El Gobierno implementó una nueva medida que impactará en el sector inmobiliario. A partir del 29 de octubre, entrará en vigor el Decreto 902/2024, que reduce la tasa que cobra el Registro de la Propiedad Inmueble (RPI).
Actualmente, la tasa es del dos por mil (2‰) del valor de la operación, pero se reducirá a la mitad: uno por mil (1‰) y, en ciertos casos, al 0,5 por mil. Busca aliviar así los costos de quienes compran e inscriben propiedades, en un mercado donde cada peso cuenta al momento de realizar transacciones.
Esta disposición es exclusiva para la ciudad de Buenos Aires, ya que los registros en otras provincias son gestionados por sus respectivos gobiernos.
Actualmente, la tasa del RPI es del dos por mil (2‰) sobre el monto total de la operación. Así, por caso, en una transacción de USD 100.000, el pago sería de USD 200, costo que con el cambio se reduciría a 100 o 50 dólares.
Desde el sector inmobiliario se reconoce que, aunque esta rebaja no generará un auge en las ventas, sí es vista como un gesto para reducir la presión impositiva sobre compradores y vendedores.
Román Paikin, contador público y de San Román Propiedades, explicó a Infobae que el impacto de la medida es más bien simbólico, pero necesario: “Es un gesto alineado con la tendencia a bajar impuestos y costos asociados a las operaciones inmobiliarias, algo siempre bien recibido en un país con alta carga impositiva. No definirá una operación por sí sola, pero representa un alivio, en especial en inmuebles de mayor valor”, detalló.
El decreto también establece que la reducción de la tasa al 0,5‰ será para las adquisiciones de inmuebles destinados a la vivienda propia mediante planes oficiales de construcción, lo que marca una apuesta por el acceso al primer hogar o vivienda social, un sector históricamente desatendido.
Para los compradores de inmuebles de menor valor, donde los gastos suelen estar más ajustados, cualquier disminución en los costos asociados es bienvenida, aunque no sea determinante
Paikin destacó que esta medida, junto con la eliminación del Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI), que aplicaba un gravamen del 1,5% sobre el valor de la escritura, beneficia a quienes buscan vender o comprar propiedades en un contexto de menor carga tributaria.
“La derogación del ITI, sumada a la reducción de la tasa de inscripción, ayuda a dinamizar el mercado, reduce los costos y crea un ambiente más atractivo para la inversión inmobiliaria”, agregó.
Opiniones a favor
El impacto de la flamante medida y la previa eliminación del ITI en las operaciones inmobiliarias son puntos a favor del sector.
Iván Ginevra, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, explicó que aunque las reducciones no transformarán radicalmente el mercado, envían un mensaje positivo a los inversores: “El sector percibe estos cambios como un avance, pero lo ideal sería eliminar por completo este tipo de impuestos, para simplificar las operaciones y reducir la burocracia. La eliminación del ITI es un alivio tangible para los que desean vender propiedades de alto valor, porque representa un ahorro considerable”.
Ginevra también subrayó que la eliminación del ITI no solo reduce el costo económico; también simplifica el proceso de venta. En el pasado, los vendedores debían realizar una consulta obligatoria ante la AFIP, lo que muchas veces demoraba las operaciones e incluso hacía que algunas caigan.
Con la eliminación del trámite, las transacciones pueden ser mucho más fluidas. “Estas medidas conjuntas no solo facilitan la compra y venta de propiedades, sino que también envían un mensaje de confianza, permitiendo a los compradores tomar decisiones más ágiles”, añadió Ginevra.
La medida fue bien recibida por el sector, y la ven como parte de un paquete más amplio de reformas que podrían generar efectos a mediano y largo plazo.
Al reducir los costos y simplificar las gestiones, estas acciones pueden atraer más inversores, lo que a su vez podría dinamizar aún más el mercado inmobiliario en los próximos meses, justo en una época en la que, por cuestiones estacionales, las operaciones de compra venta suelen aumentar hasta un 20% en comparación con otros trimestres, especialmente hacia fin de año.