En medio de cuestionamientos al régimen de Tierra del Fuego, y en momentos en que el Gobierno está poniendo todo su foco en consolidar las cuentas públicas, comenzó el trabajo oficial de hilar fino. En este sentido, la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía decidió excluir del esquema de beneficios impositivos que tiene la isla desde hace más de 50 años a cinco empresas del rubro textil por incumplir con las obligaciones establecidas para adherir al régimen de promoción. Están involucrados más de 400 empleos, que podrían perderse si las firmas deciden retirarse de Tierra del Fuego a partir de esta decisión.
“Ante incumplimientos por parte de cinco empresas textiles en las obligaciones establecidas para adherir al Subrégimen de Promoción Industrial de Tierra del Fuego, el Gobierno Nacional resolvió que dichas firmas no podrán acceder a los beneficios fiscales que otorga”, dice el comunicado enviado por la cartera que dirige Pablo Lavigne. Según explicaron, las firmas excluidas incumplieron con los requisitos establecidos en el Decreto 594/23, que prorrogó el régimen hasta diciembre de 2028, y no podrán gozar los beneficios impositivos y aduaneros que concede el régimen especial.
Los nombres de las empresas no fueron informadas por las autoridades, pero Infobae pudo corroborar que se trata de las siguientes:
- Hilandería Río Grande: es una empresa dedicada a la producción de hilos de algodón y otras fibras textiles, principalmente para abastecer a la industria textil. Está ubicada en la ciudad de Río Grande, en Tierra del Fuego, y se especializa en el hilado de diferentes tipos de fibras, que luego se utilizan para fabricar productos como tejidos de punto, prendas de vestir, y otros artículos textiles.
- Sueño Fueguino: instalada de Río Grande, Tierra del Fuego, desde 1981, la empresa fabrica ropa de cama para el mercado local y para exportar. Es dueñas de las reconocidas marcas de sábanas Danubio, Suplesa, Cannon, Fiesta y Náutica.
- Barpla: esta empresa fabrica todo tipo de telas en Tierra del Fuego, que se utilizan para moda hasta uniformes e indumentaria de trabajo. Hace tejidos planos y de punto. En este caso, la firma tiene un juicio millonario contra el Estado, que incluso llegó hasta la Corte Suprema, cuentan en el sector. Y uno de los requisitos para adherir a la prórroga del régimen era justamente renunciar a demandas judiciales. La empresa no lo hizo.
- Fabrisur: produce principalmente telas y tejidos, los cuales son utilizados en la confección de ropa y otros productos textiles.
- Claad (Australtex): fabrican desde hilados hasta tejido de punto. Y también cuentan con hilandería. En cuanto al tejido, producen una amplia gama de telas que incluyen jersey, frisa común, frisa invisible, pique, interlock, desagujados, morley, rib, listados, tonel, entre otros. También esta firma, que es la textil más grande del país, según las fuentes del sector, tiene un juicio avanzado contra el Estado nacional.
De acuerdo con el comunicado emitido por la Secretaría de Industria y Comercio, “el Decreto (594) contempla la prórroga del Subrégimen Textil de Tierra del Fuego hasta el año 2028″ y fueron once las empresas textiles que se inscribieron para gozar de las ventajas fiscales que proporciona el sistema. Entre los principales beneficios, se encuentran las exenciones del Impuesto a las Ganancias, del Impuesto al Valor Agregado, de los derechos de importación, de los Impuestos Internos y de otros impuestos nacionales que pudieran crearse en el futuro.
Según se informó, “de las once empresas inscriptas, cinco no cumplieron con las obligaciones necesarias para adherir al régimen. Uno de los requisitos omitidos es la acreditación de origen, un procedimiento que certifica que las telas fabricadas pasaron por el proceso productivo reglamentado en el subrégimen”.
Para poder adherirse a la prórroga del régimen especial fiscal y aduanero, toda empresa debía cumplir con los requisitos previstos en el Decreto 594/23 que son: la renuncia expresa a juicios futuros contra el Gobierno Nacional; la renuncia a juicios futuros contra el Gobierno Provincial; no poseer causas judiciales en trámite por dicho motivo; la acreditación de origen de sus productos en el último año y la acreditación de cumplimiento de obligaciones tributarias y previsionales.
Las empresas excluidas por incumplir con al menos una de estas condiciones tendrán que restituir al Estado el beneficio otorgado desde el 1 de enero de 2024. Hasta ahora, dice el comunicado oficial, los beneficios fiscales de la industria textil del subrégimen de Tierra del Fuego representan un costo anual aproximado de $20.000 millones. Las cinco empresas que fueron desafectadas representan el 80% del volumen productivo total.
El régimen de Tierra del Fuego venció en 2023 y fue prorrogado hasta el 2028, pero en el caso textil, no sólo se extendió algunos meses después -ya que había resistencia del sector textil que fabrica en el continente-, sino que fue prorrogado pero con beneficios acotados. Es decir que a las empresas se les reducirá año a año el beneficio impositivo del que actualmente gozan hasta llegar, al fin del período, con una rebaja importante.