Hoy el precio internacional de la soja registró una importante suba en el mercado de Chicago. Los contratos con vencimiento en marzo próximo subieron USD 11,05 y cotizaron en USD 511,15 la tonelada, un 2,20% más en relación a la rueda de negocios del día de ayer. Las cuestiones climáticas volvieron a marcar el pulso de los valores.
De acuerdo al reporte diario de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), si bien el clima más lluvioso podría estar limitando las pérdidas de rendimiento productivo de la oleaginosa en nuestro país, continúa la preocupación por recortes en caso de no continuar las precipitaciones. Además, comenzó la cosecha en Brasil, donde ya se ha trillado el 1,2% del área sembrada, un ritmo levemente por encima de la velocidad del año pasado. Por último, hubo un impacto en los precios de hoy de los potenciales planes para limitar las exportaciones de aceite de palma en Indonesia, principal productor mundial de este aceite.
Por el lado de los cereales, también los precios cotizaron en el contexto positivo. En el caso del trigo, la posición marzo subió USD 10,10 y la tonelada cotizó a USD 292,63, con un impacto del tiempo frío y seco en el Medio Oeste y las Planicies de los Estados Unidos que podrían transformarse en un limitante potencial de producción. A todo esto, las tensiones militares entre Ucrania y Rusia llevan a crecientes niveles de incertidumbre por un conflicto en ciernes en una importante zona productora y exportadora de trigo.
En el caso del maíz, registró su tercera ronda consecutiva con subas y alcanzando precios máximos en lo que va del año. La posición marzo subió USD 4,33 y cotizó a USD 240,35 la tonelada. Las tensiones militares en el mar Negro también afectan al grano amarillo. Un conflicto en alza podría limitar las exportaciones en los puertos ucranianos y rusos. Asimismo, la consultora Safras & Mercado volvió a recortar su previsión de cosecha de maíz en Brasil en 1,2 millones de toneladas, con una proyección que la estima ahora en 115,6 millones de toneladas.
La campaña de los cultivos de verano en la Argentina sigue pendiente de la cuestión climática y del impacto de las precipitaciones que se están registrando. Previo a la llegada de las lluvias, Coninagro realizó un relevamiento con datos del ministerio de Agricultura, donde son 23,8 millones de hectáreas las que se encuentran en algún grado de sequía a enero 2022. Ello equivale, aproximadamente, a 8 de cada 10 hectáreas afectadas. Sin embrago, la mayoría de la superficie por el momento está catalogada con impacto leve, lo que implica que hay mucho para evolucionar en materia de estimaciones de rindes.
A nivel regiones, hay una dispersión marcada, ya que en general la sequía es dispar y difícil de delimitar, pero se observa que las regiones del NEA y NOA ya se encuentran muy afectados, como así también el sudoeste del país y en especial la provincia de Entre Ríos, donde ya se está trabajando desde las oficinas públicas para declarar la emergencia agropecuaria, tal como lo realizó el Gobierno de Santa Fe en el día de ayer y de cara a la reunión de este viernes de los integrantes de la Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria.
Pedido
Mediante un comunicado Coninagro, una de las entidades de la Mesa de Enlace, reclamó la actualización y optimización de la Ley de Emergencia. “Pedimos celeridad en la actualización de la Ley y el fondo de Emergencia Agropecuaria”, reclamó Carlos Iannizzotto, presidente de la entidad, y recordó que desde que entró en vigencia en 2009 la ley cuenta con el mismo fondo como herramienta para gestionar la mitigación, gestión e impactos de las emergencias agropecuarias, “lo que brinda escaso margen de maniobra”. El fin de semana el ministro Julián Domínguez aseguró que el fondo llegaría a los 12.500 millones de pesos.
“La ley debe ser revisada íntegramente, no es solo una cuestión cuantitativa o de montos, sino de implicancias y de cómo se aplica. Es necesario que las Comisiones locales de emergencia que contempla la ley actual se activen y que se de celeridad a nivel municipios e intendencias, para garantizar transparencia”, agregó el dirigente.
Y recordó que desde la Mesa de Riesgo Agropecuario del Consejo Agroindustrial Argentino se presentó una propuesta con un proyecto de ley como instrumento legal de seguro agrario de amplia adopción, que contemple beneficios fiscales para atender las demandas frente al cambio climático.
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