Desde que desapareció el Toyota Etios, el mercado automotor argentino tuvo durante casi un año completo una falta total de ofertas de autos urbanos de menos de cuatro metros de largo, es decir, los más chicos de la industria a los que se los conoce como Citycar.
Si bien el Etios no era un auto del segmento A, había ocupado con fuerte protagonismo el lugar de ser el vehículo más compacto del mercado, lo que le permitió dejar la “vara muy alta”, incluso para su hermano mayor, el Yaris, que pasó a ser el auto de acceso de Toyota. Cuando se anunció que Brasil dejaría de fabricarlo, en agosto de 2023, el Etios ocupaba un puesto entre los cinco modelos más vendidos de Argentina, con un porcentaje de ventas que oscilaba entre el 5,3 y el 6,5% y subiendo y bajando del puesto 4 al 5 alternativamente.
La nueva política de apertura irrestricta para las importaciones abrió el juego para que entre el agosto y diciembre, dos marcas salieran a ocupar ese espacio dejado por el Etios en busca de ofrecer el auto más barato para los usuarios argentinos: Fiat y Renault.
El primero fue el de Stellantis, que trajo el Mobi Trekking, al comienzo sólo para comprar por plan de ahorro y un par de meses después para la venta tradicional. El Fiat Mobi se convirtió automáticamente en el auto más accesible, con un precio de $19.000.000, mientras que segundo auto más barato pasó a ser el Toyota Yaris que tenía un precio de $21.205.000 en la versión 5 puertas de entrada de gama.
Hace pocos días, Renault Argentina cumplió su promesa de traer nuevamente el Kwid, que ya había entrado con su versión E-Tech (100% eléctrica) en diciembre de 2023. Así, la semana pasada, ya en diciembre, lanzaron la versión única de este modelo de origen Dacia, con un precio que bajó respecto al Fiat Mobi, para ofrecerse en $17.900.000 en preventa de 1.000 unidades. Como forma de enfrentar a su nuevo competidor, aprovechando la eliminación futura del impuesto PAIS, Fiat bajó el precio del Mobi en diciembre y lo ofrece ahora en $18.768.000. La verdadera comparación será de todos modos en enero, cuando ya no exista el precio de preventa del Renault y ambos modelos compitan directamente por los clientes habituales.
Si es un auto urbano, lo primero que hay que saber es su tamaño, porque esa es la cualidad que lo va a diferenciar del resto de los autos compactos y hatchback del mercado. En este punto, el Kwid es más largo que el Mobi, ya que tiene 3,68 m contra 3,59 m de distancia total. En el ancho, en cambio, el Renault es mucho más angosto, ya que tienen 1,76 m contra 1,93 m incluyendo los espejos en ambos casos. La altura también es mejor para el Fiat con 1,55 m y 1,48 m del Renault. Pero la relación entre el largo y la comodidad interior se mide con la distancia entre ejes, donde el Kwid tiene 2,42 m contra 2,30 m del Mobi. Esto significa que los 9 cm más larga que es la carrocería del Renault se agrandan hasta 12 cm en el interior. Sin embargo, ese mayor confort para los pasajeros no afecta la capacidad del baúl, ya que el Renault tiene 290 litros y el Fiat únicamente 200 litros.
El otro pilar es el consumo, porque un auto, más allá del estilo de manejo de su conductor, siempre gasta más combustible en ciudad que en ruta o en tránsito suburbano, ya que la mayor parte del tiempo se circula en los tres cambios más bajos, por lo tanto en los que más RPM le piden al motor.
Ambos tienen la similitud de ser impulsores aspirados de 1.000 cm3 de cilindrada. Al no tener turbo, en ambos casos la potencia es baja, siendo el Fiat Mobi el más potente con su motor de 4 cilindros y dos 8 válvulas con 70 CV, mientras el Renault, con una arquitectura de 3 cilindros pero 12 válvulas, alcanza los 66 CV de potencia. En ambos casos el torque es similar, 52 Nm y 53 Nm respectivamente, y ambos también tienen la transmisión a través de una caja manual de 5 velocidades. Sin embargo, el consumo declarado por fábrica del Mobi es 15,1 km/l y el del Kwid de 15,4 km/l en tránsito mixto. En este aspecto, el peso del automóvil es clave, porque a más peso más consumo. Aquí nuevamente es mejor el Renault que pesa 801 kg mientras el Fiat llega hasta los 963 kg.
En cuanto al equipamiento de seguridad, ambos modelos tienen frenos a disco adelante y a tambor atrás, con neumáticos de 14 pulgadas. Ambos tienen sistema ABS de frenos, ESP de control de estabilidad, control de arranque en pendiente, soportes de silla infantil Isofix y cámara trasera.
Sin embargo, el Renault tiene 4 airbags, dos delanteros y dos laterales delanteros y el Fiat sólo tiene los dos frontales. También se diferencian por la asistencia a la dirección, ya que mientras el Mobi tiene dirección hidráulica, el Kwid cuenta con dirección eléctrica, y porque el Renault tiene cámara trasera.
Yendo al confort interior, el Fiat Mobi tiene tablero analógico con un pequeño display interior digital, mientras el Renault Kwid es completamente digital. La pantalla multimedia, por otro lado, es de 7 pulgadas en el Mobi y de 8 pulgadas en el Kwid, ambas con conexión para Apple CarPlay y Android Auto, aunque el Fiat es de manera inalámbrica.
Los números de ventas de ambos modelos son relativos. Fiat, si bien lleva sólo cuatro meses en el mercado, ya comercializó 1.585 unidades, lo que permitiría proyectar unas 4.800 unidades para todo un año. En Renault, que acaban de lanzarlo, no tienen cifras aún para mostrar, aunque la preventa se agotó en sólo 48 horas. Sin embargo, ya anunciaron que dispondrán de 5.000 unidades para 2025, con posibilidades de ampliarla si la demanda así lo requiere. Estarán parejos.