Un relevamiento entre más de 50 consultoras y bancos privados, locales e internacionales, arrojó que el proceso de fortalecimiento del peso sobre el dólar que inició el Gobierno de Javier Milei continuará en 2025 al tiempo que se profundizará la desaceleración de la inflación y habrá crecimiento de la actividad económica.
El consenso de los analistas que participaron del LatinFocus Consensus Forecast, plasmado en un informe, arrojó que el tipo de cambio oficial llegará a diciembre del año que viene entre $1.403 y $1.408, en línea con las expectativas oficiales de convergencia. La expectativa es que el dólar llegue a $1.770 para finales de 2026.
El trabajo destacó que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) mantiene el ritmo de crawling peg en 2% mensual sobre el precio oficial de la divisa norteamericana. El tipo de cambio del mercado paralelo cotizó a $1.120 en noviembre, por lo que se apreció 6,7% en el mes. Esa dinámica se mantuvo durante diciembre, con una suba del 8% en el dólar libre.
La dinámica de lo que suceda con el dólar y el cepo cambiario dependerá de la evolución de la inflación, según lo comentado por el Presidente y su equipo durante las últimas semanas.
Al respecto, Sergio Armella de Goldman Sachs comentó: “Milei afirmó que si la inflación se mantiene estable durante dos meses más, la depreciación del tipo de cambio se reducirá al 1% desde el 2% que se ha mantenido desde enero. En nuestra opinión, la reciente reducción de la tasa de interés al 32% por parte del Banco Central junto con una desaceleración de la depreciación sugiere que es probable que los controles de capital se mantengan por un tiempo más. En nuestra evaluación, la moneda ha avanzado hacia una sobrevaluación y se necesitará una política monetaria más estricta y un régimen de tipo de cambio más flexible en el futuro para anclar la economía”.
El consenso de los panelistas del LatinFocus es que el índice de precios minoristas del 2024 finalizará en 123,1% y acumularía 35,6% en 2025. “La depreciación controlada de la moneda, la restricción fiscal y una base de comparación más estricta han ayudado a controlar la inflación en los últimos meses, y estos mismos factores deberían seguir provocando una desaceleración de la inflación en el futuro”, consignó el informe.
En cuanto a la actividad económica, el consenso de LatinFocus arrojó que el PBI de 2024 finalizará con una caída del 3,4% y que en 2025 habrá un 4% de crecimiento, por debajo de las proyecciones que realizó el Gobierno (5%).
“La recuperación de los salarios reales, una mayor provisión de crédito y las recientes reformas liberalizadoras probablemente respaldaron la economía en el tercer trimestre, aunque la austeridad fiscal siguió siendo un peso. Nuestro consenso es que habrá un mayor crecimiento intertrimestral en el cuarto trimestre, aunque la economía seguirá siendo más pequeña que hace un año”, indicaron.
De todos modos, los panelistas destacaron que las señales disponibles son positivas: “En noviembre, la confianza de los consumidores subió a su nivel más alto en un año; en octubre, las exportaciones de bienes aumentaron un 30% y la inflación siguió disminuyendo, lo que es un buen augurio para el poder adquisitivo de los consumidores. En política, la reciente elección de Trump como presidente de Estados Unidos podría acelerar las conversaciones con el FMI sobre un nuevo paquete de rescate: Estados Unidos es el mayor accionista del organismo y Milei es un aliado de Trump”.