El acuerdo entre Mauricio Macri y Javier Milei para darle una mayor injerencia del expresidente en la política energética del Gobierno, que comenzó con la designación de María Tettamanti como secretaria del área, tendrá nuevos capítulos en las próximas semanas. En las últimas horas avanza con fuerza la posibilidad de la incorporación de un hombre del PRO en el Directorio de YPF: se trata del diputado por La Pampa, Martín Maquieyra, quien además es vicepresidente primero de la comisión de Energía y Combustibles de la Cámara baja.
No está definido si ingresaría a la petrolera estatal en reemplazo de Carlos Bastos, asesor del ahora ex secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, eyectado de su cargo la semana pasada, o si ocuparía el lugar del empresario Mario Vázquez, quien falleció en agosto. De todos modos, según supo Infobae, el arribo se formalizaría en las próximas semanas, o a más tardar a principios de 2025.
Según contaron a este medio fuentes con conocimiento de los detalles, el diputado subió en la consideración del Gobierno luego de su apoyo al veto de la Ley de Financiamiento Universitario. Esa medida fue parte del acuerdo que sellaron Macri y Milei, al cual después terminó de darle forma el asesor Santiago Caputo. La banca que quedará vacante en Diputados sería ocupada por el legislador desarrollista, Matías Traba, que de todos modos respondería a la estructura del expresidente.
Maquieyra es politólogo y desde 2016 ocupa la banca de diputados por la provincia de La Pampa. Si bien asumió en reemplazo de Carlos Mac Allister, pudo renovar su puesto legislativo en las elecciones de 2017 y 2021.
Su llegada al Directorio de YPF formaría parte de un acuerdo más amplio entre la cúpula del PRO y de La Libertad Avanza que comenzó con el apoyo a los vetos del oficialismo tanto a la reforma previsional como a la aumento en el presupuesto universitario que habían sido sancionados en el Congreso. El primer paso fue la designación de Tettamanti como nueva secretaria de Energía y continuará con la llegada de Eduardo Hollidge como gerente general de Cammesa, en reemplazo de Jorge Garavaglia, quien había llegado con la bendición de Chirillo.
La mayor injerencia de Macri en el área energética forma parte de un “acuerdo programático” dividido en dos partes: el saneamiento de las cuentas del sector para alcanzar el equilibrio financiero del sistema en el plazo de un año –es decir que los usuarios paguen el costo pleno de la energía sus facturas– y, en una segunda etapa, cambios en las estructuras del área con el fin de hacer “más ágil” la gestión.
El PRO también acercó una hoja de ruta que contempla los aumentos de electricidad y gas natural que se aplicarán durante el próximo año, con un nuevo esquema de subsidios que ayudaría a acelerar el ajuste fiscal. El ritmo de ese sendero de incrementos dependerá de que no ponga en riesgo el principal objetivo del Gobierno: la desaceleración de la inflación.
De todos modos, en el corto plazo el trabajo estará puesto en el plan para mitigar los riesgos de cortes de luz durante el próximo verano, algo que preocupa mucho en los despachos oficiales por el eventual impacto político de una crisis de suministro tras el fuerte incremento en los servicios públicos que hubo este año.
Públicamente en el Gobierno sostienen que podrán pasar el verano sin crisis, pero en off the record se muestran preocupados y apuntan por cierta imprevisión del ahora ex secretario de Energía que se sumó a los episodios que hubo con el gas durante el invierno. Temen el impacto social de un evento de ese tipo luego de los fuertes aumentos de tarifas que hubo a lo largo del año.