, $144.000 la de maíz y $ 160.000 la de trigo.
La especialista consignó también que el jueves 14, en el segundo día de operaciones, “se registró un mayor volumen comercializado que el día previo siendo de 67.544 toneladas de soja, 387.237 toneladas de maíz y 236.419 toneladas de trigo”. “En los tres cultivos -detalló- hubo un aumento del precio negociado. La soja pasó de $258.000 a 268.000 por tonelada, la tonelada de trigo aumentó en $13.000 y el maíz tuvo un aumento de $5.600 por tonelada”
Mercado de granos
Javier Preciado Patiño, de Ría Consultores, consignó que el nuevo tipo de cambio del PIE 80/20 “significó una mejora del 30% respecto a la fórmula anterior de 50/50. Por ello, tanto o más importante que esto es la brecha cambiaria. Si bien lo ideal para el agro sería la unificación cambiaria, un dólar exportador de $840 contra un blue y tipos financieros en torno a 1.000 pesos, es lo mejor dentro de lo posible”.
El otrora subsecretario de Mercados Agropecuarios indicó que “en los precios ofrecidos, el trigo reflejó muy bien la adecuación del tipo de cambio con operaciones en torno a los $180.000 por tonelada, mientras que el maíz y la soja todavía no reflejan ese incremento cambiario del 30%, con aumentos del 18% promedio”.
“En las operaciones declaradas -dijo Preciado Patiño-, se ve un aumento importante en las ventas de trigo, que solo el jueves sumaron 224.000 toneladas entre precio hecho y entregas a fijar, más 11.000 en fijaciones. Tener en cuenta que lunes y martes el mercado estuvo paralizado, y recién el miércoles comenzó a mostrar una leve reacción. Al tiempo que el maíz también mostró una fuerte reacción el jueves con 377.000 toneladas vendidas a precio hecho o entregadas a fijar. Y, es de estimar, que de mantenerse una brecha corta entre el dólar exportador y el financiero deberíamos ver un buen ritmo de ventas en las próximas semanas. También puede ser un estímulo el incremento propuesto en las retenciones”, dijo.
Diego de la Puente, director de la consultora Nóvitas, aseguró que “si bien sabemos que es un programa de emergencia, también sabemos que la idea es contar en un futuro un dólar único, con un tipo de cambio flotante, sin brechas ni cepos”.
“Con este nuevo programa, se pasó de un valor de referencia de $650 a $850 por dólar operado. Y tras el anuncio oficial, el gobierno tuvo una primera jornada buena porque la brecha que estaba en el 180% cayó al 34%. Y en el segundo día de operaciones, cayó debajo del 25%: esto llevó a muchos productores pensar en dolarizar su cartera con nuevas ventas de vender soja, maíz o trigo, comprando dólares con una brecha de solo el 25%. Eso puede mover ventas”, explicó De la Puente a este medio.
También el directivo de Nóvitas consignó que “otra acción inteligente del gobierno fue promover una devaluación violenta del dólar oficial de 380 a 800 pesos, y decirle al mercado, que el tipo de cambio va a ajustarse en un 2% mensual contra una inflación que sería del 20% también mensual, y por varios meses. Esto haría reducir a futuro la ventaja de la devaluación, y llevaría al tenedor de granos a aprovechar los precios actuales, vender granos, que perderían su valor a futuro, y tomar activos ajustados por inflación”.
Expectativas del mercado
Marcos Hermansson, presidente del Centro de Corredores y Agentes de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, explicó a Infobae que “contar con un tipo de cambio de $ 800, con un ajuste mensual del 2%, ha corregido una brecha que venía siendo insostenible. Sabemos que va a haber correcciones. La situación es compleja y no podemos aguardar una corrección desde el primer día. Esto es un juego de estrategia, y va a llevar cierto tiempo”.
“La expectativa que tiene el sector privado, puntualmente en el caso del Centro de Corredores, es buena. Hay que tener en cuenta que venimos de un año climático catastrófico y también de políticas macroeconómicas muy difíciles, con regulaciones y normativas que hicieron muy difícil la operatoria en el mercado de granos. Y sobre todo marcando una gran incertidumbre en el productor”, explicó.
Hermansson consignó además que “resta mucho trabajo por hacer: la próxima semana las entidades de las cadenas de valor fueron convocadas por la Secretaría de Bioeconomía. Veremos el carácter tendrá el encuentro. Desmantelar un proceso de subsidios, normativas y reglamentaciones que fueron trabando en general la comercialización de granos, no es sencillo, y creo que hay que tener paciencia y hacer aportes”, dijo.