Finalizó la tercera semana de vigencia del denominado “dólar soja”, con operaciones récord de ventas por parte de los productores, y donde se superó la meta del Gobierno de ingresos de divisas de 5.000 millones de dólares. Hay que recordar que el Plan oficial estipula, mediante el Decreto 576, un marco regulatorio por el cual hasta el 30 de septiembre se pueden realizar operaciones de liquidación de divisas para comprar soja a un tipo de cambio de $200.
Mientras tanto, crece la incertidumbre de dirigentes del campo y también de los exportadores, por lo que pueda pasar una vez que finalice la implementación del esquema. En un contexto de gran malestar por las disposiciones del Banco Central en plena vigencia del dólar soja, con un cambio de reglas de juego para el acceso al financiamiento por parte de los productores de la oleaginosa y la prohibición a las empresas del agro que operen en el esquema para acceder a los dólares financieros.
Según diferentes informes privados, la comercialización del sector primario superó los 11.700.00 toneladas de soja, y los exportadores destacaron que las divisas que ingresaron en lo que va del programa oficial, se ubicaron por encima de los 6.000 millones de dólares. El Secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, proyectó que el dólar soja podría finalizar con un 20 a 25% de aumento de la estimación original del Gobierno de 5.000 millones de dólares de liquidación de divisas.
Además, un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) detalló que la semana pasada aumentó un 120% el ingreso de camiones a los puertos de Rosario, en comparación con el promedio de los últimos tres meses. El ingreso superó los 26.00 camiones, un movimiento para el de septiembre que no se veía desde 2015, y que se acercan a los volúmenes que se observan mayoritariamente en momentos de plena cosecha.
Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y del Centro Exportador de Cereales (CIARA-CEC), comentó que el Programa que lanzó el ministerio de Economía generó un movimiento “muy positivo” por parte de los productores, acopiadores y cooperativas para vender soja. Además, en declaraciones a Infobae, dijo que las ventas del sector primario superaron las previsiones, y que derivó en un ingreso de dólares que superó las metas del Gobierno.
“Es un régimen positivo. También todo esto marca la enorme capacidad que tiene la cadena agroindustrial vinculada a la soja de reaccionar de manera favorable si le bajan la presión tributaria y le mejoran el tipo de cambio. De esto la política argentina tiene que tomar nota, dejar de castigar a este sector, y permitirle crecer para los próximos años”, dijo el empresario, quién además señaló que aguarda medidas que favorezcan a la cadena sojera, y sobre todo a los productores.
Más opiniones
También destacó la marcha del dólar soja, el presidente de la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA), Luis Zubizarreta. “Claramente la intención del Gobierno con esta medida era sumar reservas y el productor respondió de una manera fuerte, con ventas muy importantes, superando las expectativas. Creo que también esto demuestra que es un sector que tiene un enorme potencial y enorme poder de reacción”, expresó.
A todo esto, agregó que desde la entidad que preside se planteó la necesidad de trabajar para que se diseñen políticas de fondo que generen las condiciones que permitan hacer crecer la producción de soja. Durante su discurso de apertura del Seminario de ACSOJA, que esta semana se realizó en Rosario, Zubizarreta reclamó a las autoridades nacionales “un cambio de rumbo”, para alcanzar la meta de una producción total de 70 millones de toneladas.
“La Argentina podría estar embuchada en dólares si este sector crece, pero lamentablemente el mismo está muy por debajo de su potencial. Es por eso que necesitamos contar con adopción de medidas inteligentes. La Argentina necesita que eso suceda, ya que el país requiere apostar a una catarata de nuevos empleos, principalmente de alta calidad, y beneficios para toda la economía local”, agregó Zubizarreta. Además se mostró preocupado por las medidas adoptadas por el Banco Central, y pidió que se revean las mismas.
Economistas y dirigentes
Otro de los que opinó sobre la marcha del dólar soja, fue David Miazzo, economista jefe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), quien en diálogo con este medio sostuvo que hasta el momento “la medida fue efectiva para juntar dólares rápidamente. Sin embargo, ha generado inconvenientes. Por ejemplo, mucho ruido en el mercado de los alquileres de campos agrícolas, e incremento de costos en aquellas producciones que consumen pellet y harina de soja para sus animales”.
Por otro lado, en el sector de la dirigencia del campo, manifestaron que hay varias visiones respecto el balance que ofrece el dólar soja, y aristas a analizar, aunque destacaron que el Gobierno logró el objetivo recaudatorio que se trazó al momento de implementar la medida. Además, resaltaron que el productor consiguió una mejoría en el precio de venta de la oleaginosa, atento a que cada uno trata de mejorar sus ingresos en lo que más puede. Así lo señaló el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes.
“Como balance general no es bueno, porque necesitamos un dólar único para el campo. Solo si afectamos al tema soja, se rompe con el equilibrio que tiene el resto de la estantería que sostiene a otras producciones. De hecho, todas aquellas producciones que dependen de la alimentación del poroto de soja para producir carne o leche, también en el caso de los cerdos o aves, además de los feedlot y los tambos, se le ha complicado la situación a partir de un incremento de los costos de producción muy importante”, expresó el dirigente.
De cara a lo que viene, el titular de CRA planteó su preocupación por la elevada incertidumbre que hay en el sector por las medidas que adopta el Gobierno. “Esto no es bueno porque el escenario de confianza que se necesita para lograr el objetivo de lo que el gobierno quiere es justamente el camino contrario”, sostuvo Chemes, y proyectó para después del dólar soja, es decir a partir de octubre, “una retracción en la comercialización. El productor no va a vender porque evidentemente estas marchas y contramarchas no hacen bien. De hecho creo que hubieran tenido que continuar con este precio y por supuesto trasladarlo a las otras producciones”, concluyó.
SEGUIR LEYENDO: