“incertidumbre e imprevisibilidad”. Así definió la dirigencia de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) el momento del sector agropecuario en la previa de las elecciones legislativas del domingo 14 de noviembre, con muchos interrogantes sobre el futuro de la actividad. Mientras tanto, una encuesta de Amplificagro reflejó que los productores proyectan más inflación para el año próximo y un crecimiento de la presión impositiva hacia el sector.
Son muchos los problemas del campo que hasta el momento no se resolvieron: las restricciones a las exportaciones de carne vacuna que se extenderán hasta fin de año y con un panorama incierto sobre si habrá o no reapertura total de la comercialización de carne al mundo, la situación de los mercados granarios con restricciones indirectas, sobrevuela la posibilidad de aumento de los derechos de exportación, aumento de los costos de producción, faltante de insumos, entre otros.
Frente a este panorama, el Consejo Directivo de CARBAP expresó en un comunicado su preocupación por lo que puede llegar a suceder tras las elecciones, sea cual fuere el resultado, ya que consideran que la actividad productiva tanto en Buenos Aires como en La Pampa “está padeciendo las consecuencias de una macroeconomía nacional que no encuentra su rumbo ni estabilidad”. Es por eso que los dirigentes de la entidad que preside Horacio Salaverri reclamaron a las autoridades que brinden señales de previsibilidad y certidumbre al sector productivo, a partir de acciones concretas una vez que se defina el proceso eleccionario.
La encuesta realizada por Amplificagro mostró que los productores están proyectando luego de las elecciones legislativas más inflación y mayor presión impositiva hacia el sector, y además señalaron que la principal preocupación es la suba de precios, la marcha de la economía y el factor climático. El estudio, realizado entre el 22 y 30 del mes pasado, alcanzó a 493 responsables de decisiones en empresas y establecimientos agropecuarios pequeños, medianos y grandes (accionistas, gerentes y asesores) y oferentes de diferentes servicios al sector.
De cara a los comicios legislativos, el 43,7% de los encuestados señaló que se ampliará la diferencia entre el oficialismo y la oposición respecto a las primarias de septiembre pasado, un 35,4% aseguró que se mantendrá igual, un 16,6% que la diferencia se achicará, y solamente un 1,1% respondió que se revertirá el resultado. Ahora cuando se consultó sobre el impacto que dicho resultado tendrá en las políticas de la administración de Alberto Fernández, el 64,6% proyecta que habrá cambios negativos en la orientación del Gobierno y solo el 4,6% cree que habrá cambios positivos. A todo esto, el campo observa como una amenaza la presión impositiva que puede impactar en el campo, donde casi el 73% cree que la presión impositiva aumentará, un 24,9% se mantendrá en los niveles actuales, y un 0,9% que disminuirá.
Sobre las expectativas que tienen los representantes del sector agropecuario en relación al escenario luego de las elecciones, una gran mayoría de los consultados respondió que habrá una corrección brusca del tipo de cambio, mientras que casi el 23% cree que es poco o nada probable que se registre una fuerte corrección. Además, un alto porcentaje de los encuestados consideró que la inflación superará el 40% el año próximo: entre los que señalaron que la inflación rondará la franja del 50 al 60% se concentra la mayoría de los encuestados con el 40,3% de las respuestas, seguidos por quienes advirtieron que estará por encima del 60%, con un el 34,9 % de las menciones.
Preocupación
Otra de las preguntas de la encuesta de Amplificagro fue sobre la principal preocupación de los productores de acá a un año. En ese sentido, la palabra más mencionada fue Inflación con el 25% de las primeras menciones, seguidas por clima (y palabras referidas a problemas climáticos), seguridad, la marcha de la economía, insumos, política, precio, dólar, retenciones, y Gobierno.
En un contexto donde las restricciones en la importación de ciertos productos repercuten en la disponibilidad de insumos, se consultó también cuánto afecta al sector agropecuario dicha problemática: el 63,7% aseguró que se encuentra algo o muy afectado, mientras que un 34,8% expresó bajos niveles de afectación.
Por otro lado, el relevamioento estuvo dirigido a todo lo relacionado a la política agropecuaria, especialmente para analizar las primeras semanas de Julián Domínguez al frente del ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación. Al respecto, el 65,7% de los encuestados evaluó su desempeño como malo o muy malo, el 24,6 lo evaluó como Regular y solamente el 5,1% de los encuestados calificó el desempeño del funcionario como bueno o muy bueno.
Otra forma de evaluar las expectativas puestas sobre el flamante titular de la cartera agropecuaria, fue consultando qué margen consideran que tendrá Julián Domínguez para hacer lo que se propone al frente del ministerio. En ese sentido, un contundente 82% de los encuestados consideraron que podrá hacer poco o nada de lo que se proponga, y un escaso 8% señaló que podrá hacer todo o bastante de lo que se propone.
Por último, y en línea con lo anterior, se consultó a sobre la percepción que tiene el campo en relación al ámbito donde se define la política agropecuaria del país. Y entre las opciones propuestas, un 85,7% de los consultados cree que la instancia donde mayoritariamente se definen esas políticas es en la persona de la Vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, mientras que un 4,3% dijo en el ministerio de Economía, un 3,4% en la presidencia de la Nación, y solamente un 2,6% en el ministerio de Agricultura.
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