Los negocios en la Bolsa porteña estuvieron carentes de volumen, dado el comportamiento habitual en las ruedas en las que no se cuenta con la directriz de Wall Street. Este jueves se dio esa previsible escasa liquidez debido al feriado estadounidense del “Día de Acción de Gracias”.
Sin embargo, el insistente interés inversor en activos argentinos volvió a dar muestras de estar vigente, con un alza de 1,2% en el índice S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, en los 2.230.803 puntos, muy cerca del récord intradiario de 2.268.689 puntos del lunes 25. Lideró las ganancias Cresud, con un 4,2 por ciento.
El panel de acciones líderes de la Bolsa porteña conserva en 2024 una importante ganancia de 140% en pesos, y de 110,8% en dólares, según la paridad del “contado con liquidación” implícita en los ADR que se negocian en Wall Street.
El riesgo país de JP Morgan permaneció estabilizado sin movimiento de los papeles de renta fija en Nueva York, en los los 752 puntos básicos para Argentina. Los bonos soberanos promediaron en el MAE (Mercado Abierto Electrónico) una muy ligera mejora del 0,1% en pesos. Operadores dijeron a Reuters que el recorte de negocios fue abarcativo a todos los segmentos del mercado financiero.
“El país atraviesa el tercer ‘boom’ bursátil más grande de su historia. El índice S&P Merval lleva 50 meses de recorrido alcista, con una ganancia de 426% en dólares”, remarcó Agustín Turri, ejecutivo de Cuentas de Rava Bursátil. Señaló que “esta semana aumentó la rotación de sectores, desde el bancario al energético” entre las preferencias inversoras.
El dólar “blue” restó cinco pesos o 0,4% este jueves, a $1.120 para la venta, en su precio más bajo desde el 7 de noviembre. En lo que va del mes resta 70 pesos o un 5,9 por ciento. Con un dólar mayorista que avanzó 50 centavos, a 1.009 pesos, la brecha cambiaria quedó reducida a 11%, la más baja desde el 30 de septiembre de 2019 (10,1%).
“A principios de mes, la brecha su ubicaba en torno al 18% y hoy está por debajo del 10%”, remarcó el vocero presidencial Manuel Adorni. “La pulverización de la inflación y la baja del impuesto PAIS, entre otros factores, explican este buen dato, reflejo de la estabilidad económica”, enfatizó.
El monto operado en el mercado mayorista se redujo a la mitad respecto del miércoles, a USD 200,2 millones, en una rueda con negocios algo acotados por el feriado en los EEUU, debido a la celebración del Día de Acción de Gracias. El Banco Central se alzó con USD 11 millones por su intervención, apenas el 5,5% de la oferta privada, en un período con demanda creciente de importadores.
De esta forma, el Banco Central logra sumar en el transcurso de noviembre un saldo positivo de USD 1.608 millones por la intervención cambiaria.
Por otra parte, las reservas internacionales brutas crecieron USD 156 millones, a USD 31.636 millones, dado el impulso de las compras oficiales en el mercado, por USD 227 millones en la rueda previa. El stock de estos activos es el más elevado desde el 16 de junio de 2023 (USD 31.848 millones).
El Ministerio de Economía informó que colocó el miércoles bonos del Tesoro de corto plazo por un valor efectivo de 5,8 billones de pesos (unos USD 5.760 millones al tipo de cambio oficial) en una licitación de diferentes instrumentos en moneda local para refinanciar vencimientos. Esta operatoria se caracterizó por el regreso de las emisiones soberanas en pesos a tasa fija.
A nivel regional, las miradas se centraron en Brasil por la debilidad del real debido al escepticismo del mercado en torno a un recorte del gasto público. La moneda brasileña cayó 1%, a un récord de 6 reales por dólar. En tanto, el índice Bovespa de la Bolsa de Valores de San Pablo retrocedió un 2,3%, a 124.757 puntos, un nivel mínimo en cinco meses.
El salto cambiario y el descenso de las acciones en Brasil se dio después de que el ministro de Hacienda de Brasil, Fernando Haddad, confirmó anoche en un discurso nacional que el paquete de medidas de contención del gasto del gobierno de Luiz Inácio “Lula” da Silva generará un ahorro de 70.000 millones de reales (equivalentes a USD 11.800 millones) en los próximos dos años.
Juan Manuel Franco, economista Jefe del Grupo SBS, explicó que “el real brasileño mostró una tendencia devaluatoria durante todo el año, en un contexto fiscal desafiante para Brasil. Dado que es uno de los principales socios comerciales de Argentina, la devaluación del real presiona vía tipo de cambio real al peso argentino, dado que las exportaciones brasileñas se vuelven más competitivas”.
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