El déficit turístico alcanzó los USD 2.774 millones en los primeros 7 meses del año y podría duplicarse al cierre de 2024, presionando aún más sobre las reservas internacionales.
El saldo negativo se produce por un aumento sostenido del turismo emisivo y, al mismo tiempo, una caída del receptivo. El revés en la balanza turística inició en febrero, luego del “susto” por la fuerte devaluación de diciembre que llevó el dólar oficial a 800 pesos.
En julio puntualmente, según el Indec, ingresaron 236.099 turistas vía aérea y viajaron al exterior 320.040 residentes argentinos. Esto es una diferencia desfavorable de 83.941 viajeros. En total, por todas las vías de acceso, la cantidad de turistas extranjeros que arribaron a la Argentina cayó 17,7% interanual, mientras que creció 24,4% el número de argentinos que vacacionaron fuera del país. En consecuencia, la cuenta de viajes del BCRA arrojó un déficit mensual de USD 634 millones, el más elevado del año.
“La recesión no parece haber reducido el ímpetu de los argentinos por viajar y la apreciación cambiaria respecto del año pasado impactó negativamente en los ingresos de turistas no residentes. Esto no implica afirmar que la Argentina esté cara, pero claramente está mucho más cara que el año pasado, cuando los turistas cambiaban billetes a un valor que hoy superaría cómodamente los 2.000 pesos. El placer de unos se empieza a convertir en un dolor de cabeza para el Banco Central que tiene que enfrentar pagos crecientes por esta vía”, señaló un informe de Econviews.
También, cabe destacar que en el séptimo mes del año el gasto en dólares por turista argentino en el exterior casi se duplicó respecto a enero (USD 1.495), al alcanzar los USD 2.620. Esto implicó la salida de USD 840 millones en total solo en julio.
El destino más elegido por los argentinos que viajaron desde Ezeiza-Aeroparque en julio fue Europa, seguido por Estados Unidos y Brasil. Pero no pasa desapercibido la cantidad de gente que viajó a Chile para ir de shopping.
“Unos de los tramos más elegido por los argentinos en el mes fue Ezeiza- Santiago, donde viajaron 87.894 personas. Otro destino a destacar es el de Mendoza- Santiago, que tuvo 29.251 viajeros. Con estos datos, podríamos confirmar que hay mucho turismo de compras al país limítrofe”, indicaron desde Econviews.
Los motivos del déficit turístico y la presión sobre las reservas
Alejandro Giacoia, economista de la consultora, aseguró que el déficit por turismo va a sumar probablemente unos USD 5.500 millones en 2024. Esto “complica la situación del BCRA porque tiene reservas negativas y necesita seguir incrementándolas”, dijo el especialista.
En detalle, la mayor sangría de dólares del Banco Central vía turismo se da en un contexto en que las reservas netas marcan un rojo de aproximadamente USD 5.000 millones. Además, el segundo semestre suele ser estacionalmente desafiante en cuanto a ingreso de divisas por la finalización de la cosecha gruesa del agro. En el horizonte se encuentran vencimientos de deuda en moneda extranjera por USD 24.000 millones.
Por su parte, Marcos Cohen Arazi, economista del IERAL, consideró que el saldo negativo de la balanza turística se produce porque el ritmo de devaluación mensual establecido por el Gobierno se mantiene en 2% desde enero, mientras que la inflación, si bien ha ido bajando, se mueve muy por encima de esa cifra.
Así, “los extranjeros pierden capacidad adquisitiva para venir al país y los argentinos ven como se abarata hacer turismo en el exterior. Hasta ahora no se estaba notando pero luego de tantos meses de seguir esa estrategia cambiaria, la balanza turística empieza a pasar factura”, explicó.
En la misma línea, Giacoia afirmó que “este rubro tiene mucha relación con la evolución del tipo de cambio real. Cuando el dólar es más caro el resultado mejora y viceversa. En lo que va del siglo pasamos por momentos de un dólar súper caro como fue a principios de los 2000 y otros donde se abarató como en la década del 2010. El saldo de turismo fue replicando este movimiento”.
En tanto, Rocío Bisang, economista de EcoGo, destacó que si bien el déficit por turismo fue en aumento en los últimos meses, está muy lejos de los valores observados entre 2016 y 2019. Y agregó que “el atraso del tipo de cambio no ayuda al drenaje de reservas por este frente, por lo que hay todavía recorrido para que la cuenta se continúe abultando, aún más cuando caduque el impuesto PAIS en diciembre”.