El presidente del Banco Central Santiago Bausili afirmó que al equipo económico no le preocupa la salida de divisas por el uso de tarjetas de crédito en el exterior, ratificó que su cotización será más baja con la extinción del impuesto PAIS y estimó que la mitad de esos consumos se realizan con dólares propios ahorrados por los turistas -comprados, por ejemplo, en el mercado MEP- mientras que la otra mitad tiene impacto en las reservas netas.
En una presentación el viernes ante la Bolsa de Comercio de Córdoba, que estuvo moderada por el ex banquero central Guido Sandleris, el actual mandatario de la autoridad monetaria dijo que tanto para la importación como para el consumo de dólares con tarjetas, “en ninguno de los dos casos está planeado compensar” la caída del impuesto PAIS porque se trata de un tributo “distorsivo”.
“El gasto de los argentino por turismo en el exterior es una variable que el Gobirno no controla, cada uno se va de viaje cuando quiere y gasta lo que puede. Eso quiere decir que el uso de reservas brutas -los dólares que los argentinos tienen en el banco- el Gobierno no puede controlar si los gastan”, dijo Bausili en Córdoba. “Lo que está en discusión es sobre el que no tiene dólares, que no son muchos porque la mayoría ahorra en dólares, va a comprarle dólares al BCRA. Entonces o consume reservas netas o se las compra al vecino y no consume reservas”, planteó.
En ese sentido, aseguró que según los datos que maneja el BCRA, “la mitad de los dólares que se consumen en el exterior son reservas netas y la mitad salen del mercado. ¿Por qué alguien pagaría 1.600 pesos por un dólar? Porque individualmente es poca plata”, y para explicarlo ejemplificó que un cliente de una plataforma de streaming que sale 9,99 dólares no realizaría todo el proceso de comprar dólar MEP y pagar su resumen de tarjeta por esa vía sino que acepta pagarlo con la cotización más cara de dólar tarjeta. “Cuando el gasto de tarjeta sube, todo el ‘marginal’ no va a $1.600, va al dólar paralelo. Con el dólar paralelo a $1.100 y el dólar a $1.600 o $1.300 (cuando se elimine el PAIS) creemos que el comportamiento va a ser el mismo”, explicó, por eso concluyó: ¿Por qué someter a la sociedad a un nuevo engorro si creemos que el comportamiento va a ser el mismo?”.
La Casa Rosada enfrentó la decisión de aumentar una carga impositiva para sostener el tipo de cambio para el turismo en el exterior y los consumos en dólares, como el pago de servicios de streaming y otros con tarjeta, o permitir que la eliminación del impuesto PAIS abaratara esos gastos, lo que haría menos costosos los viajes al exterior. Finalmente, se optó por la segunda alternativa, en un contexto de dólares financieros, como el MEP y el contado con liquidación. Según fuentes del mercado, esta caída eliminaba la necesidad de mantener una cotización superior a $1.600 en un contexto de menor presión cambiaria. De esta manera, el dólar tarjeta o turista se posicionaría alrededor de $1.300, solo con el 30% a cuenta del impuesto a las Ganancias.
“¿Por qué someter a la sociedad a un nuevo engorro si creemos que el comportamiento va a ser el mismo?”, preguntó Bausili sobre la decisión de no compensar la caída del impuesto PAIS para el dólar tarjeta
Un argumento a favor de no modificar impuestos es el que verbalizó Bausili: que una parte significativa de los gastos en el exterior se realiza con dólares propios, adquiridos en el mercado MEP, en lugar de utilizar tarjetas en pesos que implican acceso al MULC y afectan las reservas. Algunos analistas sostienen que el efecto de esta dinámica es indirecto: si aumenta la demanda de MEP para gastos en el exterior, la brecha cambiaria podría experimentar presiones, lo que obligaría a usar reservas para estabilizar las cotizaciones paralelas, con instrumentos como el dólar blend. Una incógnita a definir sería qué medidas tomará el Gobierno si el MEP y el CCL revierten su tendencia y vuelven a cotizar cerca de $1.300, situación en la que sería equivalente gastar directamente en pesos con tarjeta.
El saldo de la balanza turística es señalado como un factor crítico. Aunque parte del consumo en el exterior se realice con dólares ahorrados, el déficit turístico es elevado, con consumos récord de divisas mediante tarjetas. Según Analytica, el déficit de la cuenta cambiaria asociado a gastos de turismo fue de USD 593 millones en septiembre y de USD 3.939 millones acumulados en el año, por debajo del promedio histórico de USD 760 millones mensuales entre 2016 y 2023 (excluyendo los años de pandemia). Este diferencial, según el informe, se explica por los impuestos que gravan los gastos en dólares con tarjeta, incentivando el uso de dólares billete o MEP, además de la caída de ingresos registrada en la primera mitad del año.
El informe agrega que la eliminación del impuesto PAIS en la cotización del dólar tarjeta podría llevar al tipo de cambio turista a niveles inferiores a los de enero de 2017 y 2018, cuando el déficit por viajes en la cuenta cambiaria, ajustado a dólares de hoy, superó los USD 1.600 millones en ambos meses.
Por su parte, la consultora 1816 estimó que los consumos en dólares de argentinos en el exterior, tomando como referencia los saldos de préstamos por uso de tarjetas en moneda extranjera, alcanzaron nuevos máximos desde 2018, ubicándose a fines de octubre en torno a los USD 800 millones mensuales.