En medio de una profunda sequía y desde su cuenta personal de Twitter, ayer el Secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, aseguró que “la estimación de trigo para el ciclo 2022/23 alcanzará las 14,9 millones de toneladas, lo cual garantiza tanto el abastecimiento interno como el saldo exportable para que los privados cumplan con sus compromisos”.
El ministro de Economía, Sergio Massa, reaccionó a las observaciones de Bahillo diciendo que se trata de una “gran noticia para los argentinos”. Además, destacó el esfuerzo de los productores que están enfrentando los problemas de la falta de lluvias.
El informe mensual de estimaciones de la propia Secretaría proyectó para la actual cosecha de trigo una producción total de 13,3 millones de toneladas, un 0,7% de caída en relación a los datos de noviembre pasado y un 39,8% de merma interanual.
Haciendo de puente entre los cálculos de Bahillo y las estimaciones técnicas, un comunicado aclaró después que a la proyección de cosecha hay que sumarle un stock inicial de 1,72 millones de toneladas de la campaña anterior que permite aproximarse a las 15 millones de toneladas mencionadas por el titular de la cartera agrícola en la red social. “Este volumen garantiza el abastecimiento interno de 6,5 millones de toneladas, exportaciones por 4,75 millones de toneladas, y 0,9 millones de toneladas para semillas”, dijeron desde Agricultura.
A mal tiempo, buena cara
En relación a las proyecciones que presentó ayer la Secretaría de Agricultura, Sergio Massa sostuvo desde su cuenta personal de Twitter que las mismas son una “gran noticia para los argentinos: El informe de cosecha de trigo nos deja una expectativa mucho mejor de la esperada para el 2023. A pesar de la sequía y de las desfavorables condiciones, valoramos enormemente el esfuerzo de las y los productores.”
A todo esto, Juan José Bahillo agregó: “Agradezco el enorme esfuerzo de los productores y productoras para alcanzar un volumen de trigo que se encuentra en el promedio de la última década, a pesar de haber sufrido una de las sequías más severas de la historia. Además (los productores no han dudado en continuar apostando a la actividad, invirtiendo en tecnología e innovación para alcanzar los mejores rendimientos en sus campos”.
Ahora bien, el dato del titular de la cartera agropecuaria nacional se diferencia de los cálculos del ámbito privado. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) estima una cosecha de solo 12,5 millones de toneladas, 2,5 millones por debajo del nuevo pronóstico oficial. Y la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) se ubicó todavía más abajo: 11,5 millones de toneladas, que significarían una merma del 50% en relación a la campaña anterior.
Estimaciones agrícolas
En el informe de estimaciones agrícolas que difundió Agricultura se resalta que “se modifica la superficie implantada respecto a la estimación de noviembre, como resultado del procesamiento de los primeros datos de campo recogidos mediante el Método de Segmentos Aleatorios (MSA), estimándose en 5,9 millones de hectáreas”. También se detalló que hasta el momento se cosechó el 81% de la superficie viable a nivel nacional versus 80% del ciclo precedente.
Además, se especificó que con el avance de la cosecha “se van ajustando los rindes, estimándose una producción final de unos 13,3 millones de toneladas, con unas 400.000 hectáreas no cosechadas a nivel nacional, por la falta de agua que afectó al cultivo prácticamente en toda la región triguera a lo largo de su ciclo y las heladas tardías en la fase crítica de floración”.
Por otro lado, se señaló que las tareas de cosecha finalizaron en el NOA y Chaco, con rendimientos muy bajos, del orden de los 10 quintales por hectárea, siendo una de las zonas más afectadas por la sequía. En Córdoba y Santa Fe, la cosecha está prácticamente terminada, con rendimientos que promedian los 18,8 y 23,2 quintales por hectárea, respectivamente. En la provincia de Buenos Aires el avance de siembra es del 66% y los rindes logrados son muy variables, estimándose un promedio de 26,8 quintales por hectárea.
Seguir leyendo: