Las ventas de autos cero kilómetro de noviembre posiblemente no mantengan la progresión de los últimos tres meses, en los que, por primera vez en agosto y desde entonces hasta cerrar octubre, se pudieron superar los números de esos mismos meses de 2023. Las razones por las que esto puede suceder son múltiples, o en todo caso, de diverso tipo, ya que hay situaciones coyunturales por un lado y estacionales por otro, que confluyen en cierto pesimismo de los analistas de la industria automotriz.
Al día de ayer, con una semana para terminar el mes, se vislumbra un escenario a la baja cercana al 5% en relación a noviembre del año pasado. El contraste con los meses anteriores no será una noticia fácil de digerir, ya que después de un acercamiento en julio como primer mes de la segunda mitad del año para la que se prometía la reactivación, en agosto las ventas subieron un 5,2%, en septiembre se dispararon un 29,9% a causa del contraste de un mes de septiembre casi paralizado en 2023 por la falta de SIRA, y en octubre volvió a crecer un 5,2% otra vez.
“Vienen lentas las ventas. Creemos que hay varios factores, pero no están al ritmo que esperábamos para esta altura del mes”, confesaron desde una terminal automotriz.
En principio, los fabricantes lo adjudicaron a dos cuestiones administrativas externas como son la falta de chapas y documentación generada por el incumplimiento de Casa de la Moneda como ente que absorbía el total de la confección de esos elementos registrales, y que ocasionó la intervención del organismo, y por el paro que desde hace tres semanas se lleva a cabo en la Dirección Nacional de Registros de la Propiedad Automotor (Dnrpa), a causa del cual no se emitieron certificados de importación para automóviles de procedencia extranjera, con la consiguiente dilación en el trámite de alta y, por lo tanto, de registro en las ventas del mes.
La acumulación de más de 10.000 certificados generó una gran preocupación en el sector y en el gobierno, que actuó con determinación este miércoles para revertir la situación y poner al día los certificados que empezarán a llegar entre este viernes y el próximo lunes.
Sin embargo, hay otros motivos que están influyendo en una menor actividad en los concesionarios de todas las marcas, y que tiene que ver con un dólar paralelo quieto y a la baja, que este jueves pisó los $1.130 y que desalienta a los ahorristas que tienen que cambiar divisas para un cero kilómetro.
“Es cierto que el dólar está bajo hace más de un mes, pero hay una idea instalada en los argentinos, por la cual siempre piensan ‘ya va a subir, esperemos’. Es lógico, porque la historia así lo indica, y porque incluso los analistas económicos hablan de una futura convergencia de cotizaciones en torno a los $1.300, con lo cual, un auto que hoy cuesta USD 22.000 quizás en febrero o marzo requiera USD 19.000, con la ventaja de ser modelo 2025″, explicó un empresario del sector.
Esa es la cuarta variable, la del cambio de año, y en este caso es la que se considera una cuestión estacional, ya que históricamente noviembre es un mes en el que bajan las ventas en relación a octubre, y en diciembre eso se acentúa más todavía, porque las ventas están alrededor del 50% por debajo de noviembre.
Pero si algo faltaba para desalentar una compra de un cero kilómetro en noviembre y diciembre, eso es la eliminación total del Impuesto PAIS confirmada por el gobierno, que redujo esa percepción del 17,5% al 7,5% en septiembre y la dejará en cero a partir del primer día de enero de 2025. Si bien el impacto en precios no es significativo, indefectiblemente se verá reflejado porque los fabricantes están comprometidos con la política del gobierno y en función de eso, tendrán un gesto similar al de septiembre, cuando algunos bajaron entre un 3% y un 5% sus precios y otros no los aumentaron al ritmo de la micro devaluación de cada mes del 2% y de una inflación que en ese momento había sido del 4,2%, lo que hubiera justificado un aumento de precios.
“Los consumidores van a tener que estar atentos y nosotros también. A ver quién mueve precios, quién se anticipa, quién no. Muchos estamos planteando nuestras estrategias con esto y evaluando cuándo nos conviene mover precios. Quizás lo hacemos en enero, pero quizás lo hacemos en diciembre o antes”, le dijo Hernán Galdeano, presidente de Ford Argentina y Sudamérica a Infobae, cuando fue consultado por una eventual baja más pronunciada de lo habitual para diciembre.
Lo que deja como escenario un mes con hipotéticos 34.000 autos en noviembre en lugar de los esperados 36.000, está muy lejos de la proyección de la industria de apenas un mes atrás, cuando para llegar a 410.000 unidades en 2024 necesitaba despachar 40.000 vehículos en noviembre y 23.000 en diciembre en lugar de los habituales 17.000, y que ahora debería subir más aún, al menos hasta los 28.000 autos y vehículos comerciales livianos. Habrá que esperar a fin de mes y ver si hay una reacción de promociones y descuentos en diciembre.