La rueda de ayer repitió la historia de la semana pasada. Persisten las mismas dudas, pero agravadas. La tasa de los bonos del Tesoro de Estados Unidos subieron a casi 4,30%, el nivel más alto en tres meses, y el dólar aumentó 0,47% frente a las seis principales monedas del mundo. Desde marzo el DXY, el índice que marca la fortaleza de la divisa, no llegaba a este nivel.
El escenario exterior golpeó a todos los bonos de la deuda de la región y alcanzó a los títulos soberanos argentinos que, hasta hace 15 días ignoraban todas estas señales porque los inversores estaban ensimismados en hacer carry trade (apostar a inversiones en pesos en base a la presunción de que el dólar quedará atrasado para después tomar ganancias y volver a la divisa). Fue así como los bonos soberanos llegaron a un nivel récord desde la salida del default en agosto de 2020 y subieron hasta 20% en dólares en dos meses.
Desde esas alturas los inversores tomaron conciencia de que el mundo no jugaba a favor y la euforia se transformó en dudas. Así fue como comenzó una ordenada toma de ganancias.
Ayer los bonos soberanos cayeron hasta 1,4% como fue el caso del Global 2035 que, hasta hace 10 días, era la estrella del menú. Ahora, cuanto más largo el plazo del vencimiento, más vulnerables se los ve. Por eso el Global 2030, que es el de menos riesgo por la cercanía del vencimiento, cedió apenas 0,38%.
El riesgo país tradujo esta situación con una suba de 2,5% y un retorno a los 1.100 puntos básicos que quebraron la ilusión no tan lejana de perforar el piso psicológico de los 1.000 puntos.
Para la consultora F2 de Andrés Reschini “el mercado sigue viendo fortaleza en la economía estadounidense y asigna mayores chances a un ritmo más suave en los recortes de tasas de la Reserva Federal. La consecuencia es un dólar más fortalecido y más golpes para los bonos emergentes. Teniendo en cuenta este contexto, el hecho de que el riesgo país local suba a 1.100 puntos, no luce tan mal”.
Los dólares financieros sobre el final alejaron las preocupaciones y siguieron apenas por debajo de los $1.200. El 10 de octubre estaban más cercanos a $1.100. Los dólares abrieron compradores, pero después de la mitad de la rueda aparecieron los exportadores, que liquidan 20% de sus operaciones en el mercado de contado con liquidación (CCL). El MEP subió $ a $.1168; tras las órdenes de venta bajó $8,02 (-0,4%) a $1.67,91. El CCL, que acarició los $1.200, terminó la rueda con un aumento de $4,79 (+0,4%) a $1.195,10. El “blue” también dio señales de estar más pedido y tuvo un alza de $15 a $1.240. La brecha con el MEP, ofrece una oportunidad de hacer “puré”, comprar en el MEP y vender en el libre.
En el Mercado Libre de Cambios (MLC) se operaron USD 474 millones de los que el Banco Central se llevó USD 23 millones. Las compras del mes suman USD 784 millones.
El dato positivo fue que el mercado cree que la inflación va a seguir bajando.
Nicolás Cappella, trader del Grupo IEB señaló que “salieron nuevas mediciones de inflación de alta frecuencia para octubre con consultoras que comienzan a medir inflación corriendo por debajo del 3% mensual. Esto hizo ralliar a los títulos con tasa fija siendo los del tramo largo los más demandados. Estas alzas llevan a los inversores a preguntarse si no es momento de los CER, que rinden tasas reales del 12% que son muy atractivas”.
La percepción de la baja de la inflación hizo subir las LECAP y BONCAP, títulos que marcan la tasa de referencia del mercado. Las alzas fueron de hasta 0,7% y, por lo tanto, el rendimiento de estos títulos bajó a niveles de 3,5% mensual entre febrero y julio próximos. Según el trader Adrián Wibly “la curva quedó algo desprolija con tasas forward sin demasiado sentido en algunos tramos”. Cabe aclarar que el rendimiento de las letras más largas es de 3,3% efectivo mensual.
Los bonos que ajustan por CER, tuvieron subas selectivas que no superaron 0,4%.
Las empresas siguen favorecidas por la oferta de dólares del blanqueo. Por caso, Telecom anunció que reabrirá una se sus Obligaciones Negociables en el mercado internacional, porque las tasas que obtiene se equiparan a un riesgo país de 200 puntos básicos.
La Bolsa tuvo una rueda con compradores selectivos. El S&P Merval de las líderes subió 0,35%. Las alzas fueron escasas y leves. Se destacaron Metrogas con 2,56% y Central Puerto con 1,92%.
Un movimiento similar se vio en los ADR- certificados de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- donde predominaron las subas que fueron de baja intensidad. Los certificados que bajaron fueron minoría, pero sus porcentajes de caída fueron más importantes que los que subieron. Por ejemplo, Banco Supervielle subió 1,8% y Corporación América perdió 2,4%.
Para hoy se espera una mayor demanda de bonos que ajustan por CER que rinden 12 puntos anuales por encima de la inflación. También hay esperanzas de que resuciten los bonos soberanos. La esperanza se abrió porque no cerraron en el nivel más bajo del día favorecidos por el ingreso de compradores de oportunidad.