Emprender desde cero en Argentina: los 10 pasos para alcanzar el éxito

A pesar de las dificultades económicas, burocráticas y de financiamiento, el ecosistema emprendedor en el país ha crecido significativamente en los últimos años.

Esta expansión ha sido impulsada por organizaciones que trabajan para fortalecer el entorno y por el surgimiento de empresas tecnológicas que se han convertido en referentes, como Mercado Libre y Globant, entre otras.

María Julia Bearzi, directora ejecutiva de Endeavor Argentina, comparó a los emprendedores con protagonistas de películas de acción: enfrentan obstáculos constantes, pero tienen el potencial de convertir estos desafíos en oportunidades. ¿Cómo lograrlo? la especialista enumeró los diez pasos que debe seguir todo emprendedor para alcanzar el éxito.

No se trata de tener una idea brillante, sino identificar un problema o necesidad en el mercado. Según Bearzi, “cuanto más importante es el problema, más grande es la oportunidad y más chances tiene el proyecto de prosperar”.

En Argentina, muchas oportunidades surgen en sectores como la tecnología, los servicios financieros digitales y el e-commerce. Sin embargo, el contexto económico también genera nuevas necesidades en áreas como la logística, la educación a distancia y los servicios profesionales basados en el conocimiento. Observar el entorno y detectar dónde se pueden crear soluciones que mejoren la vida de las personas es el primer paso para emprender con éxito.

Una vez detectado el problema, llega el momento de pensar en la solución y validarla. Muchos emprendedores fallan por no entender si realmente hay un mercado dispuesto a pagar por su propuesta. La validación puede hacerse a través de encuestas, entrevistas con potenciales clientes o pruebas piloto.

“Antes de invertir en muchos recursos, es clave entender que hay gente dispuesta a pagar por lo que estamos haciendo”, destacó Bearzi. Este proceso de validación no solo permite ajustar la propuesta de valor, sino también aprender más sobre las necesidades específicas del mercado objetivo. En Argentina, donde los recursos suelen ser limitados, validar la idea antes de hacer grandes inversiones es fundamental.

“Luego de la validación, el siguiente paso es definir la propuesta de valor: ¿Qué hace único a tu producto o servicio? ¿cómo vas a diferenciarte de la competencia? En un entorno tan competitivo como el argentino, donde las empresas luchan por destacarse, es crucial tener claro qué vas a ofrecer y cómo lo harás”, agregó la especialista.

La propuesta de valor debe responder preguntas clave: ¿Quiénes son tus clientes? ¿Cuáles son los canales de distribución más adecuados? Además, es importante identificar a los competidores y entender cómo puedes diferenciarte de ellos. “A medida que el mercado argentino se torna más globalizado, también es esencial considerar competidores internacionales”, agregó Bearzi.

Uno de los mayores desafíos para los emprendedores en Argentina es navegar la burocracia. Iniciar un negocio puede ser un proceso lento y complicado, con trámites que requieren paciencia y conocimiento del sistema. “El emprendedor debe volverse un experto en cómo hacer las cosas en este entorno”, agrgó María Bearzi.

Además, la informalidad es un problema en el ecosistema argentino, lo que genera barreras adicionales para quienes buscan formalizarse. Según la especialista, un gran porcentaje de la economía opera en la informalidad, lo que crea desafíos para las empresas que quieren crecer y expandirse de manera estructurada.

Una vez que el negocio está en marcha, es importante no invertir todos los recursos de inmediato. Un enfoque prudente es desarrollar un Producto Mínimo Viable (MVP), una versión básica del producto o servicio que permita probar el mercado sin comprometer grandes cantidades de capital.

“El MVP nos permite lanzar algo lo suficientemente bueno para que la gente esté dispuesta a pagar, pero lo suficientemente flexible para mejorar continuamente”, explicó Bearzi. Este enfoque evita la necesidad de realizar grandes inversiones iniciales y permite ajustar el producto en función del feedback de los clientes.

“La innovación no debe ser un evento único en la vida de una empresa. Los emprendedores exitosos, tanto en Argentina como en cualquier otra parte del mundo, se caracterizan por tener una cultura de innovación constante. Esto significa no solo mejorar el producto o servicio, sino también adaptarse a nuevas tendencias, buscar nuevas oportunidades de negocio y estar siempre dispuestos a cambiar”, remarcó la directora de Endeavor.

Empresas argentinas como Mercado Libre y Globant han demostrado que la capacidad de innovación es clave para mantenerse competitivas en un entorno global. Estas empresas no solo han creado productos exitosos, sino que han transformado sus modelos de negocio a lo largo del tiempo, adaptándose a nuevos mercados y demandas.

El acceso al financiamiento es uno de los mayores obstáculos para los emprendedores en Argentina. Las altas tasas de interés y la dificultad para acceder a créditos, especialmente en las etapas tempranas, hacen que muchos emprendedores recurran a ahorros propios o a préstamos de amigos y familiares. “Todavía es difícil acceder a financiamiento para startups en sus primeros pasos”, mencionó Bearzi.

“Sin embargo, también existen opciones como las aceleradoras, que ofrecen capital inicial y apoyo. Aunque estas inversiones suelen agotarse rápidamente, son una buena forma de comenzar. Además, fondos de inversión y grandes empresas como Globant y Mercado Libre están cada vez más interesados en apoyar a startups argentinas, aunque generalmente no en sus primeras etapas”, agregó.

Una vez que el negocio ha alcanzado cierta estabilidad, es momento de pensar en la expansión. No solo por las dificultades coyunturales del país, sino también porque Argentina, en términos de mercado, es relativamente pequeña. Mirar hacia la región latinoamericana puede ser una opción interesante para escalar el negocio.

Además, Bearzi recomienda aprovechar oportunidades como hackatones, concursos y eventos que permitan a los emprendedores conectarse con mentores, inversores y otros emprendedores. “Todo suma para el crecimiento del emprendimiento”, afirmó la especialista. Estas experiencias no solo aportan capital y contactos, sino también valiosos aprendizajes que pueden ser clave en las etapas de expansión.

El camino del emprendedor es dinámico y está lleno de desafíos. Probar, fallar y aprender es parte del proceso. “El emprendedor que triunfa es el que tiene la mayor capacidad de adaptación”, destacó Bearzi. En un país como Argentina, donde la economía y las reglas del juego pueden cambiar rápidamente, la resiliencia y la capacidad de adaptación son fundamentales para el éxito.

Emprender desde cero en Argentina no es fácil, pero las oportunidades están ahí para quienes sepan detectarlas y tengan la capacidad de adaptarse a los desafíos. El camino no será lineal ni exento de obstáculos, pero con una idea sólida, un buen plan y una dosis de resiliencia, es posible transformar una pequeña idea en un gran negocio. Como dijo María Bearzi, los unicornios argentinos que han logrado éxito global son un faro para las nuevas generaciones, demostrando que con innovación, creatividad y trabajo duro, todo es posible.

Juan Tripier, socio de PwC Argentina, aportó una visión desde su experiencia trabajando con empresas maduras y emprendedores. Según su punto de vista, “Argentina tiene aspectos positivos y negativos para quienes están pensando en iniciar un negocio desde cero”. Uno de los aspectos favorables es que, debido a las características del mercado (cerrado al exterior), no existe tanta competencia, lo que ofrece un campo fértil para nuevas ideas. “El mercado argentino es ávido de probar cosas nuevas, lo que genera un cóctel interesante para los emprendedores”, destacó Tripier.

Sin embargo, salir del mercado local puede ser un reto. Tripier menciona que, en muchos casos, los emprendedores prueban sus ideas en Argentina, y si logran éxito, buscan inversores para replicar el concepto en otros países.

“La combinación entre una buena idea y una necesidad es clave para el éxito”, agregó, resaltando la importancia de enfocarse en un nicho en lugar de diversificar demasiado temprano.

Por otro lado, el acceso al financiamiento sigue siendo uno de los mayores desafíos en Argentina. “El sistema financiero argentino es pequeño, lo que dificulta obtener crédito, tanto para grandes como para pequeñas empresas”, explicó. Sin embargo, Tripier destacó que con las recientes modificaciones en la política monetaria, se espera que más recursos bancarios se destinen al sector privado.

“Además, las líneas de crédito pyme y mipyme están ayudando a aliviar estas dificultades, aunque las empresas deben adaptarse a un sistema que prioriza el patrimonio sobre el flujo de fondos”, apuntó.

En cuanto a los sectores con mayor potencial, Juan Tripier subrayó la importancia del sector tecnológico, que sigue siendo un pilar clave para el país, junto con otras áreas como el petróleo, la energía, la minería y el agro. “Estos sectores generan emprendimientos asociados a la cadena de valor, como la biotecnología”, contó, destacando el impacto que tienen en la economía argentina.

Tripier hizo hincapié en la resiliencia como uno de los rasgos distintivos de los emprendedores argentinos. “Con los ciclos económicos, las crisis y las restricciones, hay que ser creativo y tolerante ante las dificultades. Hemos visto casos donde los emprendedores pivotearon varias veces antes de encontrar su camino”, concluyó.

Registrar una mipyme no solo otorga formalidad, sino también la posibilidad de acceder a beneficios impositivos y programas de asistencia. Para acreditarse, es necesario obtener el Certificado pyme, que AFIP facilita a los empresarios optimizar la carga impositiva y acceder a financiamiento.

El registro está abierto para monotributistas, profesionales independientes, comerciantes y sociedades. Sin embargo, ciertas actividades quedan excluidas, como servicios financieros, inmobiliarios con activos superiores a $193 millones, organizaciones sin fines de lucro y empresas relacionadas con juegos de azar, apuestas o administración pública.

El proceso de registro exige cumplir con ciertos requisitos básicos:

• Tener CUIT.
• Poseer Clave Fiscal nivel 2 o superior.
• Estar inscripto en el Monotributo o el Régimen General.
• Adherirse a la plataforma de Trámites a Distancia (TAD).
• Presentar las declaraciones juradas de IVA y otras obligaciones fiscales correspondientes a los últimos tres ejercicios cerrados.

El procedimiento para registrar una MiPyME es relativamente sencillo y se realiza de manera online, a través del sitio web de la AFIP. Los pasos son los siguientes;

• Ingresar a AFIP: Utilizando tu CUIT y Clave Fiscal, se debe acceder al portal de la AFIP.
• Habilitar el servicio: Desde el “Administrador de Relaciones de Clave Fiscal”, buscar y habilitar el servicio “Pymes Solicitud de Categorización y/o Beneficios”.
• Verificar los datos: Se debe comprobar que la información en el Formulario 1272 sea correcta. Si hay inconsistencias en ventas, empleo o activos, se deberán rectificar las declaraciones juradas previas.
• Presentar el formulario: Tras confirmar que todo está en orden, el usuario debe presentar la declaración. En caso de ser monotributista, solo hay que hacer click en “Siguiente” y luego “Presentar”.

Para empresas que desean acceder al beneficio de pago de IVA a 90 días, hay una opción específica que deben seleccionar en el formulario.

Algunas empresas requieren hacer trámites adicionales, como aquellas que están exentas de IVA o que tienen participación patrimonial con otras empresas. Además, ciertos cambios en la composición del capital societario pueden exigir la presentación de documentación adicional a través de la plataforma TAD.