A tres meses del vencimiento del Impuesto PAIS, aún quedan varios tributos y tasas que perjudican a las empresas y que tienen un impacto directo en precios, en un contexto en que la presión fiscal alcanza el 29,4% del PBI. La necesidad de una reforma integral del sistema tributario toma cada vez más fuerza entre los distintos sectores.
La Unión Industrial Argentina (UIA), en un estudio comparativo de 30 países que representan el 86% del PBI mundial, registró que Argentina se ubica en el puesto 10 entre los países con mayor presión fiscal. Si solo se tiene en consideración el sector formal, el país encabeza el ranking con casi 51 por ciento.
A su vez, desde la entidad precisaron cuáles son los impuestos que más recaudan en cada nivel de gobierno. El 90% de los recursos nacionales provienen de Ganancias de sociedades, IVA, Débitos y Créditos y Bienes Personales. En las provincias Ingresos Brutos y Sellos representan el 84% de la recaudación. Las tasas de Seguridad e Higiene en los municipios tienen un peso del 34 por ciento.
Sobre esto último, Sebastián Domínguez, director de SDC Asesores Tributarios, dijo a Infobae: “En muchas ocasiones se cobran tasas, como las viales, y no se da una contraprestación. Además, en la práctica, varias terminan siendo inconstitucionales porque se transforman en impuestos análogos, en general, al IVA, que es un impuesto nacional coparticipable y por ley, no pueden hacerlo. Con los aumentos que hubo en el último tiempo, es un coste relevante para las empresas”.
“A nivel provincial, el impuesto que más afecta a las compañías es Ingresos Brutos, que tiene un efecto ‘cascada’ al no permitir computar lo que se pagó como crédito en la etapa anterior, entonces se va acumulando. E incluso la peor situación es cuando los precios suben más por la aplicación del impuesto que lo que se recauda por él. Perjudica principalmente a las pymes”, destacó Domínguez.
La peor situación es cuando los precios suben más por la aplicación del impuesto que lo que se recauda por él. Perjudica principalmente a las pymes (Domínguez)
Fernando Quiroga Lafargue, socio de Impuestos en KPMG Argentina y líder de Tax Financial Services en Latinoamérica, también identificó a Ingresos Brutos como el más nocivo y uno de los que mayor impacto tiene en precios. “Hay un 20% de compañías que nos dicen que prefieren, en determinadas provincias, no vender, evitando pasar por su incidencia impositiva. Las que más mencionan son Tucumán y Misiones. Al estar en desarrollo, se esperaría en esos casos que haya una búsqueda de un sistema impositivo menos agresivo”, dijo el especialista.
En este marco, el economista y director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), Nadin Argañaraz, explicó que “si el Gobierno nacional quiere avanzar en una baja de impuestos provinciales o tasas municipales, necesita un acuerdo fiscal. Cabe recordar que el Pacto de Mayo firmado por 18 gobernadores llamaba a una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio”.
Sin embargo, el Consejo que se pretendía conformar para debatir esta y otras cuestiones todavía no se ha definido.
En tanto, un impuesto nacional que, según Domínguez, resulta distorsivo es el que grava los débitos y créditos bancarios. “Este incide en las decisiones de las personas a la hora de trabajar, invertir y producir debido a que se aplica sobre todas las transacciones y aun cuando se pueda tomar hasta íntegramente como pago a cuenta es considerado un costo financiero”, contó el tributarista.
Por su parte, Argañaraz sostuvo que este tributo sería uno de los cuales el Ejecutivo podría avanzar en reducir entre 2025 y 2026, en la medida en que el crecimiento económico genere una recaudación extra.
Hay un 20% de compañías que nos dicen que prefieren, en determinadas provincias, no vender, evitando pasar por su incidencia impositiva (Quiroga Lafargue)
Asimismo, se encuentran los Impuestos Internos, como los que se aplican al tabaco, bebidas alcohólicas, vehículos, seguros, entre otros; y los derechos de exportación, más conocidos como retenciones.
Mientras tanto, el ministro de Desregulación y Transformacion del Estado, Federico Sturzenegger, dijo en la última jornada del 60 Coloquio de IDEA ante el empresariado: “No nos pidan más bajar impuestos, porque si nos piden y el gasto se mantiene igual, a alguien se lo tienen que cobrar. Pídannos que bajemos el gasto. Por favor destierren y táchenlo, apóyennos en ese ejercicio de baja de gasto”.
Además de afectar a los consumidores por el traslado a precios, ciertos impuestos reducen la competitividad. En este sentido, de acuerdo al ranking del International Institute for Management Development (IMD), Argentina ocupa el puesto 66 de 67 países, y su posición se deterioró recientemente. “Esta situación contrasta con uno de los objetivos estratégicos para recuperar la dinámica del crecimiento: la inserción exportadora”, aseguran desde la UIA.
A su vez, algunos sectores, como el textil, critican la apertura comercial, vía reducción de aranceles y quita de trabas a las importaciones, sin previamente reducir impuestos para poder competir con los productos que ingresan al país.