Por qué uno de los barrios más cool de Argentina está en camino a convertirse en un boom inmobiliario

La Chacarita volvió a ser destacado por la revista Time Out como uno de los barrios 40 más “cool” del mundo, liderando entre los tres principales de América Latina. Este reconocimiento se debe a su vibrante mezcla de tradición y modernidad, donde conviven calles con arte urbano, cafés innovadores y proyectos que reflejan la creatividad y singularidad del lugar. El barrio porteño, conocido también por su famoso cementerio donde descansan figuras célebres, como los músicos Carlos Gardel, Gustavo Cerati y Gilda, el boxeador Oscar Ringo Bonavena, y el prestigioso pintor Benito Quinquela Martín, entre otros, se convirtió en un epicentro cultural que atrae tanto a turistas como a residentes en busca de una experiencia auténtica.

El creciente interés por Chacarita no solo radica en su oferta multifacética, sino también en su atractivo para los inversores. La demanda de propiedades, tanto para la compra como para el alquiler, aumentó significativamente, en parte por los nuevos desarrollos que están transformando zonas del barrio.

Con precios que aún resultan competitivos frente a otros barrios porteños, Chacarita ofrece una oportunidad para quienes buscan capitalizar su auge y la expectativa de revalorización. Más de 35 proyectos modernos (entre los que dan sus primeros pasos y están por concluirse) conviven con la arquitectura histórica, renovando áreas claves y consolidando al barrio como un futuro boom inmobiliario en la ciudad de Buenos Aires.

Chacarita está delimitado por la Avenida Elcano, las vías del ferrocarril General Urquiza, las avenidas Del Campo, Garmendia, Warnes, Dorrego, las vías del ferrocarril San Martín, y las avenidas Córdoba y Álvarez Thomas.

En los últimos años, experimentó una transformación significativa, especialmente con la creación del Distrito Audiovisual, impulsado por el Gobierno porteño.

Este distrito abarca áreas de La Paternal, partes de Palermo, Colegiales, Chacarita y Villa Ortúzar. La iniciativa atrajo empresas de la industria audiovisual, generando un efecto dominó con la llegada de nuevos comercios y proyectos residenciales.

Fernando Lorenzi, arquitecto del estudio INFILL, destacó a Infobae que se trata de un barrio “con identidad”, definido por su límite claro y una esencia que se siente al recorrerlo.

“Debe resaltarse la accesibilidad y el verde del barrio, además de su urbanismo único, con una mezcla de alturas entre avenidas y calles residenciales”, aseguró.

Según Lorenzi, la trama urbana se destaca por hitos como el Barrio Parque Los Andes, la Algodonera (edificio industrial que se recuperó y hoy alberga un centro comercial y viviendas en la esquina de Santos Dumont y Avenida Córdoba), el cementerio y el Mirador Comastri (edificio construido en 1875 y declarado Sitio de Interés Cultural, es un símbolo arquitectónico de la zona, destacando por su icónico mirador. Actualmente, alberga la Escuela Técnica N° 34).

“Esta combinación, junto con una creciente oferta gastronómica y la baja densidad urbana, es lo que lo hace un barrio cool”, afirmó.

Lorenzi sugierió que avenidas como Warnes y Dorrego tienen potencial para crecer en altura. Para consolidar el barrio, sería clave recuperar áreas urbanas cercanas a los cementerios y proteger su arquitectura funeraria con un programa patrimonial serio.

Más allá de su fama de barrio cool, Chaca (como también se conoce al club Chacarita Juniors, otro símbolo barrial que tiene su sede en la zona y su estadio en el partido de San Martín) siempre tuvo su encanto. “Destaco la movida gastronómica post-pandemia, con restaurantes y bares de autor que ubicaron al barrio en el podio de la oferta porteña. Su arquitectura ecléctica, que incluye antiguas fábricas y casas chorizo, contrasta con edificios modernos”, amplió Castro.

El barrio de Chacarita, hogar de figuras emblemáticas como Carlos Balá, sigue siendo un epicentro en crecimiento, especialmente en torno a las avenidas Álvarez Thomas y Federico Lacroze. Esta zona, donde vivió el querido actor que falleció en 2022, está emergiendo como un foco clave de desarrollo inmobiliario, atrayendo a nuevos inversores y residentes.

El arquitecto Guy Kandel es parte de esta transformación, culminando la entrega de las últimas unidades del edificio en Álvarez Thomas al 900, con 54 viviendas en total. “Este proyecto está orientado principalmente a un público de clase media/media alta, con opciones que van desde monoambientes de 30 metros cuadrados hasta departamentos de dos ambientes de 58 m2″.

Desde el inicio de la obra hace tres años, los precios en pozo se incrementaron, pasando de USD 1.650 a USD 2.200 por m2. Las viviendas, con diseño moderno y materiales de calidad, incluyen monoambientes accesibles por USD 60.000 y departamentos de dos ambientes por 125.000 dólares.

“Las unidades cuentan con balcones, calefacción por radiadores, y preinstalación de aire acondicionado, ofreciendo comodidad y calidad a los futuros propietarios”, dijo Kandel.

Se trata de un barrio en pleno auge, muestra signos de crecimiento con obras en casi cada cuadra, destacándose particularmente la Avenida Elcano (entre Charlone y Roseti), en un predio que anteriormente albergaba la sede de la Asociación Testigos de Jehová y fue sede de Casa FOA en 2021, se construye un complejo residencial.

Sebastián Sommer, desarrollador del proyecto, señaló que “esta área, antes destinada a depósitos, tiene un gran potencial de mejora en urbanismo, seguridad y calidad de vida”.

El objetivo del complejo, llamado Distrito Elcano, es generar un entorno único que combine diversidad urbana con modernización, posicionándose como un barrio autónomo dentro de Chacarita.

El corredor gastronómico de las avenidas Jorge Newbery y Dorrego, conocido como “Chacalermo”, es uno de los focos de este crecimiento. Este término refleja la influencia del boom de Palermo Hollywood y convirtió a la zona en un punto de interés para solteros y parejas jóvenes de entre 25 y 45 años. La mezcla de cafeterías de autor, restaurantes exclusivos y bicicleterías captó la atención de este público moderno y activo, impulsando la demanda inmobiliaria.

Sommer señaló que Chacarita combinará propuestas elegantes y premium, con precios aún por debajo de Palermo pero servicios comparables. “Chacarita es como Palermo Hollywood en 2000, con bodegas, depósitos y PH. La mezcla de usos comerciales y residenciales atrae a jóvenes solteros y familias por su cercanía a colegios y servicios”.

Lo que alguna vez fue una zona de talleres mecánicos y edificios industriales, hoy alberga bares, restaurantes, vermuterías, tiendas de diseño y cafés.

Sofía Grinberg, responsable de marketing de Newland, destaca que su proyecto en la calle Carranza y Avenida Córdoba se encuentra en la etapa final de obra y las primeras viviendas estarán disponibles en los primeros meses de 2025. Las unidades están terminándose con cocinas y baños equipados, y los espacios comunes como el SUM, gimnasio, laundry y coworking se están amueblando”.

El “desbordamiento” de Palermo ha extendido su influencia a Chacarita, que ahora compite con polos gastronómicos y espacios trendy. Su buena conectividad y cercanía a avenidas facilitan el acceso a otras zonas.

“Al margen del crecimiento, sigue siendo de baja densidad y alta demanda, con precios desde USD 2.530/m2, financiamiento flexible y atracción tanto para inversores como jóvenes en busca de modernidad y tranquilidad”, concluyó Grinberg.