El 72% de las empresas del sector de indumentaria reportaron una fuerte caídas en sus ventas en el cuarto bimestre del año (julio-agosto), según una reciente encuesta realizada por la Cámara Argentina de la Indumentaria (CIAI). Se trata de un sector particularmente golpeado por la caída del poder adquisitivo y que está peleando sostener los volúmenes del año pasado a base de agresivas promociones y cuotas sin interés. Es más, las empresas extendieron lo más que pudieron la liquidación de invierno y arrancaron con la temporada primavera-verano con una contracción promedio de 25% versus el mismo período de 2023, según fuentes del sector.
Según la encuesta, a nivel nacional, la disminución interanual de las ventas de indumentaria fue del 11%. Y el 37% de los encuestados registraron caídas que van del 15% al 25% en el período analizado.
El 37% de los encuestados reportaron caídas que van del 15 y al 25% durante el cuarto bimestre del 2024 (CIAI)
“Aunque las caídas se intensificaron en comparación con el bimestre anterior, la desaceleración en la tendencia negativa es evidente en relación con los primeros bimestres del año”, aseguraron desde la entidad.
El 76% de las empresas encuestadas señaló la caída de la demanda como el principal problema. La percepción al respecto subió 4 puntos porcentuales respecto a la encuesta del bimestre anterior, cuando concentraba el 72% de las respuestas. No obstante, sigue por debajo de la participación alcanzada en el segundo bimestre (87%). Por otra parte, desapareció entre las respuestas los problemas de pago a proveedores del exterior.
En tanto, el 41% de los encuestados reportó una reducción en su dotación del personal, ya sea por merma de dotación por jubilaciones, renuncias no reemplazadas o despidos. A su vez, el 37% de las empresas está considerando realizar despidos y suspensiones durante los próximos meses “para afrontar la crítica coyuntura actual”. Respecto a la encuesta anterior, esta participación subió 9 puntos porcentuales.
A su vez, el 38% de los encuestados respondió que cuentan con un excesivo nivel de stock en relación con sus ventas. Respecto al bimestre anterior, el número de empresas que reportan niveles insuficientes de stock en relación con sus ventas se duplicó, alcanzando el 12% de las respuestas.
Por otra parte, el 71% de las empresas encuestadas respondió que no está teniendo atrasos significativos en los pagos y cobros. En comparación con la encuesta anterior, la respuesta “sin atrasos significativos” aumentó en 6 puntos porcentuales, mientras que los “atrasos ocasionales” disminuyeron en 11 puntos porcentuales.
Por otro lado, crecieron 8 puntos porcentuales las expectativas positivas respecto a la encuesta anterior, alcanzando el 24% de los encuestados. Las expectativas regulares siguen siendo las dominantes, con el 51% de las respuestas. Aún así, cabe destacar que se observó un aumento de las expectativas muy negativas, alcanzando el 4% de las respuestas. Al mismo tiempo, las expectativas negativas disminuyeron en 5 puntos porcentuales en comparación con el bimestre anterior.
Las buenas expectativas alcanzan el 24% de las respuestas, esto marca una diferencia positiva de 11 puntos porcentuales respecto al bimestre anterior.
Los precios de la ropa
En cuanto a los precios de la ropa, según el Indec, en agosto fue el rubro de menor aumento, con 2,1%, muy por debajo del nivel general, que alcanzó el 4,2%. Desde el sector afirman que están bajando su rentabilidad debido a que no pueden aumentar los precios por la baja demanda.
De acuerdo a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas del sector textil e indumentaria disminuyeron 8% anual en agosto, a precios constantes, pero aún acumulan un incremento de 2,1% en los primeros ocho meses del año frente al mismo periodo de 2023. En el contraste intermensual, declinaron 2,6%.
“Hubo muchos descensos de precios, especialmente en la ropa de marca, y liquidaciones con descuento de hasta 60% que empujaron la venta. Sin embargo, en el balance final, si bien en muchos comercios notaron más gente comprando que en julio, la facturación fue menor incluso a precios corrientes. El Día del Niño impulsó la demanda en muchas tiendas, aunque igual la fecha finalizó por debajo del año pasado (-12,5%)”, aseguró la entidad.
Sucede que los precios son altos en relación al salario: según un informe de la UBA, se necesitan casi tres cuartos de un ingreso mínimo para comprar un par de zapatillas Nike de gama media mientras que en la región ese producto vale, en promedio, al 23% de ese mismo ingreso y menos de un 7% en el caso de Europa.