Según informó en las últimas horas la empresa Bioceres, Nigeria aprobó el Trigo HB4 para procesamiento y/o producción de alimento humano o animal. Se trata de un desarrollo 100% argentino, producto de la colaboración público-privada de más de 18 años entre la empresa Bioceres y el grupo de investigación del Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (CONICET-UNL), liderado por la Dra. Raquel Chan, responsable de la investigación que da lugar al desarrollo.
En la aprobación que fue elevada por la Agencia Nacional de Manejo de Bioseguridad de Nigeria se deja constancia que “la importación de trigo modificado genéticamente: IND-00412-7 para alimento, alimento animal y molienda”, por otro lado se anunció que el aval tiene vigencia entre el 13 de julio del presente año y el 12 de julio del 2025. De esta manera Nigeria se transformó en el primer país de África en aprobar dicha tecnología.
Por otro lado, Nigeria es uno de los 10 países importadores de trigo más importantes del mundo y el séptimo en escala de población, donde con más de 210 millones de habitantes, la seguridad alimentaria y la producción de alimentos se ha transformado en una prioridad en su agenda política, social y económica.
Según informaron desde Bioceres, se estima que Nigeria produce 60mil toneladas de trigo por año, mientras que su demanda es de entre 4,5 y 5 millones. Hasta hace poco, el excedente lo obtenía de importaciones de Rusia y países que bordean el Mar Negro. Obviamente, que el ataque de Rusia a Ucrania generó un enorme perjuicio. El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos proyectó que Nigeria comprará trigo por casi 7 millones de toneladas en la campaña 2022/2023.
El trigo HB4 ya fue aprobado por Australia, Nueva Zelanda, Colombia y Brasil. Estamos empujando desde Argentina una agenda global con resultados notables. “Como siempre, Bioceres es solo la punta de una lanza. Muchas gracias al trabajo de los científicos del Conicet, la Dra Raquel Chan, y todos los investigadores, técnicos, biotecnólogos, abogados, funcionarios y accionistas que participan de este proceso”, dijeron fuentes de la empresa, desde donde también recordaron que en el presente año se consiguió la aprobación de China para la soja HB4.
En el caso de Argentina, en mayo pasado mediante la resolución 27/2021, el ministerio de Agricultura autorizó a la firma Indear a “comercializar la semilla, y a los productos y subproductos derivados de ésta, provenientes del trigo IND- ØØ412-7, y a toda la progenie derivada de los cruzamientos de este material con cualquier trigo no modificado genéticamente”. Además, otorgó vía libre a la comercialización “variedades de trigo con el evento IND-ØØ412-7 con posterioridad a su correspondiente registro en el Instituto Nacional de Semillas (Inase)”.
“No soy un trastornado para perjudicar al trigo argentino. Estamos tomando todos los recaudos para proteger la comercialización con los mercados asiáticos. El HB4 es una alternativa y una respuesta del cambio climático. Esta problemática se combate con infraestructura, pero también con biotecnología”, señaló el titular de la cartera agropecuaria, Julián Domínguez, luego de la publicación de la mencionada resolución.
Características
Las variedades de trigo HB4 tienen incorporado un gen del girasol que incrementa la tolerancia a condiciones de sequía, reduciendo las pérdidas de rendimiento frente al déficit hídrico. Desde la empresa sostienen que la aprobación en Brasil confirma lo que las autoridades argentinas habían dictaminado, que el trigo HB4 es seguro para el medio ambiente y para la salud humana y animal.
Desde Bioceres sostienen que el trigo HB4 “puede ser parte de la solución al desafío de la seguridad alimentaria, un problema que además de incrementarse por el cambio climático hoy está más vigente que nunca como una de las grandes consecuencias de la invasión rusa a Ucrania”.
Además, señalaron que a los productores de alimentos, la nueva tecnología permitirá aumentar sus rendimientos por hectárea y quedar menos expuestos a los efectos de la sequía. A modo de ejemplo, citaron que los resultados en los campos más afectados por la sequía ha llegado a ser 42% superior con el HB4. Por otro lado, aseguraron que habrá un beneficio al conjunto de la economía argentina, porque puede reducir la exposición a los fenómenos climáticos, y también para el ambiente, porque aumentar la productividad por hectárea permite preservar los recursos naturales.
SEGUIR LEYENDO: