Las marcas de indumentaria Vitamina y Uma emitieron un comunicado confirmando que ambas empresas están a la venta, tal como había adelantado Infobae. No obstante, negaron que esté previsto el cierre a fin de año y aseguraron que la decisión de venta se debe a una decisión empresarial, que escapa a la coyuntura económica actual.
“Si bien durante el 2023 se tomó la decisión de poner ambas empresas a la venta, no está previsto su cierre a fin de año. Por una decisión empresarial, las marcas se encuentran a la venta o en un proceso de cambio de modelo de negocio a partir de un esquema de licencias por categorías, como pueden ser los jeans y los perfumes”, explicaron.
Además, indicaron que, “más allá de que las empresas son de uno de los accionistas de Molino Cañuelas, las marcas no pertenecen al grupo empresarial”.
“Es importante destacar que este cambio de modelo no se debe a la coyuntura actual, sino a una decisión empresarial. Más aún, somos optimistas con las políticas económicas actuales de cara al futuro”, agregaron desde Vitamina y Uma.
“Las marcas no cierran a fin de año. Sí está la empresa en venta por una decisión empresarial, pero hasta el momento no se ha concretado nada”, habían respondido oportunamente desde la compañía ante la consulta de Infobae. Pero otras fuentes admitieron que si no aparece un comprador en lo que resta del año, la firma deberá cerrar todos los locales o quedarse exclusivamente con los que son outlet, con el propósito de vender todos los remanentes. Lo que sí es un hecho concreto es que ninguna de las dos marcas está produciendo nuevas prendas para la temporada otoño-invierno 2025.
Hoy la empresa tiene un total de 12 locales y cerró tres durante los últimos meses. El último fue el de Unicenter el 31 de agosto, pero previamente había bajado las persianas en Palmas del Pilar y, antes, en el Distrito Arcos.
Las fuentes consultadas explicaron que la decisión estratégica de vender Vitamina y UMA tiene que ver con el análisis de mediano plazo acerca de las posibilidades del sector, además de que los dueños están enfocados en otros negocios. “No tienen ganas de meterle energía a este rubro cuando saben que la curva de crecimiento no será una V. Hicieron un estudio de mercado y sumado a la situación personal, decidieron avanzar con la venta”, explicó la fuente cercana a la firma.
La historia de las empresas
Vitamina fue una marca muy reconocida durante los años ´90, destinada a un público de consumidoras del rubro ABC1. Cerró en junio de 2000, cuando entró en convocatoria. Estaba en manos del fondo de inversión Compañía de Indumentaria (CISA) y, agobiada por un concurso y pasivos por más de USD 40 millones, fue cerrando locales y terminó en la quiebra. Así fue como apareció Navilli, que compró la firma en remate en julio de 2003. Pagó, en ese momento, $700.000. La marca reabrió sus puertas a en abril del año siguiente, por lo que cumplió 10 años en manos del actual grupo empresario.
Por su parte, UMA entró en escena en el 2000, de la mano de Marcelo Goldberg, justamente quien en 1986 había creado Vitamina en sociedad con Claudio Drescher, actual presidente de la Cámara de Indumentaria y dueño de Jazmin Chebar. En su función de CEO, y con la ayuda de su socia Carolina Ainstein, Goldberg consolidó la marca hasta llegar a tener 12 locales distribuidos en la Ciudad de Buenos Aires, interior del país y el exterior. Pero en 2009 se la vendió a Vitamina Group, del grupo Navilli.