Los principales índices de Wall Street operaron con tendencia negativa en la última sesión bursátil de 2024, aunque redondearon una racha alcista para los valores bursátiles de más de dos años, alimentada por la resistencia económica tras la pandemia, el optimismo ante la reducción de los costos de los préstamos y el impulso de la revolución de la inteligencia artificial.
El promedio S&P 500 (-0,4%), el Dow Jones de Industriales (-0,1%) y el panel tecnológico Nasdaq (-0,7%) están cerca de máximos históricos. Este martes, los ADR y acciones argentinas que son operados en dólares en Wall Street ofrecieron tendencia bajista, en una rueda con horario acotado que cerró a las 17 horas de Buenos Aires. Del lado positivo destacaron Ternium (+1,3%), Banco Macro (+0,8%) e YPF (+0,6%, a USD 42,62).
Los mercados internacionales atravesaron un 2024 muy favorable. El Nasdaq anotó un alza de 31%, mientras que el Dow Jones acumuló un 12,8% anual. Las acciones argentinas fueron grandes ganadoras: los ADR bancarios saltaron hasta 270%, mientras que el S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires (sin operaciones este martes) anotó una ganancia extraordinaria del 123% en dólares.
Asimismo, los bonos Globales de Argentina -en dólares con ley extranjera- exhibieron un alza marginal de 0,1% en promedio, para redondear una suba de 4,8% a lo largo de diciembre. Estos títulos soberanos emitidos con la reestructuración de 2020 acumularon un alza promedio superior al 100 por ciento en el año, junto con un riesgo país que recortó unos 1.400 puntos básicos en 2024, a 635 unidades.
Los inversores renovaron sus apuestas bursátiles luego del recorte de casi 100 puntos básicos de las tasas de interés en 2024, efectuadas por la Reserva Federal de EEUU (Fed) y un repunte de los valores tecnológicos por el impulso de los desarrollos de Inteligencia Artificial (IA), las estrellas del mercado.
Las tecnológicas, los servicios de comunicaciones y los valores de consumo suntuario avanzaron más de un 30% este año en Wall Street
La escalada de más de un 170% de Nvidia no igualó el desempeño de 2023, pero empujó el valor bursátil de la firma insignia de la IA a los 3,3 billones de dólares, mientras que Tesla (+66%) recuperó el nivel del billón de dólares de valor de mercado.
Los analistas creen que los inversores están ahora tomando beneficios con motivo del fin de año y temen que el mercado pueda estar perdiendo impulso. Por otra parte, este lunes la bolsa de Wall Street anunció que no operará el próximo jueves 9 de enero por el luto nacional decretado por la muerte del expresidente Jimmy Carter. La última vez que el mercado bursátil cerró por la muerte de un ex presidente fue en diciembre de 2018, tras el fallecimiento de George Bush padre.
Un gran balance para 2024
No solo fue un año muy favorable para las acciones argentinas y las bolsas de Wall Street. Las principales bolsas europeas cerraron un 2024 alcista y marcado por el comienzo de los recortes de las tasas de interés de la Fed, la victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU, las tensiones geopolíticas y la inestabilidad política en Alemania y Francia.
El 2024, que vio máximos históricos de numerosos índices, del oro (USD 2.792,71 la onza) y del Bitcoin (por encima de USD 100.000), se opacó un poco en el tramo final del ejercicio anual, ante el repunte de la inflación norteamericana y tras la decisión de la Fed de desacelerar su estrategia de recorte de tasas.
El IBEX 35, el principal índice de la Bolsa de Madrid, subió un 14,8% en 2024, con lo que sumó dos años consecutivos en positivo, tras alcanzar el 5 de diciembre su máximo anual. El DAX de la Bolsa de Fráncfort ganó 18,7%; la Bolsa de Milán ganó un 12,6%; el FTSE de la Bolsa de Londres, un 5,7%, mientras que el CAC de París resignó un 2,2% anual. En Asia, el índice Nikkei de Tokio y el Hang Seng Hong Kong escalaron un 19%; la Bolsa de Shanghái ascendió 13%, y la Bolsa de Seúl retrocedió un 10,1% anual.
El analista de mercados Manuel Pinto dijo a EFE que este año será recordado por el inicio de los recortes de tasas, por el empuje de las grandes empresas tecnológicas, sobre todo de las vinculadas a la inteligencia artificial, por la vuelta al poder de Donald Trump y por la necesidad de China de poner en marcha planes de estímulo. “Sin duda ha sido un año positivo desde el lado de las bolsas”, resumió a su turno Nicolás López, director de Análisis de Renta Variable de Singular Bank en Madrid.
En su opinión, una de las claves de 2024 fue el comportamiento de la economía estadounidense, mejor de lo esperado. “Se esperaba un aterrizaje suave, que la economía fuese perdiendo fuerza a lo largo del año y eso permitiese a la Fed bajar los tipos de interés. La realidad es que la economía se ha mantenido fuerte durante todo el año”, explicó.
Al margen de acciones y bonos, fue el año del oro y del Bitcoin, que marcaron máximos históricos. El metal dorado, típico activo de refugio ante la inestabilidad geopolítica, completó su mejor año desde 2010 y ganó 27%, para terminar en torno a USD 2.600 la onza.
El Bitcoin, la criptomoneda más utilizada, se revalorizó 125% este año y marcó el 17 de diciembre un récord de 108.315 dólares. Según los analistas, el principal factor que impulsó su cotización fue la decisión de la SEC (organismo de control financiero en EEUU) de autorizar la comercialización de fondos cotizados (ETF) vinculados al precio al contado del la moneda virtual. Otro elemento favorable fue la victoria electoral de Trump, un gran defensor de los criptoactivos.
Por el contrario, los precios internacionales de las materias primas tuvieron un brusco descenso, como en el caso de la soja (-22%, a USD 366 la tonelada), un cultivo clave para la economía argentina. El petróleo Brent del Mar del Norte cayó 3% en 2024 a pesar de los recortes de producción pactados por el cartel de la OPEP+ (organización que agrupa a los miembros de la OPEP y otras potencias petroleras como Rusia) ante los síntomas de debilidad de la economía china. El barril de crudo ligero de Texas tuvo saldo neutro, a USD 71,88 el barril.