El Ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, completó hoy la compra de USD 2.701 millones al Banco Central de la República Argentina (BCRA) con el fin de cubrir los pagos de capital e intereses de los bonos Globales y Bonares que vencen en enero de 2025. La operación anunciada ayer fue realizada con fondos del Tesoro en pesos depositados en el BCRA y reduce la base monetaria, en línea con los objetivos de control de emisión y reservas.
La transacción sigue el anuncio del secretario de Finanzas, Pablo Quirno, quien el martes adelantó que el Tesoro utilizaría parte de sus depósitos en pesos para adquirir dólares a fin de asegurar los pagos de enero. Quirno especificó que el monto, que al 27 de octubre era de $13,26 billones, permitirá retirar 2,67 billones de pesos del mercado, ajustando la base monetaria amplia, fijada en $47,5 billones desde abril de 2024.
Caputo confirmó hoy la finalización de la operación a través de redes sociales, destacando que “disminuye la cantidad de pesos en circulación por el monto equivalente a dicha compra” y que esta estrategia permite al BCRA mantener su margen de intervención en el mercado cambiario, sin violar el límite de base monetaria acordado.
Estrategia de acumulación de reservas
Además de asegurar el pago de los próximos compromisos de deuda, la operación de compra de dólares se inscribe en las estrategias del equipo económico para acumular reservas sin depender de una expansión monetaria adicional. En paralelo, el Ministerio de Economía mantiene negociaciones con bancos internacionales para obtener un préstamo “repo” que permitiría sumar dólares a las reservas del BCRA, un proceso que se ha facilitado por la reciente caída del riesgo país, ahora por debajo de los 900 puntos básicos.
El BCRA ha registrado un aumento de reservas en el último mes, con un saldo de intervención cambiaria que, hacia fines de octubre, se acercaba a los USD 1.500 millones. Esta acumulación implica una expansión de pesos en circulación, que se verá parcialmente contrarrestada con la reducción monetaria generada por la operación de hoy.
Antecedentes de la operación
La compra efectuada responde a la planificación del Gobierno para cubrir sus compromisos en moneda extranjera en 2025 sin modificar su política de emisión. Antes de esta transacción, el Ministerio ya había asegurado los fondos necesarios para cubrir los intereses de los bonos de enero, en una operación destinada a garantizar la disponibilidad de divisas para los pagos del próximo año.
La operación también se alinea con otros esfuerzos del equipo económico para ampliar el financiamiento. La semana pasada, el Ministerio de Economía mantuvo reuniones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, donde abordó la posibilidad de reemplazar el programa vigente con un nuevo esquema de asistencia. Esta negociación contribuiría a fortalecer la posición del BCRA en dólares y permitiría al Gobierno sostener sus compromisos de deuda sin recurrir a un aumento de la emisión de pesos.
Impacto en la base monetaria
La reducción de pesos resultante de la compra, por un total de 2,67 billones, ayuda a ajustar la base monetaria amplia. Federico Furiase, director del BCRA, precisó que esta operación se suma a las intervenciones del Banco Central en el mercado cambiario de octubre, que generaron una expansión de la base monetaria. Con esta transacción, el BCRA podrá continuar con su política de acumulación de reservas sin comprometer el límite fijado de $47,5 billones, en una estrategia orientada a cumplir las metas monetarias y a mantener la estabilidad cambiaria en los meses previos a los vencimientos de deuda.
Opciones para los compromisos de deuda de 2025
Además de las negociaciones del préstamo “repo” y de un potencial nuevo acuerdo con el FMI, el Gobierno explora otras vías para reforzar su posición en dólares. Entre estas fuentes, se encuentran los dólares provenientes de la regularización de fondos, cuyo primer tramo para declarar efectivo no registrado vence este 31 de octubre. Según fuentes del sector, una parte de estos depósitos ya comenzó a integrarse a las reservas del BCRA, alcanzando un monto en torno a los USD 32.000 millones.
Otra herramienta que el Gobierno evalúa para los compromisos en moneda extranjera es la posibilidad de un canje de títulos. En septiembre, un decreto permitió flexibilizar las condiciones del canje al eliminar la regla de la Ley de Administración Financiera, que exigía mejoras en los términos para autorizar un cambio en la deuda. Los bonos en poder de organismos públicos, como el BCRA y la ANSES, podrían facilitar este canje, mientras que para bonistas privados la alternativa de extender los plazos con un rendimiento más alto podría resultar atractiva, especialmente en un contexto de alza en el valor de los bonos surgidos de la reestructuración de 2020.