De las promesas de campaña de Milei, una de las más reclamadas es la que tiene que ver con la liberación del cepo cambiario. El propio Presidente ha dicho en varias oportunidades que el levantamiento de las restricciones se hará cuando estén dadas las condiciones para hacerlo, pero quedan dudas respecto a cuándo sucederá ese equilibrio de las variables que busca el Gobierno.
Vladimir Werning, vicepresidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), se ocupó de aclarar cuál es el contexto del sistema monetario y qué condiciones espera el equipo económico para que el cepo se levante de forma definitiva. El funcionario expuso durante el 45° Congreso de IAEF, que se está realizando en la provincia de Mendoza y aprovechó para despejar algunas dudas sobre las medidas económicas de la máxima autoridad financiera.
“Hay muchas capas de regulación en las que estamos trabajando. Es una frustración el enamoramiento del gobierno anterior con el cepo cambiario. Nosotros estamos enamorados de nuestras mujeres, del cepo nos gustaría haber salido ayer”, comentó Werning.
El vicepresidente del BCRA sostuvo que, para poder hablar de la liberación del cepo hay que entender la relación de las regulaciones sobre el mercado monetario interno. “Se ha hecho mucho, pero queda mucho por hacer y el proceso lleva su tiempo. Una idea que ha fijado Caputo es que en las transiciones que se han vivido en Argentina, siempre hemos terminado en soluciones disruptivas. En esta oportunidad evitamos el plan Bonex, una hiperinflación -que estuvimos a dos semanas de caer- y a un default de la deuda. También evitamos una crisis bancaria”, repasó.
“Lo que estamos haciendo para construir las bases de una competencia de monedas, no pasa solo por levantar el cepo. Tiene que ver con una maraña kafkiana de regulaciones domésticas”, agregó.
El plan de estabilización
Para Werning, en el marco del déficit cero, Argentina está atravesando una gran oportunidad para tener un plan de estabilización en el cual el sector bancario esté al servicio del sector privado, con tasas accesibles y plazos de financiamiento más largos. “La liquidez está”, aseguró.
“En este modelo, creemos que hay un proceso muy potente de remonetización. Estamos viendo una vuelta a los depósitos en dólares. Con bastante velocidad vemos que los bancos se han volcado a buscar negocios y financiamiento”, analizó el vicepresidente del BCRA.
“El BCRA tiene un mandato de estabilidad de precios, pero el mandato de estabilidad del sistema financiero a veces pasa desapercibido. Cuando hay un cambio de régimen económico tan fuerte y las reglas de juego se reconfiguran, es un contexto sumamente complicado. Normalizar la plomería de una sistema que muchas veces estuvo regulado, no es algo que se hace de la noche a la mañana”, insistió.
En este sentido, Werning recordó que este año el BCRA desarmó los puts y los bids. “Son contratos financieros muy creativos que se crearon para sostener el déficit financiero del régimen anterior, que generaban una inflación muy fuerte”, reclamó, durante el evento desarrollado en el hotel Sheraton, de Mendoza.
El funcionario del BCRA, continuó repasando algunas de las medidas implementadas por el Central desde el inicio de la gestión de Milei. “Desde el primer día se estableció que no se le podía dar un sólo peso al Tesoro. Esto fue clave; la caída de la monetización fue una de las razones por las cuales pudimos confiar en que la inflación podía tener una trayectoria descendente después del salto inicial”, sostuvo
En lo que respecta a la política monetaria, recordó que en los primeros días del actual Gobierno había expectativa de que las tasas de interés subieran, pero aseguró que, de haberlo hecho, la inflación no hubiera desacelerado como lo hizo. “Los intereses de los pasivos remunerados generaban un ritmo de emisión estrafalario. No había forma de que una suba de tasas pudiera ofrecernos esperanzas de estar donde estamos hoy”, apuntó.
Por último, Werning destacó la decisión del Gobierno nacional de aplicar incrementos sobre las AUH y redefinir la fórmula jubilatoria. “Dentro de las restricciones presupuestarias, la gestión se ha encargado, luego de la erosión de las jubilaciones y la AUH, de volcar recursos para la recomposición”, recalcó.