Villa Santa Rita es un barrio porteño que nació con destino de viviendas para obreros y está ubicado en la parte noroeste de la ciudad de Buenos Aires. Pertenece a la Comuna 11 –que también la integran Villa Devoto, Villa General Mitre y Villa del Parque– y es un trazado pequeño de 2,3 kilómetros cuadrados que se caracteriza por su diseño reticular, donde los pasajes empedrados con impronta europea destacan en el paisaje.
Hasta ahora era conocido como el único barrio de la capital sin plazas. Tras un reclamo vecinal de más de cuatro décadas, el Gobierno porteño comenzó la construcción de un espacio verde en un terreno baldío ubicado en la Avenida Álvarez Jonte 3222, cuya expropiación fue aprobada en 2023. El parque tendrá 1.725 metros cuadrados y estará listo para ser inaugurado en marzo de 2025.
La llegada de la plaza no solo representa un cambio urbanístico significativo, sino que también podría impactar en el mercado inmobiliario de Villa Santa Rita. Las propiedades en esta zona oscilan entre valores competitivos en comparación con otros sectores de la ciudad, aunque se espera que el nuevo espacio verde aporte mayor demanda y revalorización.
Actualmente, Villa Santa Rita presenta una oferta diversa de viviendas, que incluye casas bajas de estilo tradicional, PH y departamentos en edificios de baja altura.
Los edificios que, por el Código Urbanístico (hoy en revisión en la Legislatura porteña), no superan los 8 pisos con terraza. Sin embargo, en la intersección de las calles Cuenca y El Litoral, se encuentra una torre que de unas 20 plantas. Entre sus arterias principales se destacan las avenidas Nazca, Juan B. Justo —bajo la cual fluye el entubado Arroyo Maldonado—, Álvarez Jonte y Gaona. También son relevantes las calles Camarones, Luis Viale —ubicada entre las dos avenidas más importantes—, Terrada y Bufano.
Impacto inmobiliario
Román Andrés Paikin, de San Román Propiedades, destacó a Infobae que “la inauguración de la plaza en Villa Santa Rita podría incrementar notablemente el valor de las propiedades en la zona. Según su análisis, la mejora en la infraestructura urbana refuerza el atractivo del barrio para compradores y locatarios que buscan calidad de vida y áreas de recreación. Esta transformación posicionará a Santa Rita como una opción más competitiva dentro de la Comuna 11″.
Según los portales Zonaprop y Cabaprop, el valor promedio de las propiedades, tanto usadas como a estrenar, en Villa Santa Rita se ubica entre USD 1.800 y USD 2.100 por metro cuadrado
La llegada de un espacio verde en el barrio apunta a dinamizar la demanda inmobiliaria. Con esta incorporación, Villa Santa Rita podría atraer especialmente a familias jóvenes y a adultos mayores interesados en entornos tranquilos.
Paikin subrayó que los espacios verdes no solo mejoran la calidad de vida de los residentes actuales, “sino que también generan interés en quienes buscan barrios alejados del ritmo frenético del centro porteño”.
Comparaciones con otras zonas revalorizadas
El mercado inmobiliario de este trazado sigue una tendencia ya observada en barrios porteños como Saavedra o Villa Urquiza, que incorporaron plazas y parques en los últimos años.
Paikin mencionó que estas mejoras suelen traducirse en un aumento sostenido de los valores de las propiedades, además de generar un entorno urbano más equilibrado. En el caso de Santa Rita, las expectativas son similares, con un incremento en las inversiones y proyectos residenciales en los alrededores del nuevo parque.
Revalorización y transformación del barrio
El desarrollo de la plaza no solo traerá beneficios para los residentes, sino que también marcará un antes y un después en la percepción de Villa Santa Rita como barrio residencial.
Los departamentos de dos ambientes usados tienen precios que van desde USD 65.000 hasta USD 100.000, mientras que los de tres ambientes oscilan entre USD 85.000 y USD 160.000; por su parte, las casas de tres ambientes usadas se encuentran en un rango de USD 154.000 a 200.000 dólares.
En cuanto a alquileres, los monoambientes en Villa Santa Rita tienen un precio inicial de $300.000 mensuales, mientras que los departamentos de dos y tres ambientes parten desde $400.000 y $500.000 por mes, respectivamente.
Actualmente, predominan las viviendas en edificios de baja altura y PH en construcción. “Calles como Camarones, Emilio Lamarca, Cuenca o Avenida Nazca lideran con obras que estarán terminadas entre abril y 2026. Estas propiedades captan principalmente la demanda de jóvenes del barrio, que se independizan o pasan de alquilar a comprar en pozo para mudarse como usuarios finales”, señaló Mariana Lucángeli, arquitecta y especialista en Real Estate.
Se priorizan viviendas luminosas, adaptadas a las demandas surgidas tras la pandemia, con cocinas modernas que incluyen islas o penínsulas en departamentos de tres ambientes o más, amplios espacios de guardado y buena circulación en los de dos ambientes.
Lucángeli observó que “los PH también se construyen con cocheras, un bien escaso y muy valorado tanto por propietarios como por inquilinos”.
Actualmente, las viviendas en pozo se cotizan entre USD 1.900 y USD 2.000 por m2, aunque estos valores podrían aumentar. Los costos de construcción subieron 145% este año, lo que ya llevó a algunos desarrolladores a trasladar incrementos, con alzas superiores al 15% en lo que va del año.
Hito para los vecinos tras 40 años de reclamos
La creación de esta plaza marca un hito para los vecinos, quienes finalmente contarán con un lugar de recreación y encuentro. Además de mejorar la calidad de vida de sus habitantes, la obra puede influir en la dinámica inmobiliaria del barrio, consolidándolo como una opción atractiva para quienes buscan precios competitivos en un entorno tranquilo y con nuevos servicios.
Se trata de un avance histórico con desafíos pendientes. Vecinos y vecinas del colectivo Una Plaza para Villa Santa Rita consideran que la apertura de este espacio verde es un motivo de alegría tras más de 40 años de reclamos. “Esto representa un logro importante para el barrio, pero no podemos dejar de señalar que 1.700 metros cuadrados son insuficientes para las 40.000 personas que vivimos aquí. En términos prácticos, este espacio significa apenas una baldosa de 22 por 22 centímetros para cada habitante”, explicaron.
Desde la organización señalan que la plaza es solo el primer paso de un proyecto más ambicioso. “Nosotros planteamos desde el inicio la necesidad de al menos 5.000 m2 en distintos lotes del barrio, para acercar espacios verdes a todas las personas. Este nuevo parque está en un límite del barrio, lo que deja a gran parte de la comunidad sin un acceso cercano, incumpliendo incluso los estándares internacionales que recomiendan un espacio verde a 300 metros de cada hogar”.
Los vecinos suelen acudir a plazas de barrios cercanos para actividades físicas o de esparcimiento, como Monte Castro, La Paternal, Chacarita o Villa del Parque, pero consideran que Villa Santa Rita también merece contar con más espacios públicos propios.
El colectivo insiste en la importancia de proteger otros terrenos identificados como posibles plazas. “Tenemos cuatro lotes clave: el de Álvarez Jonte, que ya será parque, y otros en San Blas y Emilio Lamarca, Concordia y Toay, y Nazca 1500, todos ellos ociosos por años. Si no se destinan a espacios verdes, serán edificios, como ya sucede con uno que tiene cartel de venta. Por eso, pedimos decisiones políticas urgentes para asegurar un barrio más saludable y equitativo”.
Los vecinos adelantaron que continuarán con sus propuestas en la Legislatura. “Tenemos tres proyectos de ley en estado parlamentario. Sabemos que el año que viene deberán ser presentados nuevamente, pero contamos con el apoyo de legisladores de distintas fuerzas. Este avance es un hito, pero trabajaremos para que Villa Santa Rita y toda la ciudad sean realmente espacios verdes pensados para sus habitantes”, concluyeron.